LIBRO III EXPOSICIÓN DE LA DOCTRINA CRISTIANA

 

 

 

Prólogo

[843] Mi querido hermano, me pediste que abiertamente expusiera las doctrinas de Valentín, secretas (según ellos imaginan), para que diese a conocer sus muchas facetas, y que al mismo tiempo te ofreciera los argumentos para derrocarlas. Hemos comenzado a ponerlos al desnudo a partir de Simón, padre de todas las herejías; en seguida nos hemos dedicado a descubrir sus enseñanzas y sus consecuencias[219], y finalmente hemos empezado a refutarlos. Mas, si en una obra pude exponerlos, sólo en varias me es posible destruirlos. Por eso te envié dos libros: en el primero se describen sus doctrinas, sus maneras de actuar y los caracteres de su comportamiento. En el segundo se desenmascaran y demuelen sus perversas enseñanzas, y se las deja al desnudo, tal como son.

En el presente libro, el tercero, expongo las pruebas tomadas de las Escrituras, para no pasar por alto ninguno de tus deseos. Incluso, más allá de lo que pedías, te ofrezco los medios para que les arguyas y abatas a aquellos que de una u otra manera enseñan la mentira. Pues la caridad de Dios, rica y sin celos, nos da más de cuanto le pedimos.

Ten en mente lo que ya escribí en los dos primeros libros; porque, añadiendo lo siguiente, podrás tener un muy completo argumento contra todos los herejes, a fin de que les resistas con firmeza y constancia, luchando por la única verdadera fe, fuente de vida, que, recibida de los Apóstoles, la Iglesia esparce. Porque, en efecto, el Señor de todas las cosas dio a sus Apóstoles el poder de (predicar) el Evangelio. Por ellos hemos conocido la verdad, [844] me refiero a la doctrina del Hijo de Dios. A ellos el Señor les dijo: <<Quien os oye a vosotros, a mí me oye; y quien os desprecia, a mí es a quien desprecia y a aquel que me envió>> (Lc 10,16).

[219] <<Successiones>> puede referirse, o a las consecuencias de las doctrinas, o a la sucesión histórica de los líderes de los grupos heréticos.