9 DE MARZO

 

-San Paciano, obispo de Barcelona, 390, tan ilustre, según expresión de San Jerónimo, por la pureza de su vida como por la seguridad de su doctrina. Estuvo casado antes de ser obispo, y tuvo un hijo llamado Flavio Dextro, que compuso una historia, hoy perdida. También San Paciano fue un escritor elegante y preciso. Conservamos tres tratados suyos, dirigidos contra los novacianos, y últimamente se le han atribuído otros opúsculos. De su ortodoxia da fe aquella su frase famosa: "Cristiano es mi nombre y católico mi apellido."

-Santa Francisca Romana, fundadora de las oblatas de San Benito, 1440.

-Los cuarenta soldados mártires de Capadocia, que sufrieron en Sebaste, ciudad de Armenia, bajo la persecución de Licinio. Entre ellos, eran los más significados San Cisión y Cándido, 320.

-San Gregorio Niseno, hermano de San Basilio. Después de haber vivido algunos años en el matrimonio, se consagró a la vida clerical, llegando a ser obispo de Nisa, en Capadocia, y uno de los doctore. del Oriente. Asistió al Concilio ecuménico de Constantinopla (381) e intervino en las grandes discusiones religiosas de su tiempo. En sus numerosos escritos brilla la facilidad, la fuerza, la profundidad, la dulzura y la magnificencia del estilo. Unos son filosóficos, otros exegéticos y teológicos. En diferentes discursos o tratados escribió sobre la obra de los seis días (Hexameron), la formación del hombre, la vida perfecta, los títulos de los salmos, el Cantar de los Cantares, la oración dominical, la fornicación, la usura, la limosna, la penitencia, la fe, la virginidad y los grandes misterios de la vida de Cristo. Combatió a los arrianos, a los eunonianos y a los apolinaristas, fijando con agudeza y claridad la verdadera doctrina en los grandes problemas trinitarios. Murió en 396.

-Santos Cirilo y Metodio, apóstoles de Moravia (7 de julio), s. IX.

-Santa Catalina de Bolonia, clarisa, 1463, famosa por sus éxtasis y por sus penitencias. Conservamos de ella varios libros de vida espiritual, entre los cuales hay que citar las Revelaciones, Las siete armas espirituales y Las dos escalas místicas.