AVES
Religión No Cristiana
En la experiencia religiosa de
los pueblos, las a. ocupan un lugar simbólico, mágico o místico, según
el tipo o ciclo de cultura a que pertenece cada pueblo. Así, entre los
primitivos pueblos cazadores de Europa y América del Norte en los que
está ampliamente desarrollado el chamanismo (v.), las a. son vistas no
sólo como vehículos o receptáculos de las almas, sino también como
expresión de formas de comunicación con los poderes superiores.
El volar, atributo principal de las a., en el mundo chamánico es
atributo del brujo dotado de poderes mágicos. Asimismo, en Oceanía, como
p. ej. en Malekula, los hechiceros (bwili) poseen la facultad de
transformarse en seres alados o a., sobre todo en gallinas o halcones
que se asimilan a los espíritus. Entre los chamanes siberianos, está muy
desarrollado el simbolismo ornitomorfo; el chaman dayaco que escolta las
almas de los difuntos hasta el otro mundo adopta la forma de a.
En todas las religiones del Próximo Oriente antiguo es muy
conocida la concepción del almaa. (fruto quizá de todo un simbolismo del
vuelo) y su mitología, identificando al muerto con un pájaro. El Libro
de los Muertos egipcio describe al difunto como un halcón que echa a
volar. En Mesopotamia, los difuntos suelen ser representados como a. El
mito es verosímilmente más viejo aún: en los monumentos prehistóricos de
Europa y Asia, el árbol cósmico (v. ÁRBOL II) aparece representado con
dos a. en sus ramas; dichas a. son símbolos del alma de los antepasados.
En las mitologías centroasiáticas, siberianas e indonesias, las a.
posadas en las ramas del árbol del mundo representan las almas.
En el mundo neolítico paleomediterráneo del Asia occidental, a.
como la paloma aparecen vinculadas al culto de la Diosa Madre (V. DIOS
II, 2), como sinónimo de la misma, como presencia homónima de ella. En
ocasiones aparecen superpuestas a símbolos característicos del dios
viril, como, p. ej., las astas taurinas, y en calidad de hierofanía del
poder materno. En este sentido, la paloma alcanza particular importancia
en Creta, donde también el pichón mantiene un culto particular de origen
incierto.
La observación del canto, vuelo, modo de comer, etc., de las a.
constituyó uno de los presagios de más estima en la Antigüedad (V.
ADIVINACIÓN I).
V. t.: ANIMAL IV; FÉNIX; PAVO REAL.
J. M. GÓMEZTABANERA.
BIBL.: M. ELIADE, El chamanismo y las técnicas arcaicas del éxtasis, México 1960; C. AuTRAN, La Préhistoire du Christianisme, París 1941.
Cortesía de Editorial Rialp. Gran Enciclopedia Rialp, 1991