A las Iglesias del Sur

Museo Amazónico
Belem, 17 noviembre 2025

Saludo a las iglesias particulares del Sur global reunidas en el Museo Amazónico de Belem, acompañando la voz profética de mis hermanos cardenales en la COP-30, diciendo al mundo con palabras y gestos que el Amazonas sigue siendo un símbolo vivo de la creación con una urgente necesidad de cuidado.

Ustedes eligieron la esperanza y la acción en lugar de la desesperación, construyendo una comunidad global que trabaja en conjunto. Se han logrado avances, pero no suficientes. La esperanza y la determinación deben renovarse, no sólo con palabras y aspiraciones, sino también con acciones concretas.

La creación clama en inundaciones, sequías, tormentas y un calor implacable. Una de cada tres personas vive en gran vulnerabilidad debido a estos cambios. Para ellos, el cambio climático no es una amenaza distante. Ignorar a estas personas es negar nuestra humanidad compartida. Aún hay tiempo para mantener el aumento de la temperatura global por debajo de 1,5°C, pero la ventana se está cerrando. Como custodios de la creación de Dios, estamos llamados a actuar con rapidez, fe y profecía para proteger el don que él nos confió.

El Acuerdo de París ha impulsado un progreso real y sigue siendo nuestra herramienta más poderosa para proteger a las personas y al planeta. No obstante, debemos ser honestos, pues no es el Acuerdo el que está fallando, sino nuestra respuesta. Lo que está fallando es la voluntad política de algunos. El verdadero liderazgo implica servicio y apoyo a una escala que pueda hacer de verdad la diferencia. Acciones climáticas más contundentes crearán sistemas económicos más sólidos y justos. Medidas políticas y climáticas firmes constituyen una inversión en un mundo más justo y estable.

Caminamos junto a científicos, líderes y pastores de todas las naciones y credos. Somos guardianes de la creación, no rivales por sus bienes. Enviemos juntos un mensaje global claro: las naciones permanecen unidas en firme solidaridad con el Acuerdo de París y la cooperación climática.

Que este Museo Amazónico sea recordado como el espacio donde la humanidad eligió la cooperación sobre la división y la negación. Que Dios los bendiga a todos en sus esfuerzos por seguir cuidando la creación de Dios.

León XIV

 Act: 17/11/25    @mensajes papales       E D I T O R I A L    M E R C A B A    M U R C I A