REGLA DE LA COMUNIDAD

O MANUAL DE DISCIPLINA

(IQS)

 

INTRODUCCIÓN

Lo que he sigue ha sido escrito para que los hombres puedan vivir según la Regla de la Comunidad con el fin de: buscar a Dios y hacer lo que es bueno y recto en su presencia tal como él lo ordenó por medio de Moisés y de todos sus siervos los profetas; de amar todo lo que Él ha escogido y de odiar todo lo que Él ha abominado; de mantenerse apartado de todo mal y adherir a toda obra buena; de obrar la verdad, la justicia y el juicio en la tierra; de no caminar aún en la obstinación de un corazón culpable, haciendo todo tipo de mal con intención impura.

Estas leyes quieren ser una guía para todos los que se han ofrecido generosamente para cumplir los preceptos de Dios en piadosa Alianza, queriendo vivir unidos en el designio de Dios y caminar en su presencia de modo perfecto en todo aquello que ha sido revelado en torno a los tiempos prefijados a sus testigos y prometiendo amar a todos los hijos de la  luz, según el puesto que le cupo a de cada  uno de ellos en el designio de Dios, odiando a todos los hijos de las tinieblas, cada cual según el lugar que le cupo a cada uno en la venganza de Dios, según su propia culpa.

Todos los que se han ofrecido generosamente a su verdad aportarán sus conocimientos y su fuerza y sus bienes en la Comunidad de Dios para purificar su conocimiento en la verdad de los preceptos de Dios, para adecuar perfectamente su fuerza a las exigencias de sus caminos y usar de todos sus bienes según el consejo de los  justos.

Con el fin de no quebrantar ni siquiera una de todas las oportunas palabras de Dios en cada momento de la historia, y para no anticipar sus tiempos provisto ni retardar alguna de todas sus victorias, los miembros de la Comunidad no se apartarán de sus verdaderos preceptos, caminando a derecha o izquierda.

Todos los que quieren abrazar la Regla de la Comunidad establecerán una Alianza en la presencia de Dios prometiendo poner por obra todos sus mandamientos y no da marcha atrás en su seguimiento a causa de ningún miedo, terror o prueba, cuando son tentados de la dominación de Belial.

RITOS

Para hacer parte de la alianza.

Cuando alguien es admitido a formar  parte de la Alianza los sacerdotes y los levitas bendecirán al Dios de la salvación y a todas las obras de su fidelidad.

A sus palabras todos los que ingresan a la comunidad de la Alianza dirán: ¡Amén!

Confesión, bendiciones y maldiciones.

Los sacerdotes narrarán las justicias de Dios en sus obras poderosas y proclamarán todas las benignidad de su misericordia sobre Israel.

Los levitas contarán las iniquidades de los hijos de Israel y todas sus perversidades culpables y los pecados perpetrados bajo el régimen de Belial

Terminado lo cual, todos los que vienen a hacer parte de la Alianza confesarán diciendo:

"Somos inicuos,

nos hemos rebelado,

hemos pecado,

hemos obrado como impíos,

nosotros y nuestros padres antes que nosotros,

caminando en la injusticia y no en la verdad.

Pero Dios es siempre justo en todos sus juicios

sobre nosotros y sobre nuestros padres

y ha derramado sobre nosotros las misericordias de su benignidad 

por los siglos de los siglos."

Y los sacerdotes bendecirán a todos  los hombres elegidos por Dios, aquellos que caminan perfectamente en todos sus caminos, y dirán:

"Te bendiga Dios con toda suerte de bienes,

te guarde de todo mal

e ilumine tu corazón con la sabiduría de la vida:

te conceda la gracia de una sabiduría eterna,

y eleve su rostro benigno sobre ti

para que tengas una paz eterna."

Los levitas maldecirán a todos los hombres escogidos por Belial y imprecarán y dirán:

"Maldito seas por todas tus acciones impías culpables.

Dios haga de ti objeto de su venganza

y que la destrucción te persiga

en mano de los sus vengadores.

Maldito seas sin misericordia

por la tinieblas de tus acciones,

maldito seas en la oscuridad del fuego eterno.

Que Dios no tenga piedad de ti cuando lo invoques

que no te escuche cuando expías tus culpas.

Que Dios alce su faz airada

por su deseo de venganza en tu contra

y que no haya palabras de paz

en la boca de los fieles seguidores de los padres!"

Terminadas todas las bendiciones y todas las maldiciones, todos responderán: ¡Amén! Amén!

Maldiciones contra los apóstatas de la Comunidad

Juntos, sacerdotes y levitas dirán:

"Maldito quien comulgando con los ídolos en su corazón

entra en esta Alianza

y por causa de su iniquidad

se aparta luego del mismo Dios.

Quien escucha las palabras de esta Alianza,

se felicita interiormente diciendo:

La paz estará conmigo,

a pesar de que camino en la obstinación de mi corazón.

Su espíritu será destruido,

lo seco con lo húmedo, sin remisión.

El furor de Dios y el cólera de sus juicios

lo consuman para destrucción eterna.

Caigan sobre él

todas las maldiciones de esta Alianza

Que lo escoja Dios para recibir el mal

y sea cortado de en medio de todos los hijos de la luz,

por apartarse del seguimiento de Dios

a causa de los ídolos y de su tropiezo culpable.

¡Ponga Dios su destino en medio de los malditos sin remisión!"

Acabadas las maldiciones todos los que entran a formar parte de la Alianza responderán: Amen! Amen!

Renovación de la Alianza

Así harán todos los años, mientras dura el gobierno de Belial.

En primer lugar entrarán los sacerdotes, en orden, según sus espíritus uno después del otro. Los seguirán los Levitas y por último entrará todo el pueblo, en orden, uno después del otro, divididos por millares, centenas, cincuentenas, y decenas. De ese modo cada hombre de Israel sabrá el su propia posición en la Comunidad de Dios, según su eterno designio.

Nadie se abajará de su puesto ni se subirá más allá de la posición que le haya tocado en suerte. Todos entrarán en una verdadera Comunidad. Dotados mutuamente de humilde bondad, de amor misericordioso y pensamiento justo, aconsejándose santamente, serán miembros de la asamblea eterna.

ENSEÑANZAS

Acerca de la purificación y la expiación.

Pero quien rechaza entrar en la Alianza de Dios, caminando en la concupiscencia de su corazón, no será considerado miembro de la Comunidad, pues su alma aborrece la disciplina, el conocimiento y los juicios justos. No se mantuvo firme en la conversión de su vida y no tendrá contado con los rectos.

Su conocimiento, su fuerza y sus bienes no entrarán en el consejo de la Comunidad, porque  su trabajo es impío y  su reposo está contaminado.

No será justificado mientras siga la obstinación de su corazón y confunde a las tinieblas como si fueran el camino de la luz.

No será admitido a la fuente de los perfectos. No será purificado con expiaciones ni lavado con aguas lustrales ni santificado con aguas marinas o fluviales, ni purificado por ninguna otra agua lustral.

Impuro, impuro será mientras rechace los juicios de Dios, sin dejarse corregir por el consejo de la Comunidad.

Porque por el espíritu del consejo verdadero sobre los caminos del hombre serán expiadas todas sus iniquidades, para que pueda contemplar  la luz de la vida.

En el espíritu santo que le une a la Comunidad en la fidelidad será purificado de todas sus iniquidades. En el Espíritu de rectitud y de humildad será expiado de su pecado.

Su carne será pura cuando su alma se someta a  todos los preceptos de Dios, y luego sea rociada por las aguas lustrales y ser santificada por las aguas de la contrición.

Que afirme, pues, sus pasos, sin  desviarse a derecha o a izquierda, y sin quebrantar ni siquiera una de sus palabras, caminando perfectamente en todos los caminos de Dios, tal como Él lo ordenó al tiempo fijados por sus decretos.

Entonces serán agradables sus expiaciones en la presencia de Dios y habrá para él la Alianza de una Comunidad eterna.

Acerca del origen de los hombres y de las cosas.

Compete al instructor el amaestrar a todos los hijos de la luz en la historia de todos los hijos del hombre. Tiene que ilustrar sobre la diversidad  de sus espíritus, cada uno con sus propias características, sobre sus obras a través de la historia, tanto cuando fue visitado con castigos, como épocas de recompensa.

Tiene que enseñar que del Dios del conocimiento proviene todo lo que existe y lo que existirá. Él fijó todos sus planes antes de que las cosas existieran.

Cuando los seres han visto la luz, completan sus designios, sin cambiar nada, testimoniando su plan glorioso. En su mano están las leyes de todas las cosas, y Él las sostiene en todas sus necesidades.

De las dos especies de espíritus

Él creó al Hombre para dominar el mundo y puso en él dos espíritus. Estos serán sus guías en el camino hasta el tiempo de su visita: son los espíritus de la verdad y del falsedad.

Las generaciones de hijos de la verdad nacen del manantial de la luz, y de las fuentes de la tiniebla provienen los hijos de la maldad.

En mano del Príncipe de las Luces está el dominio de todos los hijos de las justicia: ellos marchan en los caminos de la luz.

En mano del Ángel de la tiniebla está todo dominio de los hijos de la falsedad: ellos marchan por lo caminos de la tiniebla.

Por  causa del Ángel de la tiniebla se extravían  todos los hijos de la justicia, y todos sus pecados y sus iniquidades y sus culpas y todas sus obras rebeldes, están bajo su dominio, de acuerdo a los misterios de Dios, hasta que se cumpla su tiempo. Todas sus castigos y tiempos adversos son debidos a su gobierno hostil. Todos los espíritus que le son partidarios luchan por hacer caer a los hijos de la luz. El Dios de Israel y el ángel de su verdad ayudan a todos los hijos de la luz.

Y Él creó a los ángeles de la luz y a los ángeles de las tinieblas y sobre ellos fundó toda sus obras.  Dios ama por la eternidad a uno de estos espíritus y se complace siempre en todos sus acciones. Dios abomina la compañía del y odia por siempre todos sus caminos.

Los  "caminos" del espíritu de verdad.

Estas son sus caminos en el mundo: iluminar el corazón del hombre, enderezar ante él todas los caminos de la justicia y de la verdad e instalar en el corazón un perpetuo temor a los juicios de Dios. Es un espíritu de humildad y paciencia, de grande misericordia y bondad eterna; de inteligencia, comprensión y sabiduría poderosa, basada en todas las obras de Dios, apoyada en la abundancia de su benignidad y en el espíritu de conocimiento en todos los planes de acción y en el celo por las leyes justas y de planes santos y firmes.

Es misericordioso con todos los hijos de la verdad. de una pureza gloriosa que aleja a todos los ídolos impuros. Tiene una conducta modesta y  camina con toda prudencia para ocultar fielmente los misterios del conocimiento. Estos son los consejos del espíritu para los hijos de la verdad que viven en el mundo.

La visita de todos lo que caminan en él les aportará salud; paz abundante; vida larga; numerosa descendencia, heredera de todas las bendiciones eternas; alegría eterna en la vida sin fin; una corona de gloria con un vestido majestuoso en la luz eterna.

Los "caminos" del espíritu de la injusticia.

Al espíritu de falsedad le pertenecen la codicia, la flojera de las manos en el servicio de la justicia, la impiedad, la mentira, la soberbia, el orgullo, la falsedad, la simulación, la crueldad, mucha hipocresía, la impaciencia y mucha locura, celo insolente, obras abominables cometidas en el espíritu de lujuria, caminos impuros en servicio de la impureza, una lengua blasfematoria, ceguera de los ojos, dureza de los oídos, cabeza erguida y dureza del corazón para marchar por todos los caminos de las tinieblas, astucia maligna.

La visita de todos aquellos que marchas en este camino les traerá: abundancia de castigos a mano de todos los ángeles de la destrucción,  perdición eterna en la ira vehementísima del Dios vengador, terror sin fin, vergüenza sempiterna,  ignominia de la destrucción en el fuego de las regiones tenebrosas. Todos sus descendientes se pasarán en luto desconsolado y en  amargos males en los abismos de su tiniebla, hasta su destrucción, sin que quede entre ellos un sobreviviente o un resto.

Relaciones entre los hijos de la verdad y los de la injusticia.

En estos dos espíritus está la historia de todos los hijos del hombre y todas sus familias, en todas sus generaciones, recibirán en herencia esta división. En sus caminos marchan los hombres y todas sus obras se fundan esta división, según la herencia de cada uno, pequeña o grande, para todos los períodos de la eternidad.

Porque Dios ha establecido a estos espíritus por partes iguales hasta el tiempo final y ha puesto enemistad eterna entre sus partidarios. Los actos injustos son abominación para la verdad y abominación para la injusticia son todos los caminos de la verdad.

Hay una lucha feroz entre los preceptos de uno y de otro, porque no caminan por el mismo sendero. Pero Dios en el misterio de su inteligencia y en la sabiduría de su gloria ha fijado un fin a la duración de la injusticia. En el tiempo de su visita la destruirá para siempre.

Entonces aparecerá para siempre la verdad en el mundo en un mundo contaminado en los caminos de la impiedad durante el gobierno perverso hasta el momento decretado para el juicio. Entonces Dios purificará con su verdad todas las obras del hombre y refinará la estructura del hombre, arrancando todo espíritu de injusticia del interior de su carne y purificándolo con el espíritu santo de toda acción impía. Rociará sobre él el espíritu de verdad como aguas lustrales, lavándolo de todas las abominaciones de la mentira y de la contaminación del espíritu  impuro.

Entonces los rectos serán instruidos en la ciencia del Altísimo y la sabiduría de los hijos del cielo mostrará el camino  a los perfectos. A ellos los ha escogido Dios para una Alianza eterna y a ellos les será otorgada la gloria del Adán. No habrá más injusticia y todas las obras del engaño serán para vergüenza.

En el presente aún están combatiendo los espíritus de verdad y de mentira en el corazón del hombre, y por eso caminarán entre la sabiduría y la estupidez. Si en él domina la verdad, será justo y odiará la perversidad. Si le tocó en suerte la iniquidad, será impío y odiará la verdad. En proporciones iguales puso Dios a estos espíritus hasta el final fijado y la nueva creación.

El conoce siempre los merecimientos de sus obras y los ha dado en herencia a los hijos del hombre para que conozcan el bien y también el   mal. En los tiempos de su visita, Dios determinará la suerte de todo viviente según su espíritu.

REGLA Y LEYES DE LA COMUNIDAD

INTRODUCCIÓN.

Esta es la Regla para los hombres de la Comunidad.

­Integran la comunidad quienes se  han comprometido voluntariamente   ta­nto a­  evitar

todo suerte de mal como a observar todo lo que ha prescrito la voluntad de Dios. Con el fin  de mantenerse  separados de la compañía de los hombres perversos han decidido formar una Comunidad basada en la Ley, en la puesta en común  de los bienes, y en la obediencia a lo que ordenen los hijos de Sadoq, es decir los sacerdotes, custodios de la Alianza  y a los preceptos aprobados por la mayoría de los hombres de la Comunidad observantes de la Alianza.

Ellos tomarán las decisiones en todos los asuntos relacionados con la Ley, con el patrimonio, con el juicio para discernir la verdad, con la unión y la humildad, con  la justicia, el juicio y el amor benigno. De este modo todos avanzarán humildemente en los propios caminos y se  evitará que alguien marche en pos de los deseos del propio corazón, descarriándose  tras del sus antojos de su corazón y de sus ojos, siguiendo los pensamiento del propio instinto hasta cometer algún delito

En la  Comunidad  hemos de circuncidar el prepucio del instinto malvado y la dura cerviz. De este modo la Comunidad de la Alianza eterna pondrá los cimientos firmes de Israel y servirá de expiación para todos los voluntarios del santuario de Aarón. Conformarán una casa fiel en Israel  y junto a los que se unen a ellos por la Comunidad serán juicio de condenación para quienes quebrantan los mandamientos.

Aquí están las normas y preceptos para quienes quieren transitar por estos caminos y desean ser incorporados a la Comunidad.

Todos  los que ingresan en el consejo de la Comunidad harán su iniciación en la Alianza de Dios en presencia de todos los voluntarios.

Se comprometerá jurando sobre su alma, obligándose, con todo el corazón y con toda el alma, a restaurar la Ley de Moisés en todo lo que ella prescribió, de acuerdo a todas las cosas reveladas por la Ley a los hijos de Sadoq, los sacerdotes, que custodian la Alianza y que buscan su voluntad y a la mayoría de los hombres de su Alianza que se han consagrado voluntariamente para caminar fielmente en la voluntad de Dios.

Además se comprometerá en la Alianza, sobre su alma, a separarse de todos los hombres perversos que caminan en el camino de la impiedad. Estos no son contados en la Alianza de Dios, porque no buscaron conocer los misterios secretos, escondidos en sus mandamientos. Hombres que  se perdieron en sus caminos para caer en el fuego de la desolación.

Además trataron insolentemente las cosas reveladas, provocaron así  la cólera para el  día del juicio. En ellos se  cumplirá la venganza prometida en  las maldiciones de la Alianza, y en su contra se harán grandes juicios hasta su exterminio eterno, sin que de ellos quede resto alguno.

MODO DE RECIBIR A LOS NUEVOS MIEMBROS DE LA COMUNIDAD

No se participa de la pureza de los hombres santos por el simple hecho de entrar en el agua,  porque no será limpios quien no se convierta de su perversidad, porque impuro es todo aquél que quebranta su palabra.

Que nadie participe en su servicio y en sus bienes con uno de estos tales, no sea que termine cargando sobre sus espaldas una iniquidad culpable.

Antes bien se mantendrán totalmente apartados de él,  porque así ha sido dicho: ¡consérvate alejado de toda mentira! Los hombres de la comunidad no se opondrán a sus decisiones y sus leyes o preceptos. Nadie coma de los bienes de los hombres malvados, ni gratuitamente beba ni tome de sus manos absolutamente nada, como está escrito: ¡Protégete del hombre violento, porque de él no te puedes fiar!

Es necesario vivir incomunicado de las personas y de los bienes todos los que no son enumerados en la Alianza de Dios. El hombre santo no se apoya sobre ninguna obra vana, y son vanidad los que no conocen su Alianza.

Porque Dios hará desaparecer del universo a todos los que desprecian su palabra y sus obras serán como inmundicia en su presencia y en todos sus bienes hay impureza.

Los que deseen entrar en la Alianza para comportarse según todos estos preceptos, y vivir unido a la Comunidad santa, buscarán discernir su espíritu en común, cada cual con su vecino.

Discurrirán acerca de la sabiduría y de las obras de cada cual en la observancia de la Ley, de acuerdo al mandato de los hijos de Aarón, que voluntariamente se han comprometido a cumplir en la Comunidad para mantener su Alianza. Los que espontáneamente se comprometieron a convertirse en la Comunidad para su Alianza, examinarán todas las leyes que se ha ordenado poner en práctica, de acuerdo a lo que ha sido la decisión de la mayoría de Israel.

DE LA CORRECCIÓN FRATERNA

Los miembros de la comunidad se inscribirán en orden, uno después del otro, de acuerdo a la sabiduría y a las obras de cada uno. De modo que todos aprendan a obedecer, el uno al otro, el mayor al menor. Cada año serán examinados tanto su espíritu como el cargo que ocupan. Todos los años  serán promovidos los que lo merezcan, según la propia sabiduría y la integridad de su vida, o al contrario, serán  degradados de acuerdo a sus extravíos. Cada cual amoneste al otro en la verdad, humildad y en el mutuo amor benévolo.

Nadie hable a su hermano con ira o resentimiento, con dura cerviz o con el odio que nace de un espíritu airado, ni con resentimiento o dureza de espíritu, ni guarde odio en su corazón. Cuando sea oportuno lo amonestará y de ese modo no cargará sobre sí su pecado.

Nadie debe encausar ante los Rabim un asunto cualquiera en contra de su prójimo sin presentar un testigo.

De este modo  caminarán en todas su acciones.

DE LA COMIDA EN  COMÚN

En cualquier lugar donde alguien se encuentre con su prójimo, el menor obedezca al mayor en todo lo tocante al trabajo. Luego coman juntos y juntos bendigan al Señor, y juntos tomen las decisiones.

Dondequiera vivieren doce hombres del consejo de la Comunidad, no falte uno que sea  sacerdote, el cual presidirá las reuniones donde todos serán consultados sobre todos los asuntos, sentándose cada cual según su orden. Y cuando se prepare la mesa para comer o para beber el mosto el sacerdote extenderá su mano en primer lugar para tomar y bendecir las primicias del pan y del vino.

En los lugares donde haya más de diez, nunca falte alguien que medite la Ley, día y noche, continuamente, sucesivamente, uno después del otro.

Los Rabbim velarán juntos la tercera parte de todas las noches de año para leer el Libro y para buscar la justicia y para bendecir a Dios en común.

DE LA REUNIÓN GENERAL

Esta es la Regla para las asambleas de los  Rabbim. 

¡Cada uno se ponga de pie en su lugar asignado!

En primer lugar se sentarán los sacerdotes y luego los más ancianos, y a continuación sentará el resto de todo el pueblo, cada cual en su lugar.

Con este procedimiento serán interrogados todos los miembros de la Comunidad en todas las materias que estén relacionadas con la justicia. Todo argumento y cuestión serán puestos en discusión ante los Rabbim, de modo que cada uno pueda proponer el propio parecer al consejo de la Comunidad.

Nadie interrumpa la palabra del otro y no hable hasta que su hermano haya terminado de hablar.

Además  nadie se atreva a hablar antes del turno que le fuera asignado por escrito.

En la asamblea de los Rabbim nadie diga un palabra sin el beneplácito de los Rabbim y el asentimiento del Inspector de los  Rabbim.

Quien tenga algo que decir a los Rabbim, y que sin embargo no esté en la condición  de quien pueda interrogar al consejo de la Comunidad, se ponga de pie y diga:

¡Tengo algo que comunicar a los Rabbim! Si lo autorizan a hablar, podrá hacerlo.

DEL PERÍODO DE PRUEBA

El prefecto jefe de los Rabbim examinará la sabiduría y las conducta de todos los hombres de  Israel que voluntariamente quieran asociarse al consejo de la Comunidad, 

Y si el candidato se muestra capaz de comprender la disciplina de la Regla, será introducido  en la Alianza para que se convierta a la verdad y se aparte de toda injusticia.

Para lo cual debe ser instruido en todas las Reglas de la comunidad.

Cuando haya llegado el momento de ser admitido, permaneciendo de pié en medio de los Rabbim, serán interrogados todos los que están encargados del oficio de la admisión de los candidatos.

Según salga la votación en el consejo de Rabbim, será admitido o deberá marcharse.

Quien es admitido al Consejo de la Comunidad, no tocará, sin embargo, las cosas puras de los Rabbim, hasta que éstos no hayan examinado su espíritu y sus acciones. Hasta que haya cumplido más de un año entero de prueba no tendrá parte en los bienes de los Rabbim.

Cuando hubiere cumplido un año en el seno de la Comunidad, los Rabbim harán un consulta sobre sus actos, sobre su sabiduría y sus acciones en el marco de la ley.

Será admitido si la votación resultare en favor de su admisión en el seno de la Comunidad, de acuerdo al beneplácito de los sacerdotes y de la mayoría de los miembros de su Alianza.

Sus bienes y su trabajo, quedarán en manos del inspector del ministerio de los Rabbim, pero constará por escrito todo  en su cuenta, quedando para su propio uso. Todavía sus bienes no quedarán totalmente a disposición de los Rabbim

No tocará la bebida de los Rabbim hasta que no se cumpla su segundo año de permanencia en medio a los miembros de la Comunidad. Una vez cumplido el segundo año será nuevamente examinado por orden de los Rabbim.

Si nuevamente obtuviera un parecer favorable para la admisión en la Comunidad, entonces será inscrito en el Orden de su grado en medio a sus hermanos y será como uno de los otros miembros, en todo lo que toca a la Ley, al derecho, a la purificación y a la comunidad de sus bienes. Su consejo será escuchado en adelante en la Comunidad, así como también su juicio.

PENAS PARA AQUELLOS QUE  PECAN

Estas son las reglas con las cuales se juzgará en la investigación hecha en común sobre los siguientes casos.

Si se encuentra entre los Rabbim alguno que ha engañado a sabiendas en materia de bienes, lo separarán de la comida pura de los Rabbim por un año y será privado de la cuarta parte de su ración diaria.

Serán castigados por un año: quien replica a su prójimo con obstinación, quien haya hablado con impaciencia hiriendo los fundamentos de la vida fraterna, quien oponga resistencia a la orden del prójimo, inscrito antes que él, quien haya hecho justicia por su cuenta,

Quien pronunciare el nombre Venerable sobre todas las cosas blasfemando, sea porque está abrumado por la desgracia, o por cualquier otra cosa que le haya sucedido, o leyendo un Libro o bendiciendo, sea separado, y no vuelva de nuevo a formar parte del consejo de la Comunidad.

Si hubiere hablado con ira con alguno de los sacerdotes, que están inscritos en el libro, sea castigado por un año y sea separado, bajo pena de muerte (para salvar su alma), de la pureza de los Rabbim. Pero si ha hablado solo inadvertidamente sea castigado por seis meses.

Quien miente a sabiendas, sea castigado por seis meses.

Quien a sabiendas y sin razón insulta a su prójimo sea castigado por una año y sea separado.

Quien hubiere hablado con su prójimo con engaño, o haya que a sabiendas lo engaña, sea castigado por seis meses.

Pero si hubiere sido negligente con su prójimo sin darse cuenta, sea castigado por tres meses. Pero si es negligente con  los bienes de la Comunidad malgastándolos, los reembolsará íntegramente. Pero si sus bienes no son suficientes para la restitución, sea castigado por 60 días.

Quien guarde rencor contra su prójimo sin razón, sea castigado por seis meses y al máximo por una año.

Del mismo modo se haga con aquél que toma venganza a su arbitrio por cualquier cosa que sea.

El que habrá pronunciado con su boca una palabra tonta, sea castigado por tres meses.

A quien interrumpe el discurso de su prójimo, diez días.

Quien se recuesta y adormece en la sesión de los Rabbim, treinta días.

De mismo modo quien se ausenta sin autorización de una reunión de los Rabbim o si adormece hasta tres veces en una misma reunión, sea castigado con diez días.

Y si ya había sido amonestada y sin embargo se ausenta, sea castigado con treinta días.

Quien deambule  desnudo delante de su prójimo sin estar obligado, inclusive si no hubiere ningún testigo, sea castigado con seis meses.

El hombre que escupa en medio de la reunión de los Rabbim sea castigado por treinta días.

A quien se le vieran sus miembros debajo del vestido o si este es un andrajo tal que deja ver sus desnudeces, sea castigado por treinta días.

Quien se ponga a reír estúpidamente haciendo oír su voz, sea castigado por treinta días.

Quien hubiere alzado su mano izquierda para gesticular, sea castigado por diez días

Quien anduviere calumniando a su prójimo sea separado por un año de la comida pura de los Rabbim, y sea castigado.

Quien va calumniando en contra de los Rabbim, sea expulsado de entre ellos y no vuelva más.

El hombre que murmura contra los fundamentos de la Comunidad será expulsado y que no vuelva más.

Pero si ha murmurado contra su prójimo injustamente sea castigado por seis meses.

El hombre cuyo espíritu aparta del fundamento de la comunidad para traicionar la verdad, y marcha en la obstinación de su corazón, si se convierte, sea castigado por dos años.

En el primer año no tocará la comida pura de los Rabbim y en el segundo no tocará su bebida y se sentará detrás de todos los demás miembros de la Comunidad. Una vez cumplidos dos años completos, se preguntará a los Rabbim sobre su comportamiento y si lo admiten, será nuevamente inscrito en su rango anterior y  podrá nuevamente ser consultado en la reunión de la comunidad.

Todo hombre que hubiera pertenecido al consejo de la Comunidad diez años completos y cambiare su espíritu llegando a traicionar la Comunidad, y abandona la presencia de los Rabbim para caminar en la obstinación de su corazón, no volverá jamás al consejo de la Comunidad.

Si un hombre de los miembros de la Comunidad hubiere comulgado con el que ha sido separado en materia de pureza o de bienes, y coincidan además sus maneras de pensar, que sea también expulsado.

LOS JUECES

Los jueces en la Comunidad

En el consejo de la Comunidad haya doce hombres y tres sacerdotes perfectamente instruidos sobre las  cosas reveladas en toda la Ley, para poder practicar la verdad y la justicia y el juicio y el amor benévolo y para vivir modestamente, cada cual con su prójimo, para  guardar la fidelidad sobre la tierra, con el pensamiento firme y el espíritu contrito, para expiar la iniquidad, practicando el juicio y las dificultades de la prueba para vivir comunitariamente según la regla de la verdad y según las determinaciones del tiempo.

¡La comunidad es eterna!

Cuando sucedan estas cosas en Israel será establecido para siempre el consejo de la Comunidad como una plantación eterna como un Santuario para Israel y como fundamento del Santo de los Santos para Aarón. Estos serán los testigos fieles encargados del juicio, elegidos por la voluntad de Dios para expiar por la tierra y para devolver a los impíos lo que merecen.

Esta Comunidad será el muro probado, la piedra angular preciosa inamovible, cuyos fundamentos no vacilarán ni se moverán  de su propio lugar

Será la morada del Santo de los Santos para Aarón, en el conocimiento eterno de la Alianza de justicia, sacrificio en olor de suavidad. Será una casa acabada y estable en Israel, según los designios de Dios, para expiar en pro de la tierra y para decretar el juicio de los impíos hasta que desaparezca toda iniquidad.

Los separados

Cuando estos elegidos hayan sido instruidos por dos años acerca de los fundamentos de la Comunidad y hallan probado una conducta irreprensible, serán  aislados como una cosa santa en medio al consejo de los miembros de la Comunidad.

Todo lo que estuviere escondido a Israel pero que hubiere sido interpretado por el que busca a Dios y estudia la Ley, no les sea a ellos negado, por temor a la apostasía.

Sobre la permanencia.

Cuando estos formen en Israel una Comunidad de acuerdo a estas reglas, se alejarán del convivio de los hombres inicuos para marchar al desierto y preparar allí el camino del Señor, como está escrito:

"En el desierto preparad el Camino (a Yahveh), aplanad en la estepa un sendero para nuestro Dios".

Este es el estudio de la Ley que ha sido prescrito por mano de Moisés, para obrar en conformidad con todo lo que sido revelado, época por época, tal como lo han comunicado los profetas por medio del Espíritu Santo de Dios.

Del modo de castigar a quien quebrante la Ley.

Estas son las leyes según las cuales se comportarán los hombres de santidad perfecta unos con otros. Leyes para todo el que entra en el consejo de santidad de quienes marchan en la perfección del camino, como lo ha ordenado Dios.

Quien quiera que de entre ellos hubiere violado alguna cosa de la Ley de Moisés, voluntariamente, o con astucia, sea expulsado del consejo de la Comunidad y no vuelva más.

Ninguno de los hombres santos en cosa alguna tenga relación con sus bienes y con su consejo. Sin embargo, si este tal hubiere obrado inadvertidamente, será separado del consejo y que se le aplique la norma: "que no juzgue a nadie, ni se le pida ningún consejo por dos completos".  Si su vida aparecerá sin tacha, si son perfectos su interpretación de la Ley y sus Consejos, y sin no ha pecado de nuevo en dos años completos según el parecer de los Rabbim, si no hubiere errado de nuevo por inadvertencia hasta cumplirse dos años.

Por un pecado de inadvertencia será castigado dos años, pero quien obra voluntariamente no volverá de nuevo. Sólo quien hubiere pecado por imprudencia será puesto a la prueba un bienio completo, y luego, según el parecer de los Rabbim podrá ser re inscrito en su orden por la Comunidad santa.

CONSTITUCIÓN DE LA COMUNIDAD 

Indole escatológica dela Comunidad.

Cuando sucedan estas cosas en Israel, cuando se cumplan todas estas determinaciones que son la base del espíritu de santidad en la verdad eterna, entonces se podrá expiar por el pecado de transgresión y por la perfidia del pecado, para obtener benevolencia para la tierra, sin usar carne de holocaustos y grasa de sacrificios. Serán suficiente la ofrenda de los labios justos, que es como el suave perfume de justicia y la perfección del camino que es como el sacrificio aceptable de un sacrificio voluntario.

De la separación de los hombres de la Comunidad

En ese tiempo se separarán los hombres de la Comunidad para formar una casa santa, un Santuario para Aarón, para unirse al Santo de los Santos, Serán una casa de la comunidad para quienes caminen en la perfección en Israel.

Solamente los hijos de Aarón tendrán autoridad en materia de juicio y de bienes y su palabra decidirá toda litigio entre los hombres de la Comunidad.

Que nos se mezclen los bienes de los hombres santos que caminan en la perfección con los bienes de los hombres de la mentira, que no han purificado sus caminos separándose de la injusticia y marchando en el camino de la perfección. 

Los hijos de Aarón no se apartarán de ningún consejo de la Ley andando detrás de su corazón obstinado. Serán gobernados por las ordenanzas primitivas, aquellas con las cuales  los miembros de la comunidad comenzaron a ser instruidos, hasta que venga el profeta y los Ungidos de Aarón y de Israel.

Preceptos para Instructor

Es son los preceptos para el Instructor a fin de que camine en ellos con todo viviente según las disposición cada época y según el valor de cada hombre: que haga la voluntad de Dios según cada cosa revelada para cada época; que aprenda toda sabiduría que ha sido descubierta a través de los tiempos y según las características de cada tiempo; que distinga y valore a los hijos de Sadoq según su espíritu y sostener los elegidos de cada época según la voluntad de Dios, tal como Él lo ha ordenado; que juzgar a cada hombre según su espíritu; y admita a cada uno según la pureza de sus manos y hágalo avanzar en el camino según su sabiduría.

Así será su amor, así su odio. Que no reprende o provoque a los hombres corruptos, antes bien, preocúpese por esconder el consejo de la Ley a los hombres inicuos.

Enseñe la ciencia de la verdad y el juicio de justicia a  quienes han elegido el camino. A cada uno según su espíritu según las necesidades de cada época, a fin de conducirlo en la ciencia y de ese modo instruya a los hombres de la Comunidad en los maravillosos misterios verdaderos, a fin de que camine perfectamente cada uno con su prójimo en todo lo les ha que les ha sido revelado.

Las virtudes del monje sabio

Este el es tiempo de trazar el camino en el desierto. Él les instruirá acerca de lo hay que en esta época. especialmente el separarse de todo hombre que ha no que no se ha apartado de su camino de iniquidad.

Estas son las normas del camino para el Sabio en estos tiempos, sea en relación al amor, sean en cuanto al odio; en la clandestinidad, un odio eterno hacia los hombres corruptos, dejándoles tranquilos en sus bienes y quehaceres, como hace un siervo con su amos y como un oprimido ante quien lo domina,

Estén llenos de celo por la Regla y por su tiempo de realización, el día por día de la venganza, Esté listo para ejecutar el querer de Dios en todas las cosas en las cuales intervenga, en todo lo que está a su alcance, tal como Él lo ha ordenado.

Todos lo que le suceda lo aceptará de buen grado y en nada se complacerá fuera de la voluntad de Dios. Se deleitarán con todas las palabras de sus labios, nada deseará fuera de lo que Él haya ordenado y siempre hará su voluntad atentamente.

Bendecirá a su Creador, en todos los acontecimientos proclamará su benignidad y con la ofrenda de sus labios lo bendecirá.

EPÍLOGO LÍRICO

Introducción

Cuando comienza el reino de la luz

y a lo largo de todo su desplazamiento.

Cuando el sol se recoge en la morada

que Dios le fijó al principio.

 

Cuando comienzan las tinieblas,

cuando Dios abre su tesoro,

cuando resplandecen la luminarias

abriéndose pase desde su santa morada,

y cuando huyen ante la luz,

retirándose en su refugio glorioso.

 

Cuando llegan las estaciones del novilunio

al verlas en su viaje

en su eterno pasaje de uno al otro

cuando se renuevan, dejando el lugar uno a otro.

 

Es un día grande para el Santo de los Santos.

aparece el Signo

que anuncia las benignidades eternas de Dios,

los comienzos de las estaciones del futuro.

 

Canto al principio de los meses,

al maravilloso orden de las estaciones,

en los días santos por Dios queridos,

para una memoria de los tiempos fijados. .

Himno Litúrgico

 

 

Con una ofrenda de mis labios te bendeciré,

según tu designio establecido para siempre

a los comienzos de los años

y en el rotación de sus estaciones

cuando se cumple la ley de su ciclo

en el día que le ha sido asignado,

una tras otra:

la estación de las mieses,

de la primavera al verano;

la estación de la siembra,

del otoño a la estación de la hierba tierna;

las estaciones de los años y las de las semanas,

Al comenzar el septenario

hasta el tiempo fijado para la liberación.

 

Estará durante toda mi vida

esculpido tu precepto en mi lengua

como el fruto de mi alabanza

y la ofenda de mis labios.

 

Cantaré como hombre sabio

todos mi instrumentos de cuerda

sonarán para la  gloria de Dios

y mi cetra y mi arpa

sonarán cantando su santa Ley.

 

Y mis labios se confluirán

con tus santos juicios,

al amanecer y al poner del sol

renovaré la Alianza de Dios;

por la tarde y en la mañana

celebraré sus preceptos,

y por cuanto tiempo estén en vigor

serán para mí un límite infranqueable.

 

Su juicio reprende mis maldades,

mis pecados están ante mis ojos

como leyes esculpidas.

Por eso digo a Dios: "Justicia mía",

y al Altísimo: "Fundamento de mi bien".

"Manantial del saber",

"fuente de santidad"

"Cima de la gloria",

"Omnipotencia de eterna majestad"!

 

Yo escogeré lo que El me enseñe

me alegraré en sus juicios,

cada mañana, cuando comience

a mover mis manos y mis pies,

 

Bendeciré su Nombre.

cuando salga y cuando entre,

cuando me siente y me levante,

Cuando esté acostado en mi lecho

lo celebraré con júbilo

 

Lo bendeciré con la ofrenda de mis labios, preferibles a los panes ofrecidos por los hombres.

Antes de alzar mi mano para saciarme

con los frutos deliciosos de la tierra.

 

Cuando me dominen el temor y el terror

cuando esté en  angustia y desolación,

lo bendeciré amablemente,

meditando su grande poder.

 

Todos el día sobre su benignidad me apoyaré,

porque en su mano está la suerte de todo viviente,

y todas sus obras son verdad

 

Cuando se desencadene la aflicción

lo alabaré

y cuando llegue su salvación

me alegraré  por igual

Non devolveré a nadie

mal por  mal,

con el bien perseguiré al prepotente

porque a Dios pertenece el juicio, 

de todo ser viviente:

El dará a cada uno

la propia recompensa

 

No envidiaré, imitando a los impíos

los bienes de la impiedad,

nunca aceptaré los beneficios

que vienen de la violencia.

 

La riqueza del hombre corrupto no desearé

hasta el día de la venganza.

Pero mi ira no retiraré de los hombres impíos

y no estaré en paz

hasta que Dios no los haya juzgado.

 

No guardaré rencor e ira

a quien se convierta de la iniquidad,

pero no tendré misericordia

con los que se aparten del camino,

y no consolaré

a quien no han perseverado,

hasta que no vuelva al camino perfecto.

 

No guardaré a Belial en mi corazón,

no se escuchará de mi boca torpeza alguna.

Engaño inicuo, fraude y mentira

no se encontrarán en mis labios.

 

El fruto de la santidad estará sobre mi lengua,

las abominaciones  les serán extrañas.

 

Con himnos abriré mi boca,

Sin cesar contará mi lengua

las justicias de Dios

y la maldad de los hombres,

hasta que no sea consumado su pecado.

 

Las palabras vanas eliminaré de mis labios

impureza y perversidad

no conocerá mi corazón.

 

Prudentemente esconderé el conocimiento,

con ciencia prudente rodearé la sabiduría,

con una valla sólida custodiaré la verdad.

 

Para conservar la fidelidad y  la justicia de Dios

cumpliré íntegramente el precepto

según las exigencias de los tiempos.

 

Practicaré la verdad de Dios y la justicia,

el amor benigno hacia los oprimidos,

daré fuerza a las manos de los pusilánimes,

enseñaré la prudencia a los de espíritu extraviado.

responderé con erudición a quien murmuran de la doctrina

responderé con humildad a los soberbios de espíritu,

con espíritu contrito a los hombres perversos

que extienden el dedo amenazador

y hablan iniquidades y acumulan riquezas.

 

Yo dejo en él mi juicio,

en su mano la perfección de mi camino

y la integridad de mi corazón.

En sus justicias será cancelado mi pecado

 

Porqué del manantial del conocimiento,

ha surgido la luz,

maravillas han contemplado mis ojos,

mi corazón se ha sido iluminado

por el misterio futuro.

 

En la roca sólida está el camino de mis pasos:

ante nada podré vacilar,

la verdad de Dios es la roca de mis pasos,

y su fuerza es el sostén de mi derecha

de la fuente de su justicia proviene mi juicio.

 

En mi corazón desciende la luz

de sus misterios admirables,

en aquel que es eterno he contemplado

la sabiduría escondida al hombre

la ciencia y el consejo prudente,

escondido a los ojos del hombre

fuente de justicia y reserva de fuerza

con una manantial de gloria

escondida al hombre carnal.

 

A quienes Dios a elegido

dio estas cosas en posesión eterna

y a ellos les dio una herencia

en la suerte de los Santos.

 

Con los hijos del cielo ha hecho una asamblea

para formar el consejo de la Comunidad

Su congregación será como los prados santos,

como un sembradío eterno

para cada época futura

 

Pero yo pertenezco a la humanidad impía.

soy parte de la asamblea de los inicuos,

mis faltas, mis delitos, mis pecados,

con la perversidad de mi corazón

pertenecen a la asamblea de los gusanos,

de  quienes caminan en las tinieblas.

 

Pues el hombre no es dueño de su camino

ni puede afirmar su caminar.

A Dios le pertenece el juicio,

y de su mano proviene la perfección del camino.

 

Por su conocimiento todos ha sido hechas

todo lo que existirá

ha sido por su pensamiento determinado,

y sin si su intervención nada se hace.

 

Y si yo tropiezo

las benignidades de Dios serán mi salvación

siempre presentes;

si cayere en la iniquidad de la carne,

confío mi juicio a la justicia de Dios

que permanece por la eternidad.

 

Si se abata sobre mí la aflicción,

él mi alma sacará de la fosa

y guiará mis pasos por el camino justo.

 

Por sus misericordias me ha reconciliado con Él,

con sus benignidades efectuará mi juicio.

En su justicia  fiel me juzgará

y en la abundancia de su bondad

expiará por todas mis iniquidades.

 

En su justicia me purificará

de la impureza del ser humano

y del pecado de los hijos del hombre,

para que así pueda alabar a Dios por su justicia

y al Altísimo por su majestad.

 

Oración final

Bendito seas tu, oh Dios mío, que abres al conocimiento. Confirma el corazón de tu siervo en la justicia. Concede al hijo de tu esclava estar siempre en tu presencia, como lo has querido para los hombres elegidos.

Sin ti no existe un camino perfecto y sin tu voluntad nada podremos hacer. Tu haz enseñado todo conocimiento y todo lo que ha sucedido ha sido hecho por medio de tu voluntad. No existo nade más fuera de ti que pueda oponerse a tu designio y penetrar tu pensamiento santo y contemplar la profundidad de tus misterios y penetrar todas tus maravillas o a la fuerza  de tu poder ¿Quién podría medir tu gloria? ¿Qué es, en efecto, el hijo del hombre entre tus obras admirables?

¿Porqué el nacido de mujer se sentará en tu presencia? ¡Ha sido amasado con el polvo y ha sido destinado como comida para los gusanos, es un trozo sin vida de arcilla modelada u su instinto lo lleva hacia el polvo! ¿Que responderá la arcilla, la obra de un artesano? ¿Qué podrá comprender del designio de Dios?.