JUAN Y LOS SINÓPTICOS

 

 

 

A) CONCORDANCIAS

B) DIVERGENCIAS

C) PARALELOS SUTILES

D) CONTACTOS LITERARIOS

 

Un tema muy debatido en el 4Ev es el de su relación con los evangelios sinópticos. Normalmente se asume que es posterior a ellos, pero se debate mucho el hecho de si los conoció o no. Estudiaremos primeramente los datos sobre sus concordancias y discordancias, y luego pasaremos a evaluarlas de cara a postular un posible contacto directo 

             En algunas ocasiones Juan concuerda con los tres sinópticos:

* El dicho de que el Bautista no es digno de desatar la sandalia del que viene tras él: Jn 1,27 = Mc 1,7; Mt 3,11; Lc 3,16.

* Cinco panes y dos peces en la multiplicación para los 5.000: Jn 6,9 = Mc 6,38; Mt 14,17; Lc 9,13.

* Doce canastos sobrantes: Jn 6,13 = Mc 6,43; Mt 14,20; Lc 9,17.

* Bendito el que viene en el nombre del Señor: Jn 12,13 = Mc 11,9; Mt 21,9; Lc 19,38.

* Anuncio de negaciones y canto del gallo: Jn 13,38 = Mc 14,30; Mt 26,34; Lc 22,34.

* E inmediatamente cantó el gallo: Jn 18,27 = Mc 14,72; Mt 26,74; Lc 22,60.

* La pregunta de Pilatos “¿Eres tú el rey de los judíos” y la respuesta de Jesús: “Tú lo has dicho”: Jn 18,33-37 = Mc 15,2; Mt 27,11; Lc 23,3.

* El título de la cruz: “Rey de los judíos”: Jn 19,19 = Mc 15,26; Mt 27,37; Lc 23,28.

* José de Arimatea pidió el cuerpo de Jesús: Jn 19,38 = Mc 15,43; Mt 27,58; Lc 23,52.

Ver más acuerdos entre los cuatro evangelistas en Jn 4,44; 12,1-8. 12-19. 4-17.25; 13,20.36-38; 18,1.2-12. 13-24. 28; 19,16.17-18. 38-42; 20,1-13.[1]  

Otras veces concuerda con Marcos y Mateo

* “No tengáis miedo” dirigido a los discípulos en la barca por Jesús caminando sobre el agua (Jn 6,20 = Mc 6,50; Mt 14,27).

* Anuncio de la traición: “En verdad os digo, uno de vosotros me traicionará” (Jn 13,21; Mc 14,18; Mt 26,21).

* Nombre de Gólgota y la explicación (Jn 19,17 = Mc 15,22; Mt 27,33).

* La burla: “Salve, rey de los judíos” (Jn 19,3 = Mc 15,18; Mt 27,29).

* La frase: A los pobres los tendréis siempre con vosotros... Esta unción es un preparativo para mi entierro (Jn 12,8.7 = Mc 14,7-8; Mt 26,11-12). 

O con Mateo y Lucas contra Marcos. Estos acuerdos son muy importantes para la cuestión sinóptica, porque podrían explicar alguna de las dificultades mayores contra la teoría de las dos fuentes, que es precisamente los acuerdos de Mt y Lc contra Mc. Se podría alegar que estos acuerdos provienen no de un mutuo contacto literario entre los dos, sino de un contacto mutuo pero independiente con una tradición distinta de la de Marcos, la misma que ha recogido Juan. (Ver lista en Stein)

* El Espíritu viene sobre Jesús: Mt 3,11 y Lc 3,16 Mc 1,8.

* Mención de los fragmentos que sobraron: Mt 14,20 y Lc 9,17 Mc 6,43.

* Palabras de la confesión de Pedro: Mt 3,16 y Lc 3,22 Mc 1,10.

* Reprensión a Pedro por sacar la espada: Mt 26,52 y Lc 22,51 Mc 14,47.

* El gallo canta una vez: Mt 14,13 y Lc 9,11 Mc 6,33.

* el dato de que la tumba de Jesús era nueva: Mt 27,60 y Lc 23,53 Mc 15,46.

 Otras veces sólo concuerda con uno de ellos (Ver lista en artículo de Stein).

 

1. En el contenido

Juan comparte los siguientes materiales con los sinópticos:

Actividad de Juan el Bautista: 1,19-34

Purificación del templo: 2,13-16

Curación del hijo de un funcionario: 4,46-54

Multiplicación de los panes: 6,1-13

Jesús camina sobre las aguas: 6,16-21

La confesión de Pedro: 6,67-71

La unción de Betania: 12,1-12

La entrada en Jerusalén: 12,12-19

La última cena: 13

El anuncio de la traición: 13,21-30

La predicción de las negaciones de Pedro: 13,36-38

Hay múltiples contactos en la historia de la pasión: traición y prendimiento, intentona de resistencia por parte de Pedro, proceso ante el sumo sacerdote, negaciones de Pedro, proceso ante Pilato, opción del pueblo por Barrabás, crucifixión, reparto de los vestidos, título de la cruz, sepultura, la tumba vacía…

Juan presenta sólo tres milagros de los 29 que hay en los sinópticos: la curación del hijo del funcionario, la multiplicación de los panes y el camino de Jesús sobre las aguas. Añade cuatro milagros más que no aparecen en los sinópticos: bodas de Caná (2,1-11), piscina de Betesda (5,1-9), ciego de nacimiento (9,17) y resurrección de Lázaro (11,1-44).

Además en el apéndice hay un relato de pesca milagrosa en paralelo con Lucas, pero en un encuadre totalmente diferente. 

2. En los logia

2,19: Destruid este templo y en tres días lo reconstruiré (cf. Mc 14,58 y paralelos).

3,3:  Nadie puede ver el Reino de Dios si no nace de nuevo (cf. Mt. 18,).

3,35: El Padre ama al Hijo y lo ha puesto todo en sus manos (cf., Mt 11,27).

4,44: Un profeta no encuentra honor en su propia patria (Mc 6,4).

5,25: Quien no honra al Hijo, no honra al Padre que lo ha enviado (cf. Lc 10,16).

12,25: Quien ama su vida la pierde, y quien odia su vida en este mundo, la conservará para la vida eterna (Mc 8,35).

13,16: No es el siervo mayor que su amo (cf. Mt 10,24).

13,20: Quien acoge al que yo envíe me acoge a mí, y el que me acoge a mí, acoge al que me ha enviado (Mt, 10,40).

15,7: Pedid lo que queráis y se os dará (cf. Mc 11,24 y par).

16,32: Llega la hora en que os dispersaréis cada uno por vuestro lado y me dejaréis solo (cf. Mc 14,27).

18,11: El cáliz que me ha dado mi Padre, ¿no lo voy a beber? (cf. Mc 14,27).

20,23: A quienes perdonéis los pecados, les quedan perdonados (Mt 18,18).

 

3. En detalles de información y estilo

En ocasiones las semejanzas pueden afectar incluso a pequeños detalles.

1,32:             Bajada del espíritu “en forma de paloma” (cf. Mc 1,10).

5,8:               Levántate, toma tu camilla… (cf. Mc 2,11).

6,7.13:          Doscientos denarios de pan, doce canastos (cf. Mc 6,37.43).

6,10:             Había hierba en aquel lugar. Comieron 5.000 (cf. Mc 6,39).

9,6:               Uso de la saliva en la curación de un ciego (cf. Mc 7,33).

11:                Conocimiento de Marta y María (cf. Lc 10,38,39).

12:                La unción de Betania tiene paralelos puntuales con la pecadora de Lc 7,36-50.

12,3:             Perfume de nardo de mucho precio (cf. Mc 14,3).

13,2:             Entra el diablo en Judas (cf. Lc 22,3).

14,22:           Referencia a Judas Tadeo como “Judas, no el Iscariote” (Lc 6,16).

14,31:           Levantaos, vámonos de aquí (cf. Mc 14,42).

18,10:           Hirió al siervo del sumo sacerdote y le cortó una oreja (cf. Mc 14,65).

18,13:           Referencia al sumo sacerdote Anás (Lc 3,2).

18,17:           Al momento cantó un gallo (cf. Mc 14,72).

18,18:           Pedro se calentaba (cf. Mc 14,54).

19,2:             La corona de espinas y el manto (cf. Mc 15,17-18).

19,17:           Referencia a la palabra hebrea “Gólgota” (cf. Mc 15,20,22).

19,29:           La esponja llena de vinagre (Mc 15.36).

19,38:           José de Arimatea pidió a Pilato el cuerpo de Jesús (cf. Mc 15,43).

     Lucas es el único sinóptico que hace entrever que Jesús viajó varias veces a Jerusalén (Lc 10,38; 13,34). Lucas y Juan se interesan ambos por Samaria y los samaritanos (Lc 9,52; 10,29-37; 17,11; Hch 1,8). Ambos prolongan el relato de la cena con discursos. En ambos la flagelación en anterior a la condena y pretende despertar la compasión de la turba. En los dos falta el juicio nocturno ante Caifás. En los dos hay tres declaraciones de inocencia por parte de Pilato. En ambos evangelios las apariciones de Jesús están centradas en Jerusalén y no en Galilea…

Ver una lista completa de semejanzas entre Juan y Lucas en el artículo de Stein, en la nota 38 de la p.493-494. 

 

 

1. En la estructura del evangelio

· El relato tiene más discursos que los sinópticos

· Jesús habla en un estilo literario distinto al del Jesús de los sinópticos, y por el contrario, el Bautista y el narrador hablan igual que Jesús.

· Los relatos juánicos están más trabados unos con otros formando una unidad, porque unos pasaje remiten a otros: 4,45 a 2,23; 4,46 a 2,2-22; 7,50 a 3,1-12; 12,42 a 9,22; 18,14 a 11,49; 13,33 a 7,33.36 y 8,21; 15,20 a 13,16.

· El cuadro topográfico es diverso. En los sinópticos hay un solo viaje a Jerusalén, mientras que en Juan hay tres: 2,13; 5,1; 7,19. Jesús pasa la mayor parte de su ministerio público en Judea, mientras que en los sinópticos reside en Galilea.

· El cuadro cronológico es también diverso. En el relato sinóptico Jesús habría celebrado la Pascua una sola vez, mientras que en Juan celebra tres Pascuas, con lo que su actividad pública dura al menos dos años y medio. En los sinópticos tras la entrada a Jerusalén Jesús permanece en ella sólo una semana, mientras que en el 4Ev Jesús pasa en Jerusalén y su comarca al menos los seis últimos meses de su vida. En los sinópticos Jesús muere el 15 de Nisán; en el 4Ev muere el 14 de Nisán. En Marcos a la hora sexta Jesús es crucificado mientras que en el 4Ev es a la hora sexta cuando Pilato dicta sentencia (19,14). 

2) En las informaciones concretas

Aun en aquellos pasajes paralelos existen datos difíciles de concordar.

* La expulsión de los mercaderes en Jn tiene lugar al principio del ministerio, mientras que en los sinópticos tiene lugar el Domingo de Ramos, poco antes de morir Jesús.

* La presencia del discípulo amado al pie de la cruz contradice el testimonio de que todos los discípulos abandonaron al maestro (Mc 14,50).

* En el 4Ev la cohorte romana está ya presente a la hora del prendimiento de Jesús, mientras que en los sinópticos el prendimiento lo realiza la guardia del templo (Jn 18,3 Mc 14,43).

* No aparece la figura del Cirineo, sino que es Jesús quien carga con la cruz (Jn 19,17 Mc 15,21).

* En el 4Ev el encuentro de Jesús con Andrés y los primeros discípulos tiene lugar no a orillas del lago, sino en el Jordán, pues estos eran discípulos del Bautista (Jn 1,35-42 Mc 1,16-20).

* En los sinópticos Jesús después del bautismo en el Jordán va al desierto para ser tentado. En cambio en Jn va directamente del Jordán a Galilea (Jn 1,43).

* En los sinópticos el ministerio de Jesús comienza cuando el Bautista ha sido ya arrestado por Herodes Antipas, mientras que en Juan, los dos ejercen simultáneamente su ministerio durante algún tiempo.

 

3. En las omisiones

Extrañan mucho algunas omisiones típicamente sinópticas. No hay infancia de Jesús, no se describe la transfiguración, ni la institución de la Eucaristía. Otros temas sinópticos están tan cambiados como veremos inmediatamente, que son casi irreconocibles: las predicciones de la pasión, la agonía… 

4. En la teología

* Mientras que en los sinópticos el tema fundamental de la predicación de Jesús es el Reino, en el 4Ev es la autorrevelación del Hijo eterno de Dios: su persona, su preexistencia, su relación con el Padre. En los sinópticos el Yo de Jesús no constituye el centro de los discursos, como en Jn.

* En los sinópticos la mesianidad de Jesús se va revelando poco a poco y está envuelta en misterio. En el 4Ev se manifiesta a los creyentes desde el principio.

* En los sinópticos aparecen una multitud de preceptos morales, en el 4Ev, aunque se exhorta a la guarda de los mandamientos, no se menciona ninguna obligación moral concreta, sino el amor fraterno en general.

* En los sinópticos las controversias con los rabinos versan sobre la interpretación de la Ley, en el 4Ev la única cuestión es la fe o la incredulidad.

* En el 4Ev los milagros son signos de la gloria divina de Jesús más que manifestaciones de su misericordia hacia las miserias humanas.

* El amor de Jesús hacia los pecadores, si se exceptúa el pasaje de la adúltera que no es juánico, no aparece en el 4Ev.  

 

C)  PARALELOS SUTILES CON LOS SINÓPTICOS

Veremos en esa sección algunos pasajes paralelos, en los que el paralelismo no resulta tan obvio. 

1) Las tres predicciones de la Pasión

En los sinópticos, sobre todo en Marcos y Lucas, las tres predicciones de la pasión constituyen el armazón teologal sobre el que se construye el tema de la “subida a Jerusalén”. Sin duda formaban parte de un antiguo esquema de catequesis evangélica antes de su incorporación al evangelio de Marcos. En el 4Ev reaparecen estas predicciones, pero en lenguaje típicamente juánico, lenguaje de exaltación: 

    Mc 8,31   Mc 9,30    Mc 10,32-34

    Jn 3,14    Jn 8,28     Jn 12,32.34 

¡Qué distinta la expresión de las predicciones en uno y otro evangelio! Frente a la crudeza descriptiva de los sufrimientos anticipados en Marcos, Juan predica la muerte como exaltación. El tema de la exaltación estaba ya incluido en el cuarto poema del siervo (Is 52,3 LXX) y será utilizado por la teología cristiana a propósito de la ascensión (Flp 2,9-10). Pero Juan lo adelanta a la misma muerte de Jesús. 

2. La agonía de Jesús

Juan no ha contado la oración del Huerto que traen los evangelios sinópticos. Sin embargo no está totalmente ausente, pues muchos de sus elementos están desperdigados en distintos lugares del evangelio del 4Ev

La escena de Getsemaní es de indudable valor histórico. Difícilmente pudo haberla inventado la Iglesia. En Lucas hay un solo acto en el drama. Jesús va una vez a orar, vuelve y se encuentra a los discípulos dormidos. En Mt y Mc hay tres actos, aunque sólo Mateo ha explicitado la segunda vez la oración de Jesús en una progresión de abandono, y la tercera ida y vuelta de Jesús (Mc menciona sólo la tercera vuelta sin la ida).

Quizás la versión lucana en un acto sea la más original, y el triplicado sea un recurso literario. Ya conocemos otros triplicados: triple negación de Pedro, triple tentación, triple predicción de la pasión… en cualquier caso hay huellas de que el texto de la oración del Huerto ha sido elaborado.

En Lucas sólo hay una fase de separación de Jesús de sus discípulos, mientras que en MM hay dos fases. Primero se aparta del grupo llevando consigo a tres, y luego se aparta de esos tres. Una vez más la versión simple es la de Lucas. En cualquier caso los discípulos estaban dormidos y no pudieron oír las palabras de Jesús, porque estaban lejos. El contenido de la oración es una elaboración teológica.

En Juan no hay escena de la agonía del Huerto, aunque si se menciona la ida de Jesús a un huerto al otro lado del torrente Cedrón. Pero sí hay elementos de esta escena diseminados a lo largo del evangelio, sobre todo en el capítulo 12: 

· Mi alma está triste hasta la muerte: Mc 14,34  / Mi alma está turbada: Jn 12,27

· Esta es vuestra hora: Lc 22,53  /     Ha llegado la hora: Jn 12,23

· Pase de mí esta hora: Mc 14,35 / Sálvame de esta hora: Jn 12,27

· Hágase tu voluntad Mc 14.36 / Glorifica tu nombre: 12,27

· Envío del ángel : Lc 22,43    / Voz del cielo que algunos piensan que es un ángel: Jn 12,28-30

· Levantaos, vamos, viene el que me traiciona: Mc 14,42 / Levantaos, vamos, viene el Príncipe de este mundo: Jn 14,30-31

· Pase de mí este cáliz: Mt 26,39; si no puede pasar el cáliz sin que yo lo beba (Mt 26,42) / El cáliz de mi Padre, ¿no lo voy a beber? Jn 18,11.

Por otra parte, inmediatamente después de la cena, Juan nos habla de una larga oración de Jesús durante todo el capítulo 17. El contenido de la oración, en lenguaje juánico, podría ser un trasunto de la oración sinóptica.

¿Cuál de las dos versiones es más primitiva? Hay quienes piensan que la escena sinóptica es una elaboración a base diversas oraciones en la vida pública de Jesús en lucha continua contra Satanás. La escena del jardín sería una composición literario como la de las tentaciones al comienzo del evangelio. 

3. El proceso de Caifás

La redacción de los distintos procesos de Jesús resulta muy difícil de concordar. Benoit adelanta la siguiente concordancia:

1.- Atestado nocturno no oficial (Jn).

2.- Por la mañana verdadero juicio ante Caifás (Lc), pero con el contenido de MM en el juicio nocturno.

La tradición sinóptica muestra señales de desarrollos, en la falta de uniformidad entre MM y Lc. No coinciden ni en la hora, ni en la presencia de testigos, ni en la alusión al templo. En MM hay una sola pregunta del sumo sacerdotal y una única respuesta de Jesús. En Lucas, dos preguntas y dos respuestas. Lucas omite el rasgado de las vestiduras y el cargo de blasfemia. Las burlas que en MM siguen al juicio, en Lucas lo preceden.

Aunque Juan no narra este juicio oficial ante el sanhedrín, sino sólo el atestado nocturno en casa de Anás, encontramos sin embargo elementos del juicio dispersos por el evangelio. La acusación sobre la destrucción del templo (Jn 2,19) se basa en una afirmación auténtica de Jesús. La primera pregunta del sacerdote (en la versión de Lucas) la trae Juan en la fiesta de la Dedicación: “Si eres el Mesías, dínoslo claramente”, a lo que Jesús contesta: “Os lo he dicho y no me creéis” (Jn 20,24).

La segunda pregunta de Lc 22,70, que en MM da pie a la acusación de blasfemia, recurre en Jn 10,33: “Decís que blasfemo porque he dicho que soy Hijo de Dios”.

En Jn 11,47-53 tenemos un juicio ante Caifás en el que se pasa la sentencia de muerte. La diferencia con la tradición sinóptica es que en este juicio Jesús no está presente. En cuanto a la afirmación sobre el Hijo del Hombre sentado y viniendo sobre las nubes (Mc 14, 62) encuentra un ligero parecido en el logion a Natanael (1,51). 

4. Las tentaciones

En el 4Ev las tentaciones de Jesús están dispersas en los caps. 6 y 7. Claro está que en Juan las tentaciones nos las pone directamente Satanás, sino a través de mediaciones.

La primera tentación de Mateo la encontramos en la petición del pan. La misma muchedumbre que se sació de los panes pide más pan (6,34). Jesús exhorta a interesarse más por el pan que no perece, que en el v. 45 se identifica con la palabra de Dios. También en la tentación mateana se oponía el pan material a toda palabra que sale de la boca de Dios (Mt 4,4).

En Jn 7,1-4 los hermanos de Jesús le piden que realice signos en Judea: “Muéstrate al mundo”. Es la segunda tentación de Mateo que pide signos aparatosos en Jerusalén (Mt 4,6).

En 6,15 la muchedumbre quiere hacer rey a Jesús y éste rehusa y huye al monte solo. Fácilmente podemos ver la relación con la tercera tentación mateana (Mt 4,9).

Probablemente la escena sinóptica (procedente de Q) tiene mucho de composición dramática para situar en un viñeta al principio del evangelio todas las tradiciones sobre la realidad de Jesús a lo largo de su vida. 

5. La confesión de Pedro

En el relato sinóptico esta confesión de Pedro se sitúa inmediatamente después de la segunda multiplicación de MM. La secuencia total es asombrosamente parecida. 

Multiplicación                    Jn 6,1-15      Mc 6,31-34

Camino sobre el mar           16-24           45-54

Petición de signo               25-34           8,11-13 tras la segunda multiplicación.

Discurso sobre el pan          35-59           14-21

Confesión de Pedro            68-69           27-30

Negación                          70-71           31-33

La escena de la confesión comienza en un momento de crisis, con la constatación de la incredulidad y el abandono de algunos discípulos (Jn 6,64 = Mc 8,28), y una pregunta comprometedora para los discípulos (Jn 6,67 = Mc 8,29). En ambos evangelistas Pedro responde en nombre de todos (Jn 6,69 = Mc 8,29). El cambio de nombre que Mateo trae en este momento, Juan lo ha contado ya al principio del evangelio (Jn 1,42). 

 

D)  CONTACTOS  LITERARIOS  JUAN-SINÓPTICOS

 Sobre el problema de los posibles contactos literarios entre Juan y los sinópticos se han dado diferentes respuestas; antes de la segunda guerra había un consenso en que Juan había usado uno o más de los sinópticos. Esto cambió radicalmente con la publicación de P. Gardner-Smith, que defendía la independencia literaria.[2] Surgió un nuevo consenso de que Juan no había conocido ningún evangelio sinóptico. Sigue siendo el punto de vista mayoritario, aunque algunos han vuelto a postular algún contacto.[3]  

1. Juan completa los sinópticos

Juan habría conocido el texto de los sinópticos y habría trata do completar lo que los otros no habían escrito. Es la opinión de Sanday, Zahn y Bernard. Juan habría pretendido, según distintos autores, completar, rectificar o suplantar a los otros. Hoy esta hipótesis está completamente abandonada. 

2. Juan depende de los sinópticos

Juan habría conocido la tradición sinóptica y la utiliza en todos los materiales comunes. Esta hipótesis tiene dos variantes, según que se postule un contacto literario entre Juan y los evangelios actuales, o entre Juan y las fuentes subyacentes a los sinópticos. Barrett afirma la dependencia respecto a Marcos. Boismard la afirma respecto a Lucas. Neyrink defiende que el 4Ev conoció los tres sinópticos. De hecho algunas veces concuerda con uno contra los otros dos. Con todo, nunca se piensa que Juan haya usado los sinópticos de un modo semejante al modo como Mateo y Lucas usaron Marcos. El debió usar un proto-Mateo o un proto-Lucas, o las fuentes escritas utilizadas por ellos, o las fuentes orales  En cualquier caso no hizo un uso significativo de estas fuentes. 

3. No hay ninguna dependencia directa entre uno y otros

Constatamos que las diferencias son más agudas que las semejanzas. Si admitimos las dependencias habría que atribuir los cambios de Juan a una voluntad deliberada de alterar los textos, o al hecho de que no los había comprendido.

En general Juan tiende a concordar más con Marcos y Lucas que con Mateo, pero de manera sistemática Juan no concuerda con ninguno de los tres. El evangelista toma los materiales para componer sus relatos de una tradición independiente, similar, pero no idéntica, a las tradiciones representadas en los sinópticos.

Con esto no queremos negar que a lo largo de las distintas etapas de elaboración del 4Ev no se dieran algunas influencias cruzadas, en grado menos, de las tradiciones sinópticas. Por más replegada sobre sí misma que estuviese la CJ no pudo vivir totalmente aislada de las otras iglesias cristianas y tendría un cierto conocimiento de las otras tradiciones evangélicas.

Un ejemplo de estos contactos puede estar en esos paralelos menores que reseñábamos anteriormente. Reseñábamos allí algunos paralelos con Marcos y con Lucas. Con Mateo hay muchos menos contactos. Quizás el aerolito juánico (Mt 11,25-30) que se deslizó en Mateo, y algunos materiales referentes a Pedro (Jn 1,41-42; 6,68-69; 21,15-17).

Estos paralelos no llevan en absoluto a una tesis tan exagerada como la de Boismard que pretende que Lucas fue el redactor final del cuarto evangelio. Bastaría con suponer que la tradición independiente que subyace a Juan tenía rasgos comunes con las fuentes peculiares de Lucas.

Siguiendo a Brown y a Dodd, en estos apuntes asumiremos la independencia de Juan respecto a los sinópticos y sus fuentes, y la existencia de una tradición histórica independiente que se remite últimamente a testimonios procedentes de testigos oculares diversos de aquellos que respaldan la tradición sinóptica.

Notas


[1] Ver artículo de R.H. Stein en bibliografía.

[2] Saint John and the Synoptic Gospels, Cambridge 1938.

[3] Ver en bibliografía un artículo de Neirynck.