Valores educativos

 

 Victòria Cardona i Romeu
Educadora familiar

 

El tema La familia, escuela de valores, se ampliará con los siguientes artículos:

1.- Valores educativos
2.- Laboriosidad, reflexión y orden
3.- Obediencia y alegría
4.- Comportamiento, civismo y solidaridad
5.- Fortaleza y generosidad
6.- Amistad y lealtad
7.- Bondad y sensibilidad

El fenómeno de los cambios espectaculares del significado de los valores, en el mundo actual, debido a las ideologías que influyen en nuestra sociedad, que propugnan un individualismo y un materialismo que producen, con mucha persistencia, una influencia negativa en nuestros hijos. Hoy más que nunca, con ánimo y de forma positiva, debemos insistir en la necesidad de formar en valores auténticos a los niños y a los jóvenes. Somos conocedores de la realidad actual, si bien tenemos la esperanza de que la familia sea portadora de valores que perduran en la conciencia de las personas. Es por esto que el tema de los valores educativos tiene hoy en día una prioridad en el espacio familiar. Se trata de que los hijos integren en su existencia los modelos asumidos por la convivencia y adquieran una visión de trascendencia por un futuro más humanizado.

Iniciaremos estas reflexiones sobre los valores que se transmiten a través de la familia, de la escuela, y otros ambientes en que nuestros hijos e hijas se relacionan, especialmente los amigos. En artículos anteriores, de este Curso de ''Formación para padres'', algunos importantes ya han quedado indicados: el valor de la responsabilidad, la sinceridad, la discreción, el respeto, la tolerancia, etc... De hecho todos los valores están entrelazados; no sería coherente decir: ''ahora vivo la sinceridad, después diré una mentira''; la persona que vive la sinceridad, se esforzará por decir siempre la verdad y seguramente lo hará con discreción, prudencia y caridad. Las personas no son como un mueble de cajones que se abren y después, una vez cerrados no se vuelven a abrir, sino que los valores conforman toda la vida como una unidad.

Un valor es una cualidad, algo valioso, que siempre perfecciona a la persona que lo posee; de valores materiales o técnicos no hablaremos, lo haremos de los que ayuden a la educación personal. Lo que deseamos los padres es que hijos e hijas aprendan el primer valor: saber amar. En nuestros días, con los contravalores y de la manera que se ensalza la violencia, la pornografía, el buscar el placer, podría confundir-se amar con ambicionar la propia comodidad, el egoísmo, el capricho. La felicidad, que proporciona hacer el bien, podría ser mal interpretada y buscarla en el dinero, el dominio o la satisfacción inmediata, cuando esta tiene que ser consecuencia de la bondad de la persona generosa.

Procuraremos profundizar y hacer reflexionar a padres y madres sobre la importancia de enseñar a vivir la comprensión, aprendiendo a perdonar y olvidar agravios, para conseguir una convivencia vivida con gozo y serenidad. Se puede asegurar que la jerarquía de valores la tenemos que encontrar en esta frase, que oí hace muchos años: ''En primer lugar buscar a Dios, en segundo lugar servir a los demás, y por último, pensar poco en un mismo.'' Sería un resumen de todo lo que iremos diciendo a lo largo de estas consideraciones, que meditadas por cada cual según sus circunstancias particulares, llegará a la conclusión de lo que quiere legar a sus hijos.