Rubén
EnciCato
Un nombre propio que designa en la Biblia: (I) a un patriarca; (II) a una tribu
de Israel.
I. EL PATRIARCA
Rubén, el primogénito de Jacob (Gn. 46, 8; 49, 3) mediante Lia, nació en
Mesopotamia y fue llamado Rubén (“ved, un hijo”) como alusión a la mortificación
de Lia debido a la aversión previa de Jacob hacia ella: “El Señor vio mi
aflicción: ahora mi esposo me amará.” (Gn. 29, 32). Rubén fue privado de su
derecho de primogenitura en castigo por un incesto cometido en Canaan (Gn. 35,
22; 49, 4). Fue él quien sugirió que en lugar de matar a José, sus hermanos lo
lanzaran a un pozo, de donde Rubén vanamente esperaba rescatarlo (Gn. 37, 18-24;
29-30; 42,22). Cuando Jacob se rehusó a permitir que Benjamín fuera a Egipto con
sus hermanos, Rubén ofreció a dos de sus hijos como garantía de que Benjamín
sería vuelto de regreso (Gn. 42, 37). A estos escasos datos bíblicos
concernientes al primogénito de Jacob, numerosos e inválidos detalles Hagádicos
han sido añadidos en la literatura rabínica y apócrifa.
II. LA TRIBU DE ISRAEL
Situado al este del Jordán y compartido con la tribu de Gad, el territorio
original del rey amorrita, Sehon, entre el Arnon y el Jeboc y tan al oriente
como Jaser, en la frontera de los amonitas. El lote respectivo de Rubén y Gad no
puede ser delimitado con perfecta seguridad, sin embargo con base en Josué 13,
15-23, las posesiones territoriales de Rubén usualmente están descritas como al
este del Mar Muerto y el Jordán, entre Gad al norte y Moab al sur. Entre los
pueblos prominentes de los rubenitas estaban Baalmaon, Bethphogor, Cariathaim,
Dibon, Hesebon, Jassa, Medaba y Sabama. Durante el viaje por el desierto, al
tribu de Rubén sumaba más de 40,000 hombres (Núm. 1, 21; 26, 7) y marchó con Gad
y Simeón al lado sur de Israel. Del mismo periodo data la rebelión de los jefes
rubenitas, Datán y Abiron contra Moisés y su castigo ejemplar (Núm. 32, Josué
22). Junto con los gaditas, se mantuvieron distantes de la guerra contra Sisara
(Jueces 5), fueron sometidos por Hazael (4Re. 10, 32-3) y llevados a la
cautividad por Teglathphalasar (734 a.C). Los rubenitas fueron principalmente
una raza pastoral, poco adecuados para resistir la invasión y varias de sus
ciudades cayeron en manos de Moab mucho antes de que las tribus del oriente del
Jordán fueran hechas cautivas por los asirios (cfr. Is. 15).
FRANCIS E. GIGOT
Transcrito por Herman F. Holbrook
Traducido por Antonio Hernández Baca