LA TREMENDA REALIDAD DEL PURGATORIO
 


1.- Es una enseñanza fundamentada en la Palabra de Dios:

Hay pasajes bíblicos que hablan muy claramente sobre la realidad del purgatorio. Uno de ellos, y tal vez el principal, es cuando el Apóstol San Pablo nos habla sobre el día del juicio y sobre qué pasará con aquellas personas que tuvieron fe y sirvieron a Dios, pero que su obra no fue tan buena, él lo explica así:

A) Las acciones -buenas o malas- es lo único que decidirá nuestro destino:

"Un día se verá el trabajo de cada uno. Se hará público en el día del juicio, cuando todo sea probado por el fuego. El fuego, pues, probará la obra de cada uno. Si lo que has construido resiste el fuego, será premiado. Pero si la obra se convierte en cenizas, el obrero tendrá que pagar. Se salvará pero no sin pasar por el fuego" (1Cor 3,13-15)

Esto es precisamente el purgatorio, una purificación que algunos necesitaremo s para poder disfrutar plenamente de la amistad eterna con Dios.

Así está escrito en todas la Biblias del mundo, en palabras muy similares. A esta realidad que la Sagrada Escritura nos muestra le llamamos purgatorio=purificación. Que esta palabra no venga en la Biblia no nos interesa, pues tampoco viene la palabra "Trinidad" ni "Encarnación" y el protestante las acepta.

Lo que importa no es la palabra, sino la realidad de lo que significa, y en ese aspecto el Purgatorio está muy claro en la Sagrada Escritura.

B) En el Cielo no entrará nada manchado:

La existencia del Purgatorio es una consecuencia lógica de la Santidad de Dios, pues si Él es el tres veces Santo (Is 6,3) o sea la plenitud de la Santidad y Perfección, entonces quienes estén junto a Él también deben de serlo (Mt 5,48), por eso, quien es fiel a Dios, pero no se encuentra en un estado de Gracia Plena a la hora de morir, no puede disfrutar del Cielo porque la mis ma Biblia dice que en la Ciudad Celestial:

"No puede entrar nada manchado (impuro)" (Ap 21,27)

Entonces, si un cristiano no puede entrar al Cielo por tener alguna mancha o impureza, ni tampoco sufrir el castigo eterno, es claro que tendrá que 'pagar' en esta vida o en la otra. Esto está escrito en la Biblia:

"Al que calumnie al Hijo del Hombre se le perdonará; pero el que calumnie al Espíritu Santo, no se le perdonará ni en este mundo ni en el otro" (Mt 12,32).

"Te aseguro que no saldrás de allí hasta que hayas pagado el último centavo". (Mt 5,26)

C) Nosotros podemos Expiar por los difuntos: .."él tenía presente la magnífica recompensa que está reservada a los que mueren piadosamente, y este es un pensamiento santo y piadoso. Por eso, mandó ofrecer el sacrificio de expiación por los muertos, para que fueran librados de sus pecados". (2 Macab 12,45)

2.- Desde los primeros siglos los cristiano s creemos en su existencia:

El Purgatorio como estado temporal de purificación fue creído desde el principio por los primeros cristianos que destacaron por su fe y santidad y a los cuales se les llama 'Padres de la Iglesia', conozcamos lo que dijeron algunos de ellos sobre este tema:

* Año 211. Tertuliano: "Nosotros ofrecemos sacrificios por los muertos..."

* Año 307. Lactancio: "El justo cuyos pecados permanecieron será atraído por el fuego (purificación)..."

* Año 386. Juan Crisóstomo: "No debemos dudar que nuestras ofrendas por los muertos les lleven un cierto consuelo...".

* Año 580. Gregorio Magno: "Respecto a ciertas faltas ligeras, es necesario creer que, antes del juicio, existe un fuego purificador...".

3.- ¿Qué es el purgatorio?

Más que un lugar físico, es un estado de vida temporal para la persona que muere en Gracia de Dios pero imperfectamente purificada, y d onde, mediante el sufrimiento, la Iglesia purgante se purifica para disfrutar plenamente de la Presencia de Dios.

El caso del malhechor al que Jesús le dice que estará con él en el Paraíso, nos muestra que esa purificación en el sufrimiento algunos la tendrán aquí, y otros la tendrán en la otra vida como lo menciona San Pablo (1 Cor 3,13-15).

Cualquier persona que haya amado a un ser querido y que por alguna circunstancia la deja de ver por una temporada sabe del sufrimiento de no poder disfrutar por un tiempo del amor de esa persona. Sabe que está viva, que lo ama y que lo volverá a ver, pero al no tenerlo plenamente cerca experimenta alegría y a la vez un dolor y deseo de tenerlo cerca por siempre, cara a cara. Algo similar, pero de mayor intensidad y forma será la 'purificación'.

Lamentablemente, cuando muchos hermanos protestantes dicen que el Purgatorio es un invento de la Iglesia, simplemente lo dicen porque desconocen lo que la Biblia y la hi storia nos dice sobre ese aspecto, ¡qué gran sorpresa se llevarán si les toca entrar en él!

Muchos de ellos se salieron de la Iglesia Católica sin conocer la Biblia y ahora siguen allá igual, sin conocimiento de la misma. La leen mucho, pero la entienden poco. Lo peor es que el católico no la entiende nada, porque ni siquiera la lee. Qué increíble. Ya es tiempo de corregir esto.

4.- ¿Cómo evitar el Purgatorio?

Esta decisión le toca solo a Dios, pero nosotros podemos empezar a purificarnos de la siguiente manera:

a) Llevar VIDA SACRAMENTAL: Confesarnos (vivir en Gracia de Dios permanentemente)y Comulgar (diariamente de ser posible)

b) Orar diariamente (de preferencia integrarse a algun grupo de Oracion), sin olvidar el REZO DIARIO del Rosario. La intercesión de María es potente!

c) Leer y Meditar la Palabra de Dios (al menos un versículo diariamente)

d) Corregir todo lo que no va de a cuerdo con la Voluntad de Dios; romper lazos con pecados repetitivos, hacer las paces con el prójimo (empezando por la familia), y esforzarse por llevar una vida santa (pedirle a Dios que El ya nos vaya santificando) ...EN EL OCASO DE NUESTRAS VIDAS, SEREMOS JUZGADOS EN EL AMOR (San Juan de la Cruz)