Catequesis sobre la Eucaristía
Autor: Arquidiócesis de Guadalajara
Fuente: Catholic.net
TEMA 6
Eucaristía, acción de gracias y alabanza al Padre
OBJETIVO
Descubrir que el dar las gracias en sentido
pleno es vivir en Cristo para llenar la vida
personal y comunitaria con este sentido.
NOTAS PEDAGOGICAS
Aunque este tema se desarrolla pedagógicamente
en forma de preguntas y respuestas, no se
trata de memorizarlas sino de lograr una
experiencia profunda de lo que significan las
actitudes de alabanza y de acción de gracias a
Dios, para vivir de manera más consciente
estos aspectos importantes de la Misa.
Conviene que el catequista lea y comente los
textos bíblicos más importantes que se
enuncian en el desarrollo del tema. Como
recurso didáctico, el catequista puede hacer
las preguntas al grupo, escuchar algunas
respuestas de los participantes y, finalmente,
responderlas con las ideas que se presentan en
este tema.
VEAMOS
¿Cuándo y por qué damos gracias?
Analiza el prefacio de la Plegaria Eucarística
IV del Misal Romano y trata de responderte las
preguntas: ¿cuándo y por qué damos gracias?
“En verdad es justo darte gracias, y deber
nuestro glorificarte, Padre Santo, porque tú
eres el único Dios vivo y verdadero que
existes desde siempre y vives para siempre;
luz sobre toda luz. Porque tú sólo eres bueno
y la fuente de la vida, hiciste todas las
cosas para colmarlas de tus bendiciones y
alegrar su multitud con la claridad de tu
gloria. Por eso, innumerables ángeles en tu
presencia, contemplando la gloria de tu
rostro, te sirven siempre y te glorifican sin
cesar. Y con ellos también nosotros, llenos de
alegría, y por nuestra voz las demás
criaturas, aclamamos tu nombre cantando.”
PENSEMOS
Origen del nombre Eucaristía.
Los nombres que recibe la Eucaristía a veces
se refieren al contenido del misterio
celebrado; otras veces, en cambio, se toman de
algún rito o signo; es el sentido del primer
nombre que recibe la Eucaristía, como “Cena
del Señor”.
¿Cuál es el nombre más antiguo para designar
la Eucaristía?
El nombre más antiguo que aparece en el Nuevo
Testamento es el que usa Pablo: cena del Señor
(ver 1Co 11, 20 y contexto), o bien fracción
del pan que se halla en Lucas 24, 35 y en
Hechos 2, 42.45; 20, 7.11; 27, 35.
¿Cuáles son los elementos rituales de esta
“Cena del Señor”?
1. Se dice una plegaria de “bendición” (ver Mt
26, 26; Mc 14, 22); de “Eucaristía” (ver Lc
22, 19; 1Co 11, 23).
2. Se distribuye el pan partido o fraccionado
como Cuerpo de Cristo.
3. Sigue una plegaria de “Eucaristía” (ver Mt
26, 27; Mc 14, 23).
4. El vino del cáliz es dividido entre los
presentes como sangre de la Alianza.
Esta secuencia ritual de gestos y de palabras
no se justifica sólo por una voluntad
sentimental repetitiva de las mismas acciones
que Jesús hizo en la noche que se dirigía a la
muerte, sino que sucede como respuesta al
mandato de Cristo “háganlo en memoria mía”
(1Co 11, 24.25).
¿Cuál es el significado o el objeto de estos
gestos rituales o secuencia de ritos?
El objeto del “memorial” de la “cena del
Señor” es la Pascua nueva y definitiva del
Nuevo Testamento (ver 1Co 5, 7). La Cena del
Señor es la proclamación de la muerte del
Señor (ver 1Co 11, 26). No sólo agradecer la
obra de la Creación - liberación - Alianza,
sino la obra salvadora obrada por Cristo = su
memorial.
¿Por qué se le da el nombre de Eucaristía o
Acción de Gracias a la “Cena del Señor”?
El elemento de “plegaria” que en la narración
de Mt 26, 26-28 y de Mc 14, 22 aparece como
“bendición“ (= eulogía) en el momento de
romper el pan, y como “acción de gracias” (=
Eucaristía) en el dar el vino- fue el elemento
determinante en la valoración de la “Cena del
Señor” en su rito y en su contenido o
significado. O sea, de llamarse “plegaria de
acción de gracias” pasó a denominarse todo el
rito como “Eucaristía”.
¿Cuáles son los antecedentes de la “Plegaria
Eucarística” o su genealogía?
De su origen judío nadie duda, pero hay
opiniones encontradas respecto a cuál de las
formas de oración bendicional judía se puede
considerar como su antecedente directo:
a) La “berakah”, oración de bendición.
Algunos ejemplos: la de David (ver 1 Cró 16,
4-36 y 29, 10-20), Salomón (1 Re 8) o Esdras
(Es 8-9).
La estructura de estas oraciones suele ser:
- Una alabanza inicial a Dios o una invitación
a ella (bendito Yahvé, Dios de Israel... alaba
alma mía al Señor... alabad, pueblos, al
Señor...).
- Un “memorial” o enumeración de las
maravillas obradas por Dios, un repaso a la
obra de la creación y de la historia de
Israel.
- La alabanza desemboca en una petición o
intercesión: que Dios siga protegiendo a su
pueblo.
- Para acabar con una alabanza final.
En el tiempo de Jesús, además de las famosas
“semoneh esreh” (las 18 bendiciones), se
fueron recopilando pronto muchas más en el
tratado llamado “berakoth” (bendiciones). El
mismo Jesús ora a su Padre con este género de
bendición “Yo te alabo, Padre, Señor del Cielo
y de la tierra, porque...” (Mt 11, 25-26; ver
Lc 10, 21), “Te doy gracias, Padre, porque me
has escuchado...” (Jn 11, 41).
b) La “birkat ha-mazon”, oración de acción de
gracias.
La idea central de esta oración no es tanto la
admiración, la bendición o alabanza, sino
directamente la acción de gracias. Es una
oración tripartita: bendición, acción de
gracias y petición:
- Bendito seas tú, Señor Dios nuestro, rey del
universo...
- Te damos gracias, Señor, Dios nuestro,
porque hiciste heredar a nuestros padres una
tierra deseable, buena y extensa...
- Apiádate, Señor, Dios nuestro, de Israel tu
pueblo...
c) La “todah”, oración sacrificial de
alabanza.
Esta oración incluye una confesión tanto del
propio pecado como de la grandeza de Dios.
Esta “todah” es bipartita: una primera parte
es de alabanza y acción de gracias, de
proclamación de las “mirabilia Dei”
(maravillas de Dios), una verdadera
celebración anamnética de la obra de Dios; una
segunda de tono de petición y súplica, que
surge espontáneamente de la alabanza anterior,
para que Dios siga actuando en favor de su
pueblo.
¿Cuáles son los dos significados de Eucaristía
que le da el libro de la Didajé, primer
testimonio más antiguo después de la
Escritura?
El nombre de Eucaristía (= acción de gracias y
alabanza) es antiquísimo; se encuentra en el
libro de la Didajé o la Doctrina de los Doce
Apóstoles (c. 9-10.14).
Eucaristía significa al mismo tiempo:
- la plegaria que se dice en la Eucaristía (=
acción de gracias)
- y la plegaria que hace la eucaristía (pan y
vino consagrados en el cuerpo y la sangre de
Cristo).
¿En qué sentido la Eucaristía es un sacrificio
de alabanza y de acción de gracias?
La Eucaristía es sacrificio: de acción de
gracias, memorial y presencia; banquete, y
prenda de la gloria futura.
Con el sacrificio de Jesucristo, máxima
bendición, “la Iglesia expresa su
reconocimiento a Dios por todos sus
beneficios, por todo lo que ha realizado
mediante la Creación, la redención y la
santificación” (CIC 1360). “Este sacrificio...
sólo es posible a través de Cristo: El une los
fieles a su persona, a su alabanza y a su
intercesión, de manera que el sacrificio de
alabanza al Padre es ofrecido por Cristo y con
Cristo para ser aceptado en El” (CIC 1361).
ACTUEMOS
Aprender a dar gracias y cómo hacerlo.
¿Cuál es la mejor forma para dar gracias a
Dios Padre?
Analiza los siguientes dos textos. Uno es el
himno de Laudes del Miércoles de la semana I:
Sentencia de Dios al hombre
antes que el día comience:
“Que el pan no venga a tu mesa
sin el sudor de tu frente.
Ni el sol se te da de balde,
ni el aire por ser quien eres:
las cosas son herramientas
y buscan quien las maneje.
El mar les pone corazas
de sal amarga a los peces;
el hondo sol campesino
madura a fuego las mieses.
La piedra con ser la piedra,
guarda una chispa caliente;
y en el rumor de la nube
combaten el rayo y la nieve.
A tí te inventé las manos
y un corazón que no duerme;
puse en tu boca palabras
y pensamiento en tu frente.
No basta con dar las gracias
sin dar lo que las merece;
a fuerza de gratitudes
se vuelve la tierra estéril.” Amén.
El otro es el versículo 12 y 13 del Salmo 116
(115):
“¿Cómo a Yahvéh podré pagar todo el bien que
me ha hecho?
La copa de salvación levantaré, e invocaré el
nombre de Yahveh”.
¿Basta con repetir la acción ritual de la
Eucaristía o cuál es la mejor manera de dar
gracias?
CELEBREMOS
Pasar de un rito de acción de gracias a una
vida en acción de gracias.
MONITOR: Escuchemos uno de los
textos bíblicos de la Institución de la
Eucaristía y como ha dicho San León Magno:
“Imitemos lo que tratamos”.
MONITOR: La acción de gracias
sacerdotal, a la que nos capacita nuestro
bautismo para ofrecer sacrificios
espirituales, no se ejercita sólo participando
sacramentalmente en la Eucaristía, sino
traduciendo nuestra vida en un pan entregado y
sangre derramada. Un pan tomado en las manos
de Jesús (= actitud de abandono);bendecido por
su palabra (= actitud de escucha);partido por
el Sacrificio (= actitud de oblación); y
repartido para dar vida como el vino dado a
beber en acción de gracias (= actitud de
disponibilidad).
(Meditemos en silencio este texto evangélico y
preguntemos al Señor Jesús ¿qué me quieres
decir para mi vida?).
MONITOR: Con un signo que traigamos con
nosotros hagamos una expresión de gratitud.
Algo que podamos presentar a los
pies del Crucifijo y ofrendar con alegría a
los demás hermanos. ¿Qué vas a presentar tú?.
(Cada uno empieza a ofrecerlo en su doble
dimensión: signo a Dios pero en el prójimo).
TODOS al terminar concluyen con esta oración u
otra en forma espontánea a manera de oración
de los fieles:
Dios nuestro, que nos reúnes para celebrar la
Cena del Señor, en la cual tu hijo único,
antes de entregarse a la muerte, confió a su
iglesia el sacrificio nuevo y eterno,
sacramento de su amor, concédenos alcanzar por
la participación en este sacramento, la
plenitud de amor y de la vida.
Por nuestro Señor Jesucristo.
Amén.