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FRANCISCO JAVIER SANCHO FERMÍN: DIRECTOR DEL CENTRO INTERNACIONAL TERESIANO SANJUANISTA
“EL CARMEN DE LOS MÁRTIRES ES COMO EL ESCRITORIO DE SAN JUAN DE LA CRUZ”
De trato afable y de mirada profunda, el Dr. Francisco Javier SANCHO FERMÍN, es un hombre de pensamiento y de verdades. Doctor en Teología Espiritual, especialista en Edith Stein, conferenciante singular, profesor en el Teresianum de Roma y en la Facultad del Norte de España, actual director del Centro Internacional Teresiano Sanjuanista de Ávila, responsabilidades que distribuye con la entrega a la creación de la Universidad de la Mística en Ávila, de la que se espera su inauguración el año próximo.
- ¿Piensa que cada vez, con mayor fuerza, se impone el retorno a la mística por llamada del corazón? - A juzgar por el interés hacia las figuras señeras de la mística, como son Teresa de Jesús y Juan de la Cruz, yo diría que sí. De todos los rincones del mundo nos llegan a diario peticiones para poder estudiar, profundizar y realizar cursos de especialización en estos autores. Una universidad de la Mística podría ser la respuesta a todo ello, puesto que el Centro Internacional Teresiano Sanjuanista, se nos ha quedado pequeño.
- ¿Qué le conduce a Granada? - Precisamente nos trae la mística. Todos los años, el grupo de estudiantes que han cursado estudios en el Centro de Ávila, personas de todas las edades y mundos, (este año somos casi cuarenta), hacemos la ruta Teresiano Sanjuanista, por toda Andalucía. La ciudad de Granada, en este sentido, es visita obligada. El Carmen de los Mártires digamos que está considerado casi como el escritorio de San Juan de la Cruz. En esta atmósfera granadina hay mucha espiritualidad. Además, esta ciudad, es muy querida por todos nosotros. Es curioso que, entre los primeros socios de la fundación del Centro Internacional Teresiano Sanjuanista, se encuentren muchos granadinos. Quizás, el Carmelo, ha favorecido ese clima de apoyo. Nos mueven, en definitiva, muchas causas para hacer parada en esta urbe.
- ¿Cómo director del Centro Internacional Teresiano Sanjuanista, háblenos de sus pretensiones? - Pretendemos que la persona se desarrolle integralmente, desde los valores profundos que posee y que puede descubrir si es orientada y educada para ello. Queremos invertir en valores de vida, apostar por una cultura de paz y solidaridad. La profundización y el estudio, al igual que la dimensión ecuménica de la experiencia de la mística, favorece una formación en los valores espirituales y el cultivo de una religiosidad auténtica, bajo el diálogo, y a partir de una vida comprometida.
- ¿Qué le motiva a estudiar y traducir, la obra de Edith Stein? - A Edith Stein le toca trazar un puente de diálogo entre el mundo del pensamiento moderno y la espiritualidad cristiana, una labor que ella misma comenzó a realizar desde su conversión a la fe cristiana. Como judía, como filósofa, como feminista, como carmelita descalza que sigue de cerca las huellas de Teresa de Jesús, Juan de la Cruz y Teresa de Lisieux, su situación es privilegiada, avalada por un final martirial dentro de la tragedia última y más grave que sacudió Europa, la de la persecución nazi. Por tantos motivos, pues, se trata de un testigo muy cualificado de nuestro tiempo. Yo empecé su estudio, hace catorce años, en principio atraído por la curiosidad. Luego surgió el apasionamiento por ahondar en sus obras. Apenas había nada traducido. Ahora estamos publicando sus obras completas, en cinco bloques temáticos.
- ¿Quién era realmente Edith Stein? - Es una buscadora y una enamorada de la dignidad del ser humano, trampolín que le lleva a encontrarse con Dios. Resumiendo, la esencia de su mensaje viene a ser esto: rescatar al hombre, rescatarlo de su grandeza.
- ¿Cuáles son esos elementos más significativos que, a su juicio, caracterizan la espiritualidad steiniana? - El contenido central de su vivencia en el Carmelo: la oración y la cruz; elementos que configuran su vocación al Carmelo y que en ella significan un modo de apostolado y de entrega en las manos de Dios. Fundamentalmente desde estos dos temas se comprende su vivencia carmelitana.
- ¿Hay sed de espiritualidad en el mundo?- Creo que sí. Lo principal y fundamental de la espiritualidad es que la persona se de tiempo a si misma, tenga sus espacios de silencio, de serenidad para encontrarse consigo mismo. Esa es la puerta, la de la oración, la de abrirse el alma a Dios. Como dijo Stein, modelo y maestra de espiritualidad, la oración es la hazaña más sublime de la cual es capaz el espíritu humano.
Víctor Corcoba Herrero
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