Artículo III


DE LAS PROFECÍAS HECHAS RESPECTO A JESÚS

 

572. Después de los milagros realizados en Jesús y por Jesús, pasamos a considerar los milagros realizados en orden a Jesús: son como los rayos que iluminan desde fuera la imagen de Jesús, de por sí ya extraordinariamente resplandeciente -o a manera de las voces que le aclaman a El desde fuera como Legado Divino.

 

Tales milagros son:

 

a) los que nos narran los evangelios con ocasión de su anunciación, o de su nacimiento, o de su transfiguración o de su muerte...;[1]

 

b) Las profecías mesiánicas referidas a Jesús. Para tratar de estas profecías presentamos la tesis siguiente.

 

573. En estas profecías del Antiguo Testamento se hallará una imagen de Cristo que ha sido escrita antes de su vida en esta tierra. Respecto a esto téngase en cuenta que de muchos se escribe la vida después de su muerte; de algunos, pocos por cierto, mientras viven, v.gr. de los Sumos Pontífices; ¿ahora bien de quién se escribe la vida, antes de haber nacido?.

 

Esto solamente puede decirse de Jesucristo. Ahora bien cada uno de las profetas han aportado solamente algún o algunos rasgos; sin embargo al final surge la figura completa y patente. Cada una de las profecías son, si se quiere emplear estos símiles, a manera de pequeños arroyuelos, o así como el agua que baja de un alto despeñadero la cual serpentea por distintos lugares a través de las sinuosidades de la montaña.... hasta que habiendo confluido todos los arroyuelos viene a ser un río con renombre, ancho, profundo, que recoge las distintas aguas de los distintos lugares a través del valle. Así pues en términos similares podemos hablar también de las profecías hechas acerca de Jesús: al comienzo parecían independientes y no claras bajo todos los puntos de vista... hasta tanto que en virtud de la concurrencia de todas la profecías viene a resultar una profecía clara y patente. Y no es extraño el que, una vez realizada la profecía en el Nuevo Testamento, cobren luminosidad las profecías del Antiguo Testamento. En efecto hay un adagio que dice: el Nuevo Testamento está latente en el Antiguo Testamento y el Antiguo Testamento está patente en el Nuevo Testamento.

 

TESIS 35. LAS PROFECÍAS CUMPLIDAS DEL ANTIGUO TESTAMENTO PRUEBAN LA DIVINA LEGACIÓN Y EL TESTIMONIO DE JESÚS NAZARENO.

 

574. A este argumento apeló Jesús Nazareno en muchas ocasiones; así en general al invitar a los fariseos en medio de una controversia: escrudiñáis las Escrituras, ya que en ellas creéis tener la vida eterna, pues ellas dan testimonio de mí (S.Juan 5,39). Y al dialogar con los discípulos de Emaús comenzando por Moisés y por todos los profetas, les fue declarando cuanto a El se refería en todas las Escrituras (S.Lucas 24,27; de tal forma que aquellos discípulos, al no ser éste un argumento difícil fueron llamados por Jesús hombres sin inteligencia y tardos de corazón para creer todo lo que vaticinaron los profetas (S.Lucas 24,25). Lo cual también se lo descubrió del mismo modo a todos los discípulos: esto es lo que yo os decía estando aún con vosotros, que era preciso que se cumpliera todo lo que está escrito en la ley de Moisés y en los Profetas y en los Salmos de mí. Entonces les abrió la inteligencia para que entendiesen las Escrituras (S.Lucas, 24,44s).

 

575. Igualmente los evangelistas, como S.Mateo y S.Juan, y otros apóstoles ponían de relieve el argumento extraído de las profecías del Antiguo Testamento. S.Pedro, entre otras cosas, decía: de El [de Jesús] dan testimonio todos los Profetas, que dicen que por su nombre cuantos creen en El recibirán el perdón de los pecados (Hech. Apóst. 10,43); y tenemos aún algo más firme, a saber, la palabra profética, a la cual muy bien hacéis en atender, como a lámpara que luce en lugar tenebroso... (2 S.Pedro 1,19). Y S.Pablo, estando prisionero en Roma, a muchos judíos que vinieron a su casa junto a él les expuso la doctrina del reino de Dios, y desde la mañana hasta la noche les persuadía de la verdad de Jesús por la Ley de Moisés y por los Profetas (Hech.Apóst. 28,23).

 

576. Y no tiene que parecer extraño el que este argumento fuera muy usado, sobre todo en apologética respecto a los judíos, que conservan y conocen las Sagradas Escrituras, y que haya sido un argumento solemne en la tradición de los Padres de la Iglesia primitiva. Por ello tampoco a nosotros nos está permitido el no hacer uso de este argumento.

 

577. En cuanto al modo de proceder, que observaremos, expondremos las profecías en el orden en que se encuentran en los libros del Antiguo Testamento: de este modo el orden será más continuado y aparecerá con más claridad el desarrollo y cómo con el paso del tiempo la imagen del Mesías cobraba claridad; después las profecías podrán reducirse a unidad mediante el orden de la vida de Cristo o a través de los capítulos de los temas.

 

En estas profecías, una vez supuesta la historicidad de los libros del Antiguo Testamento (véanse n.215-219 y el tratado de la Introducción al Antiguo Testamento).

 

1. Hay que exponer el sentido de las palabras, lo cual lo haremos de forma especial mediante una glosa puesta entre corchetes;

2. hay que mostrar que los textos se refieren al Mesías, y esto constará o bien por el análisis del contexto -o bien por el análisis de los hechos milagrosos que se predicen, los cuales no pueden aplicarse a nadie más que al Mesías- o bien por la tradición de los judíos, la cual la enseñaron los rabinos y el targumin, o bien lo testifica el sentido popular, según se halla en los evangelios como en libros históricos que son... De este modo deberán usarse los métodos de la exégesis natural, prescindiendo ahora de las fuentes de la revelación en cuanto tal; ya que en esta demostración de la mesianidad de Jesús, en base a razones apologéticas y puramente históricas no podemos usar las fuentes en cuanto reveladas sin caer en un circulo vicioso.

 

Ahora bien al echar mano de estos métodos no hay posibilidad de dedicarse ahora a explicaciones demasiado amplias, y a proponer o examinar todas las interpretaciones, que se han dado respecto a cada uno de los textos; sin embargo, pasando esto por alto, elegiremos aquella interpretación, que o bien es cierta o bien la tengamos como más probable. Ciertamente será útil en este tratado "de Jesu Legato Divino" el trazar según nuestras posibilidades una imagen íntegra de Jesús.

3. Hay que mostrar que se han cumplido las profecías y ciertamente solamente en Jesús; lo cual se conseguirá sin esfuerzo, una vez que se presupone la narración evangélica.

4. Pasaremos por alto muchos datos que pueden aducirse los cuales se refieren al reino Mesiánico o a la Iglesia y no a su Rey; o los cuales se dice del Mesías solamente en un sentido típico o simbólico.

 

578. LOS ADVERSARIOS prácticamente coinciden con los que atacan las profecías hechas por Jesús (véase n.501). Y según muchos protestantes modernos y liberales, los profetas, al hacer sus profecías que se llaman mesiánicas no pensaban en los acontecimientos de la historia de Jesucristo o de la Iglesia a los cuales los escritores del Nuevo Testamento aplican las profecías como cumplimiento de las mismas. Así G.ROSENMÜLLER, B.WEISS, A.DILLMANN, C.STEURNAGEL, W.SANDAY.

 

579. LA DOCTRINA DE LA IGLESIA en cuanto a la naturaleza profética del Antiguo Testamento en relación con Jesucristo queda propuesta en diversos textos: en el Concilio Florentino (D.711) en el Sílabus de Pío IX (D.1707), en el Concilio Vaticano I (D.1790), en las Respuestas acerca de la índole del libro de Isaías (D.2115-2119) y acerca de los primeros capítulos del Génesis (D.2126), y sobre los Salmos proféticos y mesiánicos (D.2136), y respecto al evangelio de S.Mateo (D.2153).

 

580. VALOR DOGMÁTICO. El probar la legación divina y el testimonio de Jesús por las profecías del Antiguo Testamento está contenido en la revelación divina, v.gr. en los textos antes aducidos en los cuales Jesús y los apóstoles apelan a este argumento (n.574s). Así pues en virtud de esto la tesis es al menos de fe divina, e indica un argumento de suyo suficiente si bien tal vez no pueda proponérseles a algunos ahora con aquella claridad con que se proponía a los antiguos judíos. Y por otra parte la Iglesia enseña como algo escrito el que nosotros tenemos "un oráculo profético más seguro" y al mismo tiempo indica que los profetas pronunciaron las profecías como signos totalmente ciertos en orden a sellar la revelación divina (D.1790).

 

581. PRUEBA.

 

Al efectuar la prueba.

1) expondremos las profecías, y entre tanto indicaremos el cumplimiento de las mismas en el Nuevo Testamento;

2) mostraremos que todas estas profecías, en base a todas las cuales consideradas simultáneamente confeccionaremos el argumento, se refieren exclusivamente a una persona determinada, esto es al Mesías;

3) trataremos de propósito la verdad histórica, la verdad filosófica y la verdad relativa de estas profecías.

 

 

1. EXPOSICIÓN DE LAS PROFECÍAS, ESTO ES BOSQUEJO DE LA IMAGEN DE JESUCRISTO.

 

582. PROTOEVANGELIO 0 PRIMER ANUNCIO DEL SALVADOR. En Génesis 3,1-7 se describe la seducción de la mujer por la serpiente, y del hombre por la mujer; y después de haberse excusado de su pecado ante Dios (V.8-13), Dios mismo aparece juzgando a la serpiente, a la mujer y al varón: y al mismo tiempo pronunciando el primer oráculo de una salvación futura que se iba a alcanzar en detrimento y perjuicio de la serpiente que acababa de vencer (V.14s). Ahora bien este oráculo es un cierto consuelo en medio de las penas y tribulaciones que se predicen a la mujer y a Adán (V.16-19). Pasemos a considerar cada uno de los versículos:

 

* Versículo 14. Díjole luego el Señor Dios a la serpiente..., a saber aquel animal singular del cual se habla en el V.1; el cual aparece en verdad como un ser racional en muy alto grado, ya que habla, y se dice de él [de la serpiente] que es "la más astuta de todas las bestias del campo"; ahora bien es un ser racional que obra el mal y que pretende el mal, ya que induce a la desobediencia y a una ética independiente de Dios (V.4s) "no, no moriréis; ...seréis como Dios (norma de la moralidad], conocedores del bien y del mal"). A saber, es "aquel gran dragón, aquella serpiente antigua que se llama el diablo y Satanás" (Apoc. 12,9), del cual se habla constantemente en las Escrituras de los judíos, y que en este momento probablemente usa de la serpiente a manera de posesión.

 

Se emite el juicio en contra de la serpiente sometiéndola a la mujer, así como somete la mujer al marido, como que el que ha inducido a otro al pecado debe también él mismo someterse al otro al que ha inducido al mal:

 

"Por haber hecho esto, maldita serás entre todos los ganados y entre todas las bestias del campo. Te arrastrarás sobre tu pecho y comerás el polvo todo el tiempo de tu vida, esto, es que la serpiente sea el símbolo de tu sujeción y de tu humillación.[2]

 

* Versículo 15. Pongo perpetua enemistad entre ti [la serpiente, el diablo, del cual se ha hablado antes) y la mujer [a saber "la mujer" de la que se ha hecho antes referencia, Eva, a la cual también se dirige Dios en el V.16; y al mismo tiempo "la mujer" en sentido colectivo según parece, ya que el castigo de las tribulaciones y del sometimiento (V.16) es un castigo general. Sin embargo se intenta el que sea designada de un modo peculiar o eminente "cierta mujer" ésta no es Eva, puesto que Eva no tuvo las enemistades especiales con el diablo que se indicarán -ni tampoco Eva le venció al diablo- ni siquiera mediante el futuro Redentor ya que lo que obra la posteridad, según costumbre de los hebreos. habría que atribuírselo al padre Adán, no a la mujer. -Por tanto se designa de un modo especial cierta mujer de donde ha de venir la victoria sobre el diablo, la cual mujer tendrá enemistades especiales con Satanás, las mismísimas enemistades, las mismas que se indican inmediatamente después que se darán entre el linaje de la serpiente y el linaje de la mujer], y entre tu linaje [el linaje de la serpiente, a saber los demonios, los cuales a causa de su maldad están unidos en parentesco con el príncipe de los demonios y en sentido metafórico son engendrados por él] y el suyo [esto es la posteridad de la mujer, esto es el hijo inmediato, puesto que no se dice "examine, de tu linaje"; y esto se hace de un modo congruente con el nacimiento virginal del hijo ya que no se cita al Padre].

 

De esta mujer designada especialmente (en sentido literal más pleno -según parece), la cual tiene las mismísimas enemistades con el diablo que tiene su hijo, a saber enemistades absolutas y perpetuas, brota también la victoria total y plena y sobre el diablo.

 

Ella misma [TM tiene el pronombre de tercera persona masculino, חרא, hu', a saber aquel hijo; el texto de los LXX tiene el masculino.

 

De donde el hijo, el linaje de la mujer alcanzará la victoria de la cual se hablará después; ahora bien nada impide el que también la madre misma se diga que vence mediante el hijo mismo; y así pudo prevalecer en la Vg. la lección ella misma] te aplastará la cabeza [TM "shuf" - aplastar; esto es alcanzará una victoria total y plena sobre la serpiente, cuya cabeza es sometida y destruida], sin embargo no sin algún daño del vencedor, ya que añade y tu le morderás a él el calcañal [TM tu le aplastarás, el mismo verbo que antes: shuf"; el texto de los LXX

- observabas ad insidias (acechar). De donde la victoria sucedió con alguna pasión ó sufrimiento y alguna acechanza por parte de la serpiente en el calcañal de aquel futuro Salvador].

 

Así por este texto aparece claro el futuro Salvador, y ciertamente en lucha espiritual contra el linaje del diablo; y se ve claro también que se le reserva un papel especial a la mujer Madre del Salvador.

 

583. Después en LAS PALABRAS DE NOE, con las que maldice a Canaán y bendice a Sem entre su hijos, se muestra el deseo de que Dios habite en las tiendas de Sem (Génesis 9,25-27); así como después se dirá que habitará en la tienda de Israel.

 

584. Hay muchas promesas al PATRIARCA ABRAHAM, las cuales muestran la universalidad en una salvación futura.

 

El texto del Génesis 12,2s contiene siete miembros (a fin de dar a entender incluso en el número la universalidad de los bienes), la bendición de Dios a Abraham: Yo te haré un gran pueblo [numeroso; véase 22,17] -te bendeciré [te enriqueceré con toda clase de riquezas, véase 30,27; 39,5] -y engrandeceré tu nombre [lo haré glorioso] -a saber, y serás bendito. -Y bendeciré a los que te bendigan [luego esta bendición se dilatará en otros que le bendigan] -y maldeciré a los que te maldigan [luego habrá maldición para los que se opongan a El] -y en ti [en tu linaje; véase 22,18] serán bendecidas todas las familias de la tierra [por tanto la bendición y la gracia serán universales, aunque para algunos que se opongan serán ocasión de ruina; véase S.Lucas 2,34].

 

En cambio del nombre de Abraham se dice "padre de muchos pueblos" y se añade: Génesis 17,6. Te acrecentaré muy mucho, y te daré pueblos y saldrán de ti reyes; y se promete la bendición a su hijo Isaac, que nacerá de Sara:

 

* Versículo 16. Pues la bendeciré, y te daré de ella un hijo al que bendeciré, y engendrará pueblos, y saldrán de él reyes de pueblos.

 

En el texto del Génesis 18,17s se promete la misma universalidad de la salvación: ¿He de encubrir yo a Abraham lo que voy a hacer, habiendo él [TM "con toda certeza"] de ser, como será, un pueblo grande y fuerte, y habiendo de bendecirle todos los pueblos de la tierra?

 

Y de modo más solemne en el texto del Génesis 22,16-18 después de la obediencia respecto a la inmolación del hijo se encuentra la misma promesa del Señor, confirmando las anteriores promesas con más claridad. Y "como no tenían ninguno mayor por quién [a manera de los hombres] jurar" (Hebreos 6,13): Génesis 22,16. Por mí mismo juro, palabra de Yahvéh, que por haber hecho tú cosa tal, de no perdonar a tu hijo, a tu unigénito, por mi causa.

 

* Versículo 17. te bendeciré largamente, y multiplicaré grandemente tu descendencia como las estrellas del cielo y como las arenas de las orillas del mar, y se adueñará tu descendencia de las puertas de sus enemigos [a saber, con un triunfo total];

 

* Versículo 18 Y se gloriarán en tu descendencia [en tu posteridad y en aquél que es de un modo especialísimo tu linaje y es ensalzado en la posteridad; el futuro Salvador] todos los pueblos de la tierra,' por haberme tú obedecido".

 

En Génesis 26,4s aparece en Isaac la promesa hecha a Abraham, con la nota de la universalidad; y de forma semejante en Génesis 28,14 en la visión de la escala: y en ti y en tu descendencia serán bendecidas todas las naciones de la tierra.

 

En Génesis 35,11 se repite a Jacob, hijo de Isaac, después del cambio de nombre en Israel la bendición y la promesa respecto a la descendencia futura.

 

585. PROFECÍA DE JACOB. Y Jacob mismo estando a punto de morir, al bendecir según la costumbre de los patriarcas antiguos a sus hijos, congregados a fin de anunciarles lo que les iba a suceder en los días postreros (Génesis 49,1), predijo respecto a Judá un oráculo totalmente especial si lo ponemos en relación con el de los otros hijos. Así, pasando por alto a Rubén a causa de su incesto (Génesis 49,3s; véase 35,22) y a Simeón y a Leví por haber matado a los de Siquem (Génesis 49,5-7; véase 34,25), pasa a Judá el derecho de primogenitura por lo que respecta a las promesas del futuro Salvador:

 

Génesis 49,8 Judá [esto es, alabanza], a ti te alabarán [paranomasia en virtud del significado del nombre] tus hermanos [ciertamente había pecado Judá, pero con la penitencia había lavado sus propios crímenes; véase Génesis 37,26; 38,26; 44,18s: por tanto nada tiene de extraño el que su padre le bendiga]; tu mano pesará sobre la cerviz de tus enemigos [luego alcanzarás una victoria total sobre los enemigos, y por tanto] postraranse ante ti [en tu tribu] los hijos de tu padre [de este modo en realidad de verdad la tribu de Judá será alabada a causa de los méritos ganados en hazañas bélicas y a causa de su principado entre las otras tribus. En efecto siempre la tribu de Judá fue la más fuerte y la más noble: será la primera que se atreverá a entrar en el mar rojo; la primera en el orden del campamento y de los oferentes; será la tribu jefe de las otras tribus después de la muerte de Josué; por último de esta tribu provendrán: David, Salomón, los reyes hasta la cautividad de Babilonia, y Zorobabel jefe del pueblo al regreso de la cautividad; y el Mesías será llamado león de la tribu de Judá (Apoc. 5,5)].

 

* Versículo 9.  Cachorro de León, Judá; [expuesto en semejanza con el león, el rey de los animales; ahora cachorro en presencia de su padre]. De la presa [el texto de los LXX  έκ βλαστοΰ ) subes, Hijo mío; posando, te agachas como león [a manera de vencedor que regresa del botín: después se dirá del Mesías "venció el león de la tribu de Judá" (Apoc. 5,5)], como leona (ésta, mientras amamanta a sus cachorros, es más terrible y más fuerte que el león): ¿quién le hostigará para que se levante?

 

* Versículo 10. No faltará el cetro [esto es el poder] de Judá ni el báculo de entre sus pies [esto es el bastón de mando o cetro a manera de báculo que toca la tierra y está colocado entre las rodillas, según se ve en los monumentos de los Asirios y de otros pueblos], hasta que venga el que ha de ser enviado [muchos códices TM "siloh" según lo cual: "hasta que venga a Siloh" (en la ocupación de Palestina); pero entonces en la ocupación en tiempo de Josué hasta Samuel no le fue otorgada ninguna primacía a Judá. - S.Jerónimo: "hasta que venga siloh (la paz)"; leyendo probablemente otra letra semejante. -Sin embargo más probablemente el vocablo proviene de la contracción de otros dos, y debe traducirse con los LXX: "hasta que venga aquél cuyo son éstos (el cetro y el reino), έως έάν έλθη τά άποκείμενα αύτώ (otra lectura: ψ άπόκειται , para quien éstos están reservados, para quien éstos son); así también según el targumín; -y de acuerdo con Ezequiel 21,27 el cual profetiza sobre el hecho de quitar el pontificado y el trono a la ciudad judía de Jerusalén hasta que venga aquél del cual es el reino: "!a ruina las reduciré¡, y no serán más mientras no venga a aquél a quien de derecho pertenecen (esto es tiene el poder), y a él se las daré"], y él mismo [para él mismo] será motivo de expectación [esto es, le reverenciarán y le obedecerán] de los pueblos. Así pues a aquél, que tiene la primacía, se le promete la obediencia de los pueblos: nota de la universalidad que será propia del reino mesiánico.

 

586. De donde, en resumen este oráculo es mesiánico:

 

a) a causa de esta nota del reino universal, la cual aparecerá todavía con más claridad en los oráculos posteriores.

b) a causa de la persuasión universal de los judíos respecto al futuro Mesías que provendría de la tribu de Judá (véase, Hebreos 7,14; Apoc. 5,5):

c) a causa de la concordancia con la profecía de Ezequiel 21,27;

d) a causa de la tradición de los judíos y del targumín al interpretar este oráculo.

 

El cumplimiento de esta profecía, en cuanto a la primacía de Judá, consta por la historia posterior del pueblo de Israel y se da también en la hegemonía relativa de Judá durante la cautividad de Babilonia, donde había jueces judíos; del mismo modo cuando los Macabeos, de la tribu de Levi, gobernaban el pueblo: en efecto esto lo realizaban en nombre de la tribu de Judá. Ahora bien si se le arrebata el cetro a Judá mediante Herodes de Idumea, el cual gobernaba en nombre de los romanos, y sobre todo si perece la primacía religiosa en la destrucción del templo, es señal de que ya ha venido el Mesías, al cual le pertenece el poder (y entonces el poder material pasa a ser espiritual).

 

587. Versículo 11. Atará [Judá] a la vid su pollino, a la vid generosa el hijo de la asna; [se indica la abundancia de la vid que habrá en tiempo del Mesías de tal forma que se halla con mucha frecuencia, incluso para atar asnos) lavará en vino sus vestidos, y en la sangre de las uvas su ropa [habrá tan gran abundancia de vino que se dice echando mano de la hipérbole que servirá incluso para lavar, y no solamente para beber; algunos ven una alusión al Redentor,, el cual lavará con su sangre sus vestidos].

 

* Versículo 12. Brillan por el vino sus ojos [sus ojos están centelleantes por el vino] y de la leche blanquean sus dientes [se ponen blancos por la leche]: de este modo con la abundancia del vino y de la leche se describe la prosperidad futura, que habrá en la tierra de Judá, según dicen algunos; o más probablemente se describen las bendiciones mesiánicas.

 

Luego en virtud de esta profecía se pone de relieve el poder futuro y la alabanza en la tribu de Judá; acerca de la cual se predice que será un león victorioso; en cuyo reino universal se promete también una abundancia de bienes.

 

588. ORÁCULOS DE BALAAM. En el libro de los Números C.22-24 se narran la ocasión histórica y el suceso de los oráculos de Balaam, cuarenta años después de haber salido el pueblo israelita de Egipto. El rey Balac quiere vencer a Israel mediante adivinos y maldiciones, y llama a Balaam a fin de que realice ésto; sin embargo Dios a fin de confundir a los enemigos y de ensalzar a Israel, acordándose de su alianza, no quiso escuchar a Balaam y trocó la maldición de éste en bendición, porque amaba a Israel (Deuteronomio 23,4x).[3]

 

En el primer oráculo (Números 23,7-10) Balaam, habiendo contemplado a Israel, pone de relieve la segregación de este pueblo respecto de los otros, pues que es un pueblo que tiene a parte su morada y que no se cuenta entre las gentes (V.9); después alaba su fecunda prosperidad (el polvo), y con la misma verdad con que desea morir con la muerte de los justos con igual verdad desea tener su fin semejante al de este pueblo (V.10).

 

En el segundo oráculo (V.18-24), puesto que los decretos de Dios son inmutables, no puede revocar la bendición (V.19s), y en Israel no hay iniquidad e idolatría, y Yahvéh es el rey fuerte de Israel: es para él la fuerza del unicornio (toro feroz conocido por las pinturas de Babilonia y de Asiria) (V.21-23); por ello el pueblo se alza como leona y no se acostará sin haber devorado su presa (V.24), lo cual encierra una amenaza para Moab.

 

En el tercer oráculo (24,3-9) declara Balaam que él es profeta del verdadero Dios, y que su oráculo es el oráculo del hombre de los ojos cerrados..., de quién ve se le abrieron los ojos (V.3s); y compara el campamento de Israel a una selva florida, a manera de elevados árboles plantados por Yahvéh (V.5-7); y celebra la fortaleza de Israel: pues se yergue sobre Agag (el reino entero de los Amalecitas entonces en pleno apogeo) y devorará a los enemigos, y triturará sus huesos (V.7s).

 

Por último en el cuarto oráculo (24,15-24) se profetiza acerca del rey futuro, del cual se ensalzan el esplendor y el poder:

 

589. * Versículo 15. "Oráculo de Balaam, hijo de Beor; oráculo del hombre de los ojos cerrados [esto es, mientras están cerrados los ojos en estado de éxtasis];

 

* Versículo 16. Oráculo del que oye palabras de Dios, del que conoce los consejos del Altísimo, del que ve visiones del Omnipotente, de quién, al caer [ruens], se le abrieron los ojos;

 

* Versículo 17. La veré [veo] a ella [a saber, de forma más verosímil aquél que se dirá de él que es estrella, no pueblo), pero no ahora [luego después de largo tiempo]; la contemplaré [contemplo] a ella, pero no de cerca. Alzase de Jacob una estrella [aquel rey futuro dotado de esplendor, que saldrá de Israel; no la estrella de los Magos, procedente de Oriente, según piensa S.Jerónimo], surge de Israel un cetro [el cetro poderoso de Israel]; que aplasta los costados de Moab [TM "ambos costados de Moab", esto es toda la región; luego se trata de la victoria completa] y el cráneo de todos los hijos de Set.

 

* Versículo 18. Edon es su posesión; Seir [otros enemigos de Israel], presa de sus enemigos: Israel acrecienta su poder.

 

* Versículo 19. De Jacob el dominador que devasta de las ciudades las reliquias [otros: las reliquias de Seir].

 

* En los Versículos 20-23 se anuncia la victoria sobre los amalecitas (pueblo entonces muy noble o el primero que luchó contra Israel: la primera de las naciones) pero su fin será eterna ruina; de igual modo se anuncia la destrucción de Cineo (Marianita) por Assur (el Oriente: los Asirios, los Babilonios, los Persas); pero también de la parte Occidental (griegos y romanos) vendrán y dominarán: no obstante también ellos perecerán.

 

590. Así pues en este cuarto oráculo se trata del futuro rey esplendoroso y lleno de poder, el cual es el Mesías: así consta por la tradición de los judíos (v.gr. el Targun de Onkelos, el Salmo de Jonatás...); y en tiempos de Adriano hubo un falso Mesías bajo el nombre de "hijo de la estrella" Barchochba. No obstante siguiendo la sentencia más común, se trata única y directamente del Mesías, el cual alcanzó verdaderamente en sentido espiritual el triunfo definitivo sobre todos los pueblos: Moab, Edón, Amalee, Grecia, Roma...; pues las victorias de David sobre Moab y sobre Edón no fueron victorias totales; y posteriormente también el mismo Herodes de Idumea reinó en Israel.

 

591. PROFECÍA ACERCA DEL PROFETA QUE IBA A SER SUSCITADO. Moisés enseña en el Deuteronomio al pueblo aquellas cosas que conciernen a la sociedad pública: así trata acerca de la institución y el oficio del juez (16,18-17,13), de la institución del oficio del rey (17,14-20), de la misión de los sacerdotes (18,1­8); y por último, en contra de las distintas clases de supersticiones trata acerca de la promesa de Dios respecto a un profeta humano que va a ser suscitado (V.15-17) del pueblo y de los hermanos de Israel, como Moisés:

 

* Versículo 18. Yo le suscitaré de en medio de sus hermanos un profeta como tú [Moisés] pondré en su boca mis palabras y él les comunicará todo cuanto yo le mande.

 

* Versículo 19. A quien no escuchare las palabras que él dirá en mi nombre, yo le pediré cuenta.

 

592. Que este texto debe referirse al Mesías lo sostuvo la tradición de los judíos, según queda de manifiesto suficientemente por las palabras del Nuevo Testamento. En efecto consta por el evangelio en primer lugar la expectación que había en tiempo de Jesús Nazareno respecto a algún profeta especialmente grande e insigne, que Iba a ser enviado por Dios: y así se le pregunta a S.Juan Bautista (S.Juan 1,19-21) si es él aquel profeta singular ( προφήτης con artículo), que era esperado; y en otro lugar el pueblo, después de la multiplicación de los panes, dice que Jesús es verdaderamente προφήτης, [en singular y de un modo determinado] que iba a venir al mundo (S.Juan 6,14); y después de la fiesta de los tabernáculos dicen: este es verdaderamente el προφήτης (S.Juan 7,40) .

 

Y por otra parte la tradición judía sostenía que Moisés había hecho de antemano un anuncio acerca del Mesías que iba a venir: y así habla acerca de aquél "de quien escribió Moisés en la Ley y los profetas" (S.Juan 1,45), a saber, un hombre del pueblo dice que el Mesías esperado había sido preanunciado en la Ley de Moisés; y la samaritana, que solamente admitía al igual que los de su pueblo el Pentateuco, habla del Mesías que ha de venir el cual "enseñará" (S.Juan 4,25), esto es el cual actuará como profeta; por último Jesús apela como a un texto mesiánico, sin que le contradiga nadie de los que le escuchan, a aquél en que Moisés escribió acerca de El (S.Juan 5,46). Y la predicación de S.Pablo incide en el mismo sentido (Hech.Apóst. 3,22; 7,37). Sin que al igual que hemos dicho antes se opongan ninguno de los que le escuchan.

 

De aquí que la profecía mosáica acerca del profeta se refiere al Mesías.

 

Y si algunos en tiempo de Jesús distinguen entre el Profeta esperado y el Mesías esperado (véase S.Juan 1,21-24; 7,40s; y anteriormente el n.393), esto muestra en verdad que algunos judíos opinaron así, esto es que era esperado un profeta distinto del Mesías; sin embargo esto no invalida la fuerza del argumento dado, según el cual el Mesías era esperado también como el Profeta, preanunciado por Moisés. Y otros judíos quieren precisamente a este Profeta (S.Juan 6,14) aclamarle como a Rey, esto es como al Mesías (S.Juan 6,15).

 

593. Ahora bien el texto parece que debe referirse no solo exclusivamente a Jesucristo, sino, y en esto seguimos el modo de pensar de la mayor parte, a la institución entera del profetismo. Las razones son las siguientes:

 

a) así como anteriormente (Deut. 16,18s) se habló acerca de la institución de los jueces, de los reyes, de los sacerdotes, así también ahora se habla acerca de la Institución de los Profetas;

b) y .respecto a los falsos Profetas se dan normas en el contexto (Deut. 18,20-22), las cuales no podrán aplicarse exclusivamente a Jesucristo;

c) el vocablo "Profetas", ڸכא nabi', aunque se diga en singular, sin embargo admite un sentido colectivo, en orden a todos los profetas futuros.

 

Así pues es sentencia más probable el que en este texto se da a entender la serie futura de los profetas juntamente con alguno designado y esperado de un modo especial, el cual sería el culmen de todos los profetas.

 

594. EN EL CANTO DE ANA. En el 1 Reyes (1 Samuel) 2,14 Ana, madre de Samuel, dando gracias a Dios por el hijo recibido, y elevándose de beneficios particulares a más elevados beneficios públicos de Dios, y hablando en público, y por tanto -según parece- inspiraba con espíritu profético, habla del futuro Mesías. Este texto es el primero donde aparece esta denominación respecto al futuro Rey Salvador: Yahvéh juzga los confines de la tierra; robustecerá a su Rey y erguirá la frente de [la fortaleza] de su Ungido; lo cual puede referirse ciertamente a David que había sido ungido y a todo el cetro de Judá, sin embargo de modo especial al futuro Mesías, del cual ha venido a ser propia esta denominación.

 

595. PROFECÍA DE MATAN. 2 Reyes 7,4-17 (1 Par.18,1­15). Con ocasión del propósito de David de edificar un templo al Señor (véase también Salmos 131,1-5) el Señor le recuerda mediante el profeta Natan los beneficios que le ha otorgado en otro tiempo y también los beneficios futuros y dice:

 

* Versículo 11 ...hácete, pues, saber Yahéh que el te edificará casa a ti [esto es, el Señor te dará un linaje; el sentido de esta promesa queda explicado en los versículos siguientes].

 

* Versículo 12. Y que cuando se cumpliere tus días y te duermas con tus padres [así pues después de la muerte de David] suscitaré a tu linaje, después de ti, el que saldrá de tus entrañas [a saber, el Hijo de David que todavía no había nacido, Salomón, del cual se habla inmediatamente después; y también todos los descendientes y reyes después de David, ya que al instante se hablará de la eternidad del reino y de este modo se entiende los textos de los Salmos 88,21­38; 131,11-13; al mismo tiempo se designa también entre los descendientes y reyes posteriores de un modo especial, como cabeza y culmen, algún rey de la casa de David, al cual le tienen que convenir especialmente ciertos datos que se prometen: véase Hech.Apóst. 2,30 donde S.Pedro, intérprete de la tradición de los judíos (y sin que le contradigan los judíos) refiere al Mesías algunas palabras sacadas de este texto], y afirmaré su reino [se indica la perpetuidad del reino de David, según se dice de una forma más clara también en los versículos siguientes].

 

* Versículo 13. El edificará casa a mi nombre [esto se refiere a Salomón, el cual después edificó y dedicó un templo], y yo estableceré su trono por siempre [se predice por tanto la eternidad del reino salomónico, así como también después en el V.16, y esta eternidad en el sentido propio, no solo en el sentido de una larga duración como muchas veces se considera la eternidad en el Antiguo Testamento: se aboga por la eternidad en sentido propio a causa del énfasis de las acciones de gracias de David, V.24-29; y porque se dice sin condición alguna que no apartará de él la misericordia, V.15; y además consta por el modo como entendieron ésto los posteriores: Salmos 88,29s.37s. (su trono como el día del cielo) y S. Lucas 1,32s en concordancia con este texto, sin duda juntamente con la tradición de los judíos y aludiendo a ésta profecía acerca del Mesías dice: y le dará el Señor Dios el trono de David, su padre, y reinará en la casa de Jacob por los siglos (expresado de una forma negativa y con más claridad) su reino no tendrá fin].

 

* Versículo 14. Yo le seré a él Padre, y el me será a ni Hijo [esto tiene valor respecto a Salomón y respecto a todo el linaje real de David, pero especialmente respecto al Mesías; ya que también S.Pablo (Hebreos 1,5) aplica esto a Jesucristo suponiendo sin duda que esto es aceptado por los Hebreos, según la tradición de ellos, a los cuales escribe]. Si obrare el sal, yo le castigaré con varas de hombres y con azotes de hijos de hombres [estas palabras ciertamente no se aplicarán a Jesucristo que es impecable; luego bajo el nombre de hijo y de linaje no se designaba únicamente a Cristo, según hemos dicho]. misericordia, como la aparté de Saul arrojándole de delante de ti.

 

* Versículo 15. Pero no apartaré de él mi misericordia, como la aparté de Saul arrojándole de delante de ti.

 

* Versículo 16. Permanente será tu casa para siempre ante mi rostro, y tu trono estable por la eternidad [véase S.Lucas 1,33].

 

596. Luego según esta profecía, mesiánica fuera de toda duda por las frecuentes alusiones a ella en la Sagrada Escritura, el Mesías será el Hijo de David y el heredero del reino de David; el cual reino se predice en verdad absolutamente eterno, ciertamente en algún sentido. Ahora bien como quiera que en otro texto (Salmos 131,12) se indica que la guarda de la ley es la condición para que los hijos de David se sienten sobre su solio de modo sempiterno, es señal de que el reino temporal sempiterno es condicionado, y que en cambio el reino espiritual y mesiánico, según consta también por otras profecías, es absolutamente eterno. Véase las acciones de gracias de David,2 Reyes 23,1-7

 

597. DEL LIBRO DE LOS SALMOS: SALMO 2. Este Salmo ciertamente es davídico y mesiánico, según los testimonios de los apóstoles y de la comunidad cristiana (Hech.Apóst. 4,24-28) que dan a entender la tradición de los judíos, e igualmente por comparación con el Salmo 109 que es ciertamente davídico y mesiánico (véase n.609s).[4]

 

Hay que añadir respecto a la mesianidad del Salmo, además de la interpretación de la antigua Sinagoga y de los Padres, las citas frecuentes de él en cuanto mesiánico y las alusiones a él en cuanto tal en el Nuevo Testamento. (Hebreos 1,5; 5,5; Hech.Apóst.4,24­28; 13,32s; Apoc. 2,26-28; S.Juan 1,49).

 

Hay también razones internas en este Salmo en orden a establecer esta mesianidad; ya que la descripción que se hace del reino universal y sobre todos los pueblos no puede convenir a un reino puramente terreno.

 

598. En la primera estrofa (V.1- 3) se describe el amotinamiento de las gentes y de las naciones las cuales se alborotan; y así se reúnen los reyes de la tierra y a una se confabulan los príncipes contra Yahvéh y contra su Ungido [la primera comunidad de Jerusalén vio cumplido esto en Herodes y en Poncio Pilato al ponerse éstos de acuerdo con los gentiles y con el pueblo de Israel en contra de Jesús (Hech.Apóst.4,27s); y en general debe decirse esto de todos los que conspiran en contra de la obra y de la doctrina de Jesucristo].

 

En la segunda estrofa (V.4- 6), Dios, usando de una antítesis dramática, ante las pretensiones de los enemigos se ríe, Yahvéh se burla de ellos y afirma: yo he constituido mi rey sobre Sión, mi monte santo [a saber, el rey del reino mesiánico, cuyo comienzo y figura es Sión].

 

Y este rey promulga en la tercera estrofa (V.7-9) el decreto de Yahvéh: Yahvéh me ha dicho: "Tu eres mi Hijo, hoy te he engendrado yo. (Luego Dios es el Padre de este rey Mesías, en el cual se encierra la suprema dignidad de Jesucristo, y al mismo tiempo se indica la razón de por qué debe atribuírsele el reino universal (V.8s)).

 

¿Se trata aquí de la filiación natural respecto a Dios o de una filiación meramente adoptiva o moral?

 

San Pablo. entendió que se trata de la filiación natural de Jesucristo; puesto que, aplicando esas palabras a Cristo, dice que ninguno de los ángeles ha sido llamado de este modo (Hebreos 1,5); a pesar de que también los ángeles mismos son hijos adoptivos de Dios.

 

Por lo que, se refiere a las palabras hoy te he engendrado, algunos sostienen (San Agustín, Santo Tomás) que explican a las palabras anteriores: en efecto indican la razón de por qué es hijo, a saber no por creación y adopción, sino por generación; hoy, esto es en el ser permanente de la eternidad.

 

Otros (San Atanasio, San Crisóstomo, Teodoreto...) dicen que en estas palabras se trata de la generación temporal de Jesucristo en el seno de la bienaventurada Virgen María, por el hecho de que el Salmo trata acerca del Hijo de Dios que se encarnó y es Rey, y el vocablo hoy significa el tiempo presente: sin embargo puede ponerse la objeción de que el Mesías no es presentado como un mito, sino. como un rey poderoso.

 

Por eso otros, y ciertamente con más probabilidad (San Hilario, San Ambrosio, Cornelio A Lápide, Vázquez, Linder...) interpretan dichas palabras del modo siguiente: "Yo he manifestado hoy que tú has sido engendrado por mi", y en verdad no en el día del bautismo (puesto que entonces no fue constituido de un modo especial rey), sino en el día de la Resurrección de Cristo, cuando la dignidad real y el poder de Jesucristo se manifestaron con toda evidencia, y Jesucristo-como que nace a la vida gloriosa en la cual es menester que él reine. Así también, y de modo especial, según la interpretación de San Pablo (Hech.Apóst. 13,33), donde dice claramente: "Dios... resucitando a Jesús, según está escrito en el Salmo segundo: "tú eres mi hijo, yo te engendré hoy..."; e igualmente en la epístola a los Romanos 1,4: "[Jesucristo] constituido [esto es declarado] Hijo de Dios, poderoso según el Espíritu... a partir de la resurrección de entre los muertos...".

 

* Versículo 8. Pídeme y haré de las gentes tu heredad, te daré en posesión los confines de la tierra [como consecuencia de la filiación natural de Dios, propia del Mesías, y en consecuencia con la total potestad que se le atribuye en el cielo y en la tierra (S.Mateo 28,18), se le promete con estas palabras el reino universal y el poder sobre todas las gentes, las cuales serán llamadas a su reino].

Y en cuanto a los rebeldes:

 

* Versículo 9, podrás regirlos con cetro de hierro, romperlos como vasija de alfarero".

 

599. SALMO 15. Este salmo es igualmente davídico, así como el anterior.[5]

 

Consta esto por el título del Salmo, y por las palabras de S.Padro (Hech. Apóst.2,25) y de S. Pablo (Hech.Apóst. 13,35), que fueron aceptadas por los judíos. Es también mesiánico, a causa de las alusiones mesiánicas que hicieron acerca de este Salmo S.Pedro (Hech,.Apóst. 2,25-28) y S.Pablo (Hech.Apóst. 13,34-48); y según parece siguiendo la sentencia de la mayoría, es directamente mesiánico, no simplemente de un modo indirecto y típico, como si fuera directamente referido a David o a alguna persona atribulada que ponga su confianza en Dios; en efecto hay algo (V.10) que no puede ser aplicado a David.

 

600. David escribe en el salmo la oración de un varón que se encuentra en tribulación, que se refugia en Dios [así como también se dirá de Jesús respecto a su oración al Padre antes de la pasión, con aquella confianza y paz de alma que se respira en este salmo: S.Juan 12,27s; 17; S.Mateo 26,36-45]. De este modo dispuesto cumplirá la voluntad de Dios.

 

Marcha también a la muerte con confianza pues está seguro de su futura resurrección:

 

* Versículo 8. Siempre -dice- tengo ante mí a Yahvéh. Si el está a mi diestra, nunca resbalaré.

 

* Versículo 9. Por eso se alegra mi corazón y jubila mi alma, y aun mi carne se siente segura.

 

* Versículo 10. Que no dejarás tú mi alma en el sepulcro, ni dejarás que tu santo experimente la corrupción [TM."la fosa", she'ol, es lo mismo que la corrupción. -S.Pedro interpretó esto acerca de la resurrección del Mesías que había sido predicha: Hech.Apóst. 2,25-28; e igualmente S.Pablo: Hech.Apóst. 13,34-38. En efecto esto no se dice de David: pues David... fue a reunirse con sus padres y experimentó la corrupción (Hech.Apóst. 13,36).

 

601. SALMO 21. El salmo es davídico, según lo indican el título y la tradición. Es también directamente mesiánico, puesto que muchos datos que hay en él no pueden entenderse respecto a David mismo (V.2.17-20) y algunos datos se refieren al reino mesiánico universal (V.28-30).

 

En la primera parte (V.2-12) se presenta una queja triste de un varón atribulado que recurre a Dios:

 

* Versículo 2. ¡Dios mío, Dios mío! ¿Por qué me has desamparado? lejos están de la salvación mis rugidos [posteriormente este versículo lo recitó Jesús Nazareno en la cruz, aplicándose a sí mismo este Salmo: S.Mateo 27,46]. Sigue la oración confianza de aquel varón, el cual por último dice:

 

* Versículo 7. Verdad que yo soy un gusano no un hombre; [véase Isaías 53,4], el oprobio de los hombres y el desprecio del pueblo [y en realidad de verdad Jesús Nazareno después fue entregado para que se burlaran de él, fue comparado a Barrabás, fue rechazado, y fue crucificado en medio de ladrones;

véase S.Mateo 27,27-30].

 

* Versículo 8. Búrlanse de mí cuantos me ven, abren los labios y mueven la cabeza

 

* Versículo 9. *Se encomendó a Yahvéh -dicen-; líbrele El, sálvele El, pues dice que le es grato" [al igual que también aquéllos que pasaban le injuriaban a Jesús Nazareno puesto en la cruz, moviendo la cabeza... e igualmente los príncipes de los sacerdotes, con los escribas y ancianos, se burlaban y decían: ... ha puesto su confianza en Dios; que El le libre ahora, si es que le quiere, puesto que ha dicho: soy el Hijo de Dios. Así mismo, los bandidos... le ultrajaban (S.Mateo 27,39-44)].

 

En los versículos siguientes,

 

* Versículo 10s, se menciona a su madre, y no se hace mención alguna de su padre, aludiendo también a la costumbre por la que el Padre reconocía al Hijo:

 

* Versículo 11. Desde mi nacimiento fue entregado a ti, desde que colgaba de los pechos de mi madre; tú eres mi Dios.

 

En la segunda parte (V .13-22) se presenta la imagen dolorosa del varón:

 

* Versículo 13. Rodéanme todos en gran número; cércanme novillos de Basán [vigorosos]

 

* Versículo 14. Abren sus botas contra mí cual león rapaz y rugiente [así el pueblo de Israel (muchos novillos), así los príncipes (toros vigorosos) los cuales habían gritado contra Jesús: "que sea crucificado..." (S.Mateo 27,20-23), y después: "¡quita, quita! ¡crucifícale!" (S.Juan 19,15)].

 

* Versículo 15. Me derrama como agua; todos mis huesos están dislocados [no quebrados]: mi corazón es como cera que se derrite dentro de mis entrañas (imagen del dolor interno y del temor y de la desolación].

 

* Versículo 16. Seco está como un tejón mi paladar, mi lengua está pegada a las fauces [,,Jesús ... para que se cumpliera la Escritura dijo: tengo sed... " (S.Juan 19,28s)] y me has echado al polvo de la muerte.

 

De nuevo aparece la descripción de los adversarios que le insultan:

 

* Versículo 17. Me rodean muchos perros, me cerca una turba de malvados, han taladrado mis manos y mis pies [así ocurrió de modo manifiesto en la crucifixión de Jesús; lo cual no puede decirse de David].

 

* Versículo 18. Puedo contar todos mis huesos, y ellos me miran, me contemplan con gozo. [Véase S.Lucas, 23,35: "el pueblo estaba allí mirando y los príncipes mismos se burlaban..."].

 

* Versículo 19. Se han repartido mis vestidos y echan suertes sobre mi túnica [véase S.Mateo 27,35; S.Marcos 15,24; S.Lucas 23,34; S.Juan 19,23s].

 

En la tercera parte (V.23-32) se presentan los efectos saludables de esta pasión.

 

* Versículo 23. Que pueda yo hablar de tu nombre a mis hermanos y ensalzarte en medio de la congregación [de este modo consta de nuevo el carácter de doctor que se da propio del Mesías] y sigue (V.26) la alabanza de Dios mediante el Mesías en la numerosa congregación [a saber en la sociedad universal; véase V.28-30] y cumpliré mis votos [los sacrificios eucarísticos] ante los que te temen; de forma que coman los pobres y queden saciados (V.27); a saber en el reino universal.

 

* Versículo 28. Se acordarán y se convertirán a Yahvéh todos los confines de la tierra [esta universalidad la repiten en verdad los siguientes versículos]: y se postrarán delante de él todas las familias de las gentes.

 

* Versículo 29. Porque de Yahvéh es el reino, y El dominará a las gentes;

 

Versículo 30. A El solo le adorarán todos los que duermen en la tierra; se curvarán los que al polvo cayeron

 

Y el Mesías tendrá un resultado totalmente gozoso: mi alma vivirá para El,

 

* Versículo 31. Mi posteridad te servirá. Este es el fruto de la bendición respecto a su posteridad, a saber respecto a aquéllos que adquirió con su pasión. En efecto, hablará de Yahvéh a las generaciones venideras; y predicarán tu justicia al pueblo que ha de nacer: "esto es obra de Yahvéh".

 

602. SALMO 44. Este salmo celebra las bodas de algún rey especial con una reina igualmente especial. En efecto lo que se dice ya desde el comienzo no puede aplicarse a Salomón, e igualmente no puede aplicarse a cualquier reina, sino solamente a un rey totalmente singular y divino; según la tradición de los hebreos y de los Padres, se da en este salmo la alegoría, así come en el Cantar de los Cantares.

 

Y San Pablo, al escribir precisamente a los Hebreos (1,8s), refiere al Mesías algunos datos sacados de este salmo. Hay que añadir la concordancia de este salmo que describe la dignidad real del Mesías con otros salmos sin duda alguna directamente mesiánicos (Salmos 2 y 109). De donde sólo queda el que el presente salmo se considere no como dicho de Salomón, ni como un cántico profano del amor, sino que se considere directamente mesiánico; así pues no simplemente de un modo indirecto (típico) acerca del Mesías y de un modo directo acerca de Salomón (según pensaba Bossuet).

 

603. Después de la introducción (V.1), en la primera parte (V.3-10) se describe al esposo:

 

* Versículo 3. Eres el más hermoso de los hijos de los hombres; en tus labios se ha derramado la gracia [véase S.Lucas 4,22], y [conozco que] te ha bendecido Dios con eterna bendición.

 

* En los siguientes versículos 4-6 se le describe al esposo como un héroe valeroso el cual se ciñe la espada, y con su diestra obtiene la victoria sobre los enemigos, los cuáles se les someten.

 

* En 1os versículos 7-10 se le describe al esposo en calidad de rey:

 

* Versículo 7. Tu trono, Dios [a saber en vocativo: ¡Oh Dios!; luego este rey es llamado Dios], es por siempre jamás, y cetro de equidad es el cetro de tu reino [véase Salmo 61 donde se ensalza la justicia del reino mesiánico].

 

* Versículo 8. Asas la justicia y aborreces la iniquidad; por eso Dios [a saber en vocativo: ¡Oh Dios!; véase Hebreos 1,8s donde S.Pablo cita estas palabras para probar la dignidad de Jesucristo sobre los ángeles], tu Dios, te ha ungido con el óleo de la alegría más que a tus compañeros [a saber: por encima de los otros reyes; o bien te ha ungido con la gracia y la alegría por encima de los otros que (como los cristianos) serán llamados consortes de la naturaleza divina (véase, 2 S.Pedro 1,4)].

Nada tiene de extraño el que en el

 

* Versículo 9 se diga mirra, áloe, casia exhalan tus vestidos [los vestidos de tal rey], y en el

 

* Versículo 10 se dice que hijas de reyes figuran en tu corte [a saber las naciones gentiles] y a tu diestra está la reina, [su iglesia, a la cual se dirá que Jesucristo la ama (véase Efesios 5,25); e igualmente las almas que estarán unidas a él mismo por la gracia, y en primer lugar su Madre la Virgen Inmaculada].

 

En la segunda parte (V.11-18) se describe a la esposa y a la comitiva nupcial; y se presenta la fecundidad espiritual de este matrimonio, cuyos hijos llenarán el orbe:

 

* Versículo 17. A tus padres se le dice a la esposa- sucederán tus hijos; los constituirás príncipes por toda la tierra.

 

* Versículo 18. ...porque te alabarán los pueblos por los siglos de los siglos.

 

604. SALMO 68. El salmo contiene la súplica hecha a Dios de un varón que está inmerso en un piélago de tribulaciones. Su Autor es David, según indica el título, el cual, al tratar de la tribulación del justo, según la sentencia de muchísimos autores se eleva a describir, al menos típicamente, la suprema angustia del justo por antonomasia, del Mesías inmerso en la tribulación. Y en el Nuevo Testamento algunos datos de este salmo han sido entendidos como dichos acerca del Mesías:

 

* Versículo 10. (S.Juan 2,17; 15,24-26; Hech.Apóst. 1,20; Rom. 15,3...).

 

605. Muchos elementos que hay en el salmo están de acuerdo con aquellos datos que testifican los evangelios acerca de Jesús Nazareno. Así la descripción de los V.2-5, porque amenazan ya mi vida las aguas. Húndome en profundo cieno, donde no puedo hacer pie, recuerda la tristeza de Jesús hasta la muerte (S.Mateo 26,38s...); así también el odio de muchos:

 

* Versículo 5. Son más que los cabellos de mi cabeza los que sin causa me aborrecen (véase S.Juan 15,24-26). Y los delitos que se le achacan a éste justo: y tengo que pagar lo que nunca tomé;

 

* Versículo 6. ...no se te ocultan mis pecados: estas palabras responden adecuadamente a la satisfacción vicaria, la cual por otra parte consta que la tuvo que satisfacer el Mesías (véase Isaías 53,5...; n.623).

 

Nada tiene de extraño el que como dice el justo,

 

* Versículo 9. He venido a ser extraño para mis hermanos...­

 

* Versículo 10. Porque me consume el celo de tu casa [lo cual también los discípulos de Jesús se lo aplicaron a él; véase S.Juan 2,17] los denuestos de los que te vituperan caen sobre mí (esto lo refiere S.Pablo a Jesucristo: Rom. 15,31.

 

Todas estas palabras respiran el dolor supremo y la ignominia, y la súplica confiada (V.14-22), de tal forma que el justo dice:

 

* Versículo 21 El oprobio me destroza el corazón y desfallezco: esperé que alguien se compadeciera de mi, y no hubo nadie; alguien que me consolase, y no lo hallé [véase    S.Mateo 26,40.43.56...].

 

* Versículo 22. Diéronme a comer hiel y en mi sed me dieron a beber vinagre [véase S. Juan 19,28-30].

 

El salmista pide en los versículos siguientes (V.23-29) un castigo para aquéllos que han obrado males tan grandes, de forma que en el

 

* Versículo 26 Dice: asoladas sean sus moradas y no haya quien habite sus tiendas [lo cual S.Pedro (Hech.Apóst. 1,18-20) lo aplica al castigo de Judas].

 

* Versículo 27. Porque persiguieron al que tú habías herido y acrecentaron el dolor del que tú llagaste. Y S.Pablo (Rom. 11,9s) refiere algunos datos (V.23s) a los judíos incrédulos.

 

El justo hace a Dios una súplica y una acción de gracias (V.30-35); y los versículos finales (V.36s), en los que se presenta la esperanza de la restauración de Jerusalén, parecen indicar una adición de un tiempo posterior del destierro de Babilonia.

 

606. SALMO 71. Se describe en este salmo bajo la forma de una súplica el reino en el que se mantendrán unidas la justicia suprema, la duración perpetua, la universalidad y la suma abundancia de bienes; de tal manera que todo esto debe convenir no a un reino de la tierra, sino al reino mesiánico. Así pues el Rey de este reino es el Mesías; no se trata por tanto de celebrar la entronización de un rey cualquiera. El sentido mesiánico del salmo consta no solamente por la tradición de los judíos y de los Padres, sino también por su afinidad con otros salmos mesiánicos, como los salmos 2 y 109; y por otros textos paralelos ciertamente mesiánicos (V.17: Génesis 12,3; 22,18. -V.4: Isaías 11,4. -V.8: Zacarías 9,10).

 

607. En la primera parte (V.1-4) se celebran los bienes de este reino.

 

* Versículo 1. Da, ¡Oh Dios! al rey tu juicio y tu justicia al hijo del rey [el Mesías será Rey (Salmo 2,6...) y al mismo tiempo de la estirpe real de David (véase n. 595s) : de aquí el que será también hijo de rey. -S.Roberto Belarmino entiende esta primera parte referida a Salomón, y en sentido típico al Mesías].

 

* Versículo 2. Para que gobierne a tu pueblo con justicia y a tus oprimidos con juicio; se darán en este reino la paz, la justicia, la protección de los humildes (V.3s) [véase Isaías 11,4: S.Lucas 4,18].

 

En la segunda parte (V.5-7) se presenta de un modo especial la perpetuidad del reino:

 

* Versículo 5. Vivirá mientras perdure el sol, mientras permanezca la luna de generación en generación, y

 

* Versículo 7. Florecerá en sus días la justicia y habrá mucha paz mientras dure la luna.

 

En la tercera parte (V.8-11) se pone de relieve de distintas formas la universalidad del reino:

 

* Versículo 8. Dominará de mar [el Indico] a mar [el Mediterráneo] del río [el Eufrates] hasta los cabos de la tierra [véase Salmos 2,8; Zacarías 9,10];

 

* Versículo 9. Ante el se inclinarán los habitantes del desierto y sus enemigos morderán el polvo.

 

* El Versículo 10 amplifica la idea de universalidad del reino: los reyes de Tarsis [en la extrema parte meridional y occidental de España] y de las islas [en el Mediterráneo] le ofrecerán sus dones; y los reyes de Saba [en la dichosa Arabia] y de Sabá [en la extrema Arabia] le pagarán tributo [señal de que le reconocen como rey]. Sigue un paralelismo o repetición de la misma idea:

 

* Versículo 11 Postraránse ante él todos los reyes y le servirán todos los pueblos.

 

En los versículos siguientes (V.12-17) se indican de una forma resumida los bienes de justicia, de misericordia para con los pobres, de abundancia y de prosperidad que se dan en este reino; y al mismo tiempo se repiten una vez más la perpetuidad y la universalidad que se dan en él:

 

* Versículo 17. Serás un hombre bendito por siempre; durará mientras dure el sol. Y le bendecirán todas las tribus de la tierra; todas las naciones le aclamarán bienaventurado [véase Génesis 12,3; 22,18].

 

608. EL SALMO 108, compuesto por David, según indica el título, refiere el dolor del profeta a causa de las injurias de los enemigos. Y David fue una figura de Cristo, al cual le acusaron también los enemigos, en vez de amarle; él en cambio rogaba por ellos (véase S.Lucas 23,34).

 

Las palabras imprecatorias, si no se ponen en boca de los enemigos de David en contra de David mismo, sino en boca de David mismo, amplifican y esto con una cierta hipérbole oriental la justa petición de humillación de los pecadores que se levantan contra Dios, y al mismo tiempo son una predicción del castigo futuro. Y S.Pedro (Hech.Apóst. 1,20) aplicó o acomodó a Judas las palabras del V.8 sean cortos sus días y sucédale otro en su ministerio (en su Episcopado).

 

609. SALMO 109. El salmo es con certeza igualmente davídico y mesiánico, según los testimonios de Jesús (S.Mateo 22,41-46) y de S.Pedro (Hech.Apóst. 2,34s), los cuales testimonios lo aceptan los judíos e indican que está bien fundamentada la tradición de éstos.

 

Además en este salmo se celebra a un rey único, cuyas propiedades no pueden convenir a otro rey terreno: en efecto es el rey universal, y al mismo tiempo rey y sacerdote. Lo cual está también en concordancia con otros salmos ciertamente mesiánicos, como el Salmo 2; 44; 71.

 

De aquí que no tiene nada de extraño que en el Nuevo Testamento se haga frecuente mención de este Salmo en sentido mesiánico (1 Cor. 15,25; Colos. 3,1; Efes. 1,20; Hebreos 1,3.13; 5,6.10; 6,20; 7,17s; 10,12s; Apoc. 3,21).

 

610. En la primera parte (V.1- 3) se celebra al Mesías como Rey.

 

* Versículo 1. Oráculo de Yahvéh a mi Señor [así pues David, autor del salmo, llama al Mesías su Señor, reconociendo en él una dignidad superior, al ser hijo suyo: S.Mateo 22,43; S.Marcos 12,35-37]: "siéntate a mi diestra [esto es sé partícipe de mi poder real, en el trono de mi gloria; véase 3 Reyes, 2,19 respecto a la madre de Salomón que se sienta en el trono a la diestra de- su hijo. Los apóstoles entendieron la profecía en orden a Jesús glorificado después de la Ascensión: S.Marcos 16,19; Hech.Apóst. 2,34; Efesios 1,20; Colos. 3,1; Hebreos 1,3.13], en tanto que pongo a tus enemigos por escabel a tus pies [a saber hasta que te someta totalmente a tus enemigos y, según la costumbre de los orientales, sean puestos a tus pies: y así tú les pisarás el cuello (véase, Deut. 33,29. -Pues sus enemigos todavía no habían sido derrotados totalmente después de la Ascensión de Jesucristo al cielo, sin embargo serían derrotados a la postre quisieran o no quisieran. -Y sin embargo ni siquiera después del triunfo completo de Jesucristo dejará éste de estar sentado a la diestra del Señor, sino que seguirá reinando; véase una forma semejante de hablar usando de la partícula "donec = hasta que": S.Mateo 1,25; 1 Cor. 15,25].

 

* Versículo 2. Extenderá Yahvéh desde Sión tu poderoso cetro ["porque de Sión saldrá la ley y la palabra del Señor de Jerusalén"; Isaías 2,3. Pues allí empezará la propagación del evangelio y la nueva guerra espiritual]. "Domina en medio de tus enemigos".

 

* Versículo 3. Contigo el poderío desde el día de tu nacimiento entre pompa de santidad [así pues el Mesías ya es rey a causa de su origen]: [versión de los LXX: "desde el seno"; esto es por naturaleza divina] antes de la aurora [por consiguiente antes de la creación del mundo], como rocío te he engendrado [por consiguiente se indica la generación divina y eterna de la persona del Mesías. Este texto es por consiguiente eminentemente dogmático; queda sin embargo la duda de por qué precisamente éste versículo no es citado en el Nuevo Testamento para probar la divinidad del Mesías, siendo así que se citan tantas veces los V. 1 y 4. -TM dice lo siguiente: "tu pueblo se te ofrecerá espontáneamente el día de tu esfuerzo (en el día en que reunirás los ejércitos) en medio de pompas sagradas; (así como) desde el seno de la aurora (fluye el rocío abundante, así será para ti el rocío de tu juventud (armada, que vendrá hacia ti)". -Sin embargo debe preferirse la elección de los LXX, la cual puede leerse ciertamente con las mismas letras hebreas pero con distinta vocalización que TM".

 

En la segunda parte (V.4) se celebra la dignidad sacerdotal del Mesías: ha jurado Yahvéh y no se arrepentirá [por tanto con decreto estable e inmutable decreta lo que sigue]:

 

* "tú eres sacerdote eterno [según la interpretación cristiana esto es así:

a) porque Cristo vive eternamente,

b) porque el efecto del sacrificio único realizado en la cruz permanece eternamente (Hebreos 7,23-25; 10,14);

c) porque Jesucristo mismo, sacerdote principal, renovará mediante sus ministros y vicarios su propio sacrificio hasta el fin del mundo]

 

* según el orden de Melquisedec" [esto es a semejanza de Melquisedec (véase Génesis 14,18s):

a) puesto que Melquisedec era al mismo tiempo rey y sacerdote, como el Mesías;

b) ya que Melquisedec según el significado de su nombre era "rey de justicia" y era rey de Salem (de paz) : y así también Jesucristo (Hebreos 7,2);

c) Melquisedec aparece en la Sagrada Escritura sin genealogía y sin principio ni fin de sus días (Hebreos 7,3): así también Jesucristo no sucedió a nadie y nadie le sucede a él, sino que posee un sacerdocio sempiterno (está permanente el sacerdote principal, los otros sacerdotes cristianos son vicarios y ministros);

d) Melquisedec ofreció un sacrificio de pan y de vino: así. también Jesucristo; esta semejanza la ha puesto de relieve la tradición cristiana".[6]

 

* En los Versículos 5 y 6 leemos: la guerra del Mesías contra los enemigos, también reyes, a los cuales quebrantará y derrotará.

 

* Versículo 7. En el camino beberá del torrente "algunos: del torrente de la tribulación y de la pasión", y con eso erguirá la cabeza [v. Filip.2,8-11].

 

611. PROFECÍAS DE ISAÍAS. Isaías 2,1-4

 

* Versículo 1. La palabra [esto es la realidad] que vió Isaías, hijo de Amós, acerca de Judá y de Jerusalén [Puesto que se encuentra casi con las mismas palabras el mismo oráculo en Miqueas 4,1-5, y Miqueas es contemporáneo de Isaías, se plantea la cuestión a cerca de si Isaías tomó el oráculo de Miqueas o al contrario; o también si ambos lo tomaron de una fuente común].

 

* Versículo 2. Pero sucederá a lo postrero de los tiempos [alusión frecuente a los tiempos mesiánicos, que representan la única economía de la salvación] que será confirmado [esto es firmemente constituido] el monte de la casa de Yahvéh [esto es el monte Moría, en el cual está el templo del Señor, símbolo de la futura Iglesia] por cabeza de los montes, y será ensalzado sobre los collados [esto es no materialmente sobre el Monte Tabor y el Monte Carmelo sino metafóricamente a causa de la sublima notabilidad que poseerá el reino mesiánico, a fin de ser verdaderamente visible y que puedan las gentes venir] y correrán a él todas las gentes,

 

* Versículo 3. Y vendrán muchedumbres de pueblos [se indica la universalidad del reino futuro, que será el centro único del culto legítimo] diciendo: venid, subamos al Monte de Yahvéh, a la casa del Dios de Jacob, y El nos enseñará sus caminos [se indica el carácter del magisterio doctrinal, que se dará en el reino del Mesías] e iremos por sus sendas, porque de Sión ha de salir la Ley y de Jerusalén la palabra de Yahvéh [el profeta da esta razón de por qué las gentes suben y andan en las sendas del Señor; así pues se pone de relieve la ley divina en cuanto que se proclamará desde Jerusalén, y al mismo tiempo también la palabra del Señor].

 

* Versículo 4. El juzgará a las gentes [así pues será un rey universal] y dictará sus leyes a numerosos pueblos [esto es dictará leyes y será juez], que de sus espadas harán rejas de arado, y de sus lanzas, hoces [se describe la paz futura, en la cual los instrumentos bélicos se convertirán en instrumentos de agricultura, arados y hoces; la misma paz se describe en la siguiente sentencia]: no alzarán la espada gente contra gente ni se ejercitarán para la guerra.

 

612. ISAÍAS 4,2-6.

 

* Versículo 2. En aquel día será el renuevo de Yahvéh gloria giornato [este renuevo del Señor, a saber el renuevo que el Señor hará germinar, o el renuevo que germinará de Dios, no designa una abundancia terrena material y física, ni una salvación que el Señor suministra de un modo general; sino que indica a alguien determinado, el cual se contradistingue después de "los que se salvaren de Israel", respecto a los cuales es grandeza y honra], y el fruto sublime de la tierra [esto significa lo mismo que el "renuevo del Señor", sin embargo de otro modo, como si se revelara también en cuanto a su origen de la tierra, por lo que se refiere a su naturaleza humana], y júbilo de los que de Israel quedaren [a saber de aquéllos a los que no les sobrevenga el castigo divino preanunciado en Israel].

 

* Versículos 3-6. Se describe la santidad y la protección que habrá en el reino mesiánico.

 

613. ISAÍAS 7,14.15.[7]

 

Conmovido el corazón de la casa de David y del reino de Judá Achaz, a causa de los dos reyes de Siria e Israel, que suben a Jerusalén a luchar contra ella [ 7, ls ] , el Señor por medio de Isaías quiere dar firmeza al ánimo de Achaz, prediciendo "eso no se logrará, no será así" (V.3-9); además el Señor está dispuesto lleno de dignidad a dar una señal (V. 10s). - Sin embargo Achaz desconfiando finge no querer tentar al Señor (V.12); por lo cual Isaías reacciona contra la injuria hecha a Dios (V.13) y da a conocer el siguiente oráculo:

 

* Versículo 14. Por eso [esto es porque tu rehúsas pedir una señal] el Señor mismo os dará [a la casa de David] la señal: he aquí que la virgen grávida da a luz un hijo [TM , ha' almah, con artículo: esta doncella virgen -la cual es designada de un modo determinado indicando a una persona singular- y se la presentan habiendo concebido sin intervención de varón, permaneciendo verdaderamente virgen, y dando a luz siendo virgen, puesto que se indican el milagro y la señal de la concepción y del parto, es la Bienaventurada Madre del Emmanuel; véase respecto a la antigua interpretación de los judíos S.Mateo 1,22s y el targún] y le llama Emmanuel [esto es "Dios con nosotros". Este Emmanuel es el Mesías mismo, ya que a él solo le convienen todos los datos que se dicen del Emmanuel en este libro; a saber la tierra de Judá, que es la tierra de Yahvéh, se dice que es la tierra del Emmanuel (8,8), y los nombres que se le adjudican (9,6s) solamente pueden convenir al Mesías y al divino rey; y en cuanto a la interpretación dada por los judíos acerca del Mesías, véase también S.Mateo 1,22s):

 

* Versículo 15. Y se alimentará de leche y miel [alimentos de los pobres; o bien se describe de este modo de una forma poética la infancia del Salvador] hasta que sepa desechar lo malo y elegir lo bueno [esto es hasta que llegue a los años de la discreción; o bien, habiendo transcurrido su vida en la pobreza, así sabrá el Emmanuel desechar lo malo y elegir lo bueno; véase Hebreos 5,8].

 

Luego el nacimiento milagroso del Emmanuel es la señal de la voluntad de Dios, el cual quiere salvar a Judá. Ahora bien viendo el profeta al Emmanuel Salvador como presente, une con perspectiva profética esta visión con las circunstancias presentes:

 

* Versículo 16. Pues antes que el niño sepa desechar lo malo y elegir lo bueno [esto es antes de llegar a los años de la discreción], la tierra por la cual temes de ésos dos reyes será devastada [esto es o bien "será desolada la tierra que detestas (Efraín y Siria)", o bien "antes que ese niño trascurra su infancia será desolada la tierra de Judá, por la cual tú estás preocupado por la presencia de éstos reyes"].

 

Sigue la destrucción del castigo de Judá por medio de los Asirios (V.17-25); sin embargo la salvación vendrá por, el Emmanuel (8,8-10; 9,1-7).

 

614. ISAÍAS 9,1-7.

 

* Versículo 1. Como al principio [esto es anteriormente, en otro tiempo] cubrió de oprobio [vino a ser insignificante y desconocida] la tierra de Zabulón y la tierra de Neftalí, sin embargo ahora, a lo último llenarán de gloria [esto es ha venido a ser ponderado y ensalzado] el camino del mar [de Galilea o del Mediterráneo], y la otra ribera del Jordán [Perea], la Galilea de las gentes [v.S.Mateo 4,12-16].

 

Se describe después el efecto de la iluminación, d- la multiplicación del pueblo y también de la alegría (ya cual :a exaltó, así lo reclama el contexto) y también el efecto del júbilo a causa de los bienes mesiánicos

 

* Versículo 3. En exacto el Señor ha roto el yugo que pesaba sobre ellos, el dogal que oprimía su cuello, la vara del exactor,

 

* Versículo 4. como en el día de Madiam (Jueces, 7).

 

* Versículo 5. Porque todo robo violento [hecho] con tumulto [cesará: TM: "los zapatos jactanciosos del guerrero"] y el manto [esto es la toga] manchado de sangre han sido echados al fuego y devorados por las llamas.

 

* Versículo 6. Porque nos ha nacido un niño, nos ha sido dado un hijo [el perfecto profético; véase S.Lucas 2,11], que tiene sobre su hombro la soberanía, y que se llamará maravilloso consejero, Dios fuerte Padre del siglo futuro [sempiterno], Príncipe de la paz.

 

* Versículo 7. Para dilatar el imperio y para una paz ilimitada, sobre el trono de David y sobre su reino [recuérdese la profecía de Natan, n.595s], para afirmarlo y consolidarlo en el derecho y la justicia desde ahora para siempre jamás [he aquí los bienes mesiánicos de la paz y de la santidad en el reino eterno. Estas cualidades del reino, y sobre todo los nombres con los que antes ha sido destinado el rey, no puede convenir más que al Mesías. Véase S.Lucas 1,32.33]. El celo de Yahvéh Sebaot hará esto.

 

Prosigue (C.9,8-10,34) la descripción, y la amenaza de los castigos que pagarán Israel y Asiria sin embargo serán para bien de Judá. Y para bien de todos, será el Mesías.

 

615. ISAÍAS 11,1-10.

 

* Versículo 1. Y brotará una vara [un retoño] del tronco de Jessé [esto es del tronco de Jesé sepultado en tierra después de haber sido cortado el árbol, como de la familia de David que había caído ya en el olvido], y un vástago [esto es un sarmiento, un renuevo, la misma vara o retoño, que procede del tronco de Jessé: así a causa del paralelismo] retoñarán de sus raíces.

 

* Versículo 2. Sobre el que reposarán el espíritu de Yahvéh [según A.Vaccari, este es el don central ó fundamental concedido al Mesías, como el pie en el candelabro de siete brazos], espíritu de sabiduría y de inteligencia [dones especulativos], espíritu de consejo y de fortaleza [dones prácticos], espíritu de entendimiento y de temor de Yahvéh;

 

* Versículo 3. Y pronunciará sus decretos en el temor de Yahvéh [estos dones se refieren directamente a Dios mediante el conocimiento y la reverencia para con él. - Téngase en cuenta que no se encuentra en TM el don "de piedad"; por lo cual no se daría en el TM. el número de los siete dones, a no ser que se emplee el modo como considera esto A.Vaccari, modo propuesto anteriormente. Y si hubiera que tener al TM como original en este asunto, y se echara de menos el número de los siete dones, no sin motivo se recomendaría la explicación dada por Knabenbauer, según el cual las palabras de TM yir'at Yahvéh no se realizarían cumplidamente mediante "el temor de Yahvéh" y se incluiría en ellas además "la piedad"].

 

En los siguientes versículos se describe la perfecta justicia y el poder y la fidelidad de este rey Mesías (V. 3b-5); y se indica también alegóricamente la paz que habrá en este reino (V.6-9).

 

Y prosigue el Versículo 10. En aquel día el renuevo de la raíz de Jessé [esto es aquel retoño del que antes se habló] se alzará como estandarte para los pueblos [a manera de bandera respecto a los pueblos], y le buscarán las gentes [téngase en cuenta la universalidad del reino], y será gloriosa su morada.

 

La liberación y el vínculo de los que formen el resto de Israel quedan plasmadas en los siguientes versículos (V.11-16). Y después de todo esto el cántico de alabanza, que dirá en aquél día: pues habiendo Dios estado enojado, se aplacó su cólera (C.12,1); y por ese motivo el pueblo del Señor tendrá confianza (V.2) y sacará las aguas de las fuentes del Salvador (V.3; véase S.Juan 4,13s; 7,37-39), y hará todo esto en la tierra entera (V.4-6).

 

616. ISAÍAS 28,16. En el capítulo 28 se presenta un oráculo, donde aparecen las lamentaciones contra Samaria, cuyo modo de obrar indican los ciudadanos de Jerusalén; y se apoyan en la mentira y en ella ponen su esperanza. Sin embargo es otro en el que habrá que poner la esperanza:

 

* Versículo 16. Por eso dice el Señor Yahvéh: yo he puesto en Sión por fundamento una piedra [en el fundamento de la nueva teocracia que saldrá de Sión], piedra probada,[esto es elegida, adecuada para este fin], piedra angular [base y unión y norma directiva de todo el edificio] de precio [cuya naturaleza es muy superior a todos los otros miembros del edificio], sólidamente asentada [esto es inamovible, que ofrece una estabilidad segura; el que en ella se apoye, no titubeará.

 

617. ISAÍAS 35,1-10. A la descripción de la devastación de la tierra de Edón (34,5-17) se opuso de repente la liberación y el gozo que habrá en Israel. Todo esto se describe poéticamente (35,1ss)...

 

* Versículo 4 ...Viene él mismo (Dios] y él nos salvará

 

* Versículo 5. Entonces se abrirán los ojos de los ciegos, se abrirán los oídos de los sordos;

 

* Versículo 6. Entonces saltará el cojo como un ciervo y la lengua de los mudos cantará gozosa [véase S.Mateo 11,4s].

 

618. ISAÍAS 40,1ss. Ya en este comienzo de la parte dedicada al consuelo, la cual se dará después en la profecía de Isaías, hay una exhortación a la conciencia:

 

* Versículo 1. Consolad, consolad a mi pueblo... pues es el fin de la servidumbre para Jerusalem.

 

* Versículo 2. ...Que ha recibido de manos de Yahvéh el doble [en dobles castigos, expresión hiperbólica] por todos sus crímenes.

 

* Versículo 3. Una voz grita: abrid una calzada a Yahvéh en el desierto [S.Mateo 3,3; S.Marcos 1,3; S.Lucas 3,4-6; S.Juan 1.23; donde la profecía se aplica a S.Juan Bautista]...

 

* Versículo 5. Y porque va a mostrarse la gloria de Yahvéh, y a una la verá toda carne, ha hablado la boca de Yahvéh...

 

619. PROFECÍAS ACERCA DEL SIERVO DE YAHVEH:

 

Isaías, 42,1ss. Aparece el siervo de Yahvéh, el cual será el Salvador de Israel:

 

* Versículo 1. He aquí a mi siervo, a quien sostengo yo [esto es a quien protejo], mi elegido, en quien se complace mi alma. He puesto mi espíritu sobre él, y él dará la Ley a las naciones [esto es, dictará la ley justa también a las naciones, o sea ejercerá en las naciones el dominio y el poder].

 

* Versículo 2. No gritará (Vg. ni tendrá acepción de personas) no hablará recio, no alzará su voz en las plazas [esto es será conocido por su modestia].

 

* Versículo 3. No romperá la caña cascada ni apagará la mecha humeante [será el auxilio de los afligidos y de los pecadores; véase S.Mateo 12,18-21], expondrá fielmente la Ley [esto es juzgará en la realidad]. No estará triste ni será turbulento [esto es no sufrirá debilidad en su ánimo, ni estará inquieto; TM "sin cansarse ni desmayar"] hasta que establezca la Ley en la tierra [a saber aquella ley justa y su reino, de los cuales se-ha tratado antes]; las islas [las regiones más remotas] están esperando su doctrina.

 

620. ISAIAS 49,1ss.

 

* Versículo 1. ¡Oídme, islas! [regiones remotas y marítimas], ¡atended, pueblos lejanos! [luego lo que ahora se va a decir, no es algo meramente particular sino que es universal]: Yahvéh me llamó desde antes de mi nacimiento [se presenta la elección hecha por Dios de este siervo que habla], desde el seno de mi madre me llamó por mi nombre [esto es por el nombre de mi naturaleza y de mi cargo; por consiguiente tiene una vocación muy elegida y muy determinada y muy eficaz, como que viene de Dios, según se expresa en los versículos siguientes]

 

* Versículo 2. El hizo mi boca [mi palabra] como cortante espada [véase Isaías 11,4; Hebreos 4,12], El me guarda a la sombra de su mano [como- espada que está escondida bajo la protección de su mano izquierda; por ello está constituido a buen recaudo y gozando de alivio], hizo de m1 aguda saeta [TM "clara", tersa, con la cual hiere de lejos, así como la espada derriba de cerca; véase Salmos 44,4.6], y me guardó en su aljaba [luego será desenvainada cuando le agrade al Señor];

 

* Versículo 3. El me ha dicho: tú eres mi siervo [luego se trata del siervo de Yahvéh], Israel [en el caso de que esta palabra pertenezca al texto original, no se trata de todo el pueblo, porque después, en los versículos 5.6, se dice que éste pueblo debe ser congregado; sino que se da a la Cabeza el nombre de todo el cuerpo sobre todo por ser el nombre de una persona singular, Jacob, y por ser este nuevo "Israel" a causa de la oración y también por el sufrimiento "combatiente de Dios"], en ti seré glorificado [TM "en tí me mostraré glorioso").

 

Una vez presentada su elección tan sublime, el siervo de Yahvéh se queja de que su esfuerzo haya sido vano:

 

* Versículo 4. Yo me decía: por demás he trabajado, en vano y para nada consumí mis fuerzas [véase S.Juan 12,37 y la terquedad posterior de los judíos...]; pero mi causa está en manos de Yahvéh, mi recompensa en las manos de mi Dios.

 

* Versículo 5. Y ahora dice Yahvéh, el que desde mi nacimiento me formó para siervo suyo, para atraer a él a Jacob [ahora se va a indicar lo que el Señor dirá para consolar y para mostrar la eficacia de la acción de aquél que ha sido llamado con vocación tan noble a fin de traer a él a Jacob] para congregarle a Israel.[8] Yahvéh me. ha dado este honor, y él, mi Dios, será mi fuerza.

 

Versículo 6. Díjome [el Señor al consolarme]: poco es para mí ser tú mi siervo para restablecer las tribus de Jacob y conducir a los salvados de Israel; [y se le propone una gloria mucho mayor, la cual le vendrá a causa de su esfuerzo] yo te hago luz de las gentes, para llevar mi salvación hasta los confines de la tierra [luego se trata de alguna salvación universal y espiritual, por parte de aquél que será la luz del mundo (véase S.Lucas 2,32; S.Juan 8,12), apartando a  todos los pueblos de la ignorancia y de sus pecados; lo cual no puede decirse de ningún profeta, a excepción del Mesías].

 

* Versículo 7. Así dice Yahvéh, el Redentor de Israel su Santo, al menospreciado y abominado de la gentes, al esclavizado por los tiranos [el cual -según la interpretación cristiana- al provenir de un pueblo que estaba dominado fue humillado de tal forma que compareció en presencia de Anás, de Caifás, de Pilato, de Herodes...] verán te los reyes, y se levantarán; los príncipes, y se prosternarán, por la obra de Yahvéh, que es fiel; del Santo de Israel, que te ha elegido [así se contrapone la gloria que provendrá a causa de la humillación].

 

* Versículo 8. Así habla Yahvéh [a saber presentando ciertos datos más particulares acerca de la exaltación del siervo de Yahvéh]: al tiempo de la gracia te escuché [de donde se trata de alguna recomendación y petición hecha por el siervo de Yahvéh al Señor, la cual ha sido escuchada; véase S.Juan 17,1s; Hebreos 5,7] el día de la salvación vine en tu ayuda [véase Isaías 50,7; 49,7]. Yo te formé y te puse por alianza de mi pueblo [a saber para instaurar la nueva alianza entre Dios y el pueblo, puesto que la antigua alianza ha sido ultrajada, de cuyo ultraje la señal está en el hecho mismo de ser conducido el pueblo al destierro. Acerca de la nueva alianza véase Jeremías 31,31; Oseas 2,18; Malaquías 3,1], para restablecer la tierra y repartir las heredades desvastadas [de este modo de nuevo se levanta la tierra que ha sido devastada, y se distribuyen otra vez las heredades que habían sido abandonadas, a saber todo se vuelva en mejor situación y estado].

 

* Versículo 9. Para decir a los presos: salid; y a los que moran en tinieblas: venid a la luz [a saber a ,los que están encarcelados y a los que gimen en la oscuridad. Sigue una descripción poética de la prosperidad futura]: en todos los caminos serán apacentados, habrá pastos en todas las laderas [esto es en todas partes incluso en las pendientes antes peladas, hallarán pastos y no tendrán que pasar por molestias en el camino del encuentro de éstos].

 

* Versículo 10. No padecerán hambre ni sed, calor ni viento solano que los aflija. Porque los guiará el que de ellos se ha compadecido y los llevará a aguas manantiales [véase Apoc.7,17 -de este modo el Señor es presentado como el pastor que está lleno de clemencia y de preocupación por su rebaño. La misma preocupación aparece en los versículos siguientes ]:

 

* Versículo 11. Yo tornaré todos los montes en caminos [a saber las asperezas se tornarán en llanuras] y estarán preparadas las vías [se distinguirán fácilmente y serán fácilmente visibles, a fin de que ninguno se equivoque].

 

* Versículo 12. Vienen de lejos, éstos, del norte y del poniente; aquéllos de la tierra del sur [así interpreta S.Jerónimo el texto hebreo sinim, puesto que el monte Sinaí está al mediodía; pero otros prefieren interpretar, por el contexto, haciendo referencia a una región más remota, y hacen la contraposición con el Occidente el cual se ha hablado antes, de forma que interpretan ésto haciendo referencia a una región oriental].

 

* Versículo 13. Cantad, cielos; tierra, salta de gozo, monte, que resuenen vuestros cánticos, porque ha consolado Yahvéh a su pueblo, ha tenido compasión de sus males [de este modo todas las creaturas exultan de gozo en alabanzas a causa del consuelo que se ha obrado mediante el siervo de Yahvéh.

 

El consuelo que hace referencia a Sión C.49,14­26 el cual está íntimamente conexionado con la gloria v la obra del Mesías. Este consuelo se extiende hasta el capítulo 50,3.

 

En los versículos siguientes se exponen las cualidades del siervo de Yahvéh:

 

621. ISAÍAS 50,4-11. El siervo de Yahvéh (pues de él se trata de forma clara en el V.6, el cual no puede ser Isaías), presenta su obediencia, por la cual Dios (habiéndose quejado en el V.2 de que nadie le escuchara) pueda realizar la salvación.

 

* Versículo 4. El Señor, Yahvéh, me ha dado lengua de discípulo [para que escuche como discípulo, y de este modo sea enseñado por el Señor; véase Isaías 11,2; 49,2], para saber sostener con mi palabra a los abatidos [luego ésta será obra del Mesías]; cada mañana despierta mis oídos para que oiga como discípulo [así pues el Señor le habla todas las mañanas, y la doctrina, que este siervo enseña, es la de aquél que le ha enviado; véase S.Juan 7,16.46; 8,26.40; 12.50; 14,24; 15,15].

 

* Versículo 5. El Señor, Yahvéh, me ha abierto los oídos [me ha enseñado], y yo no me resisto, no me hecho atrás [puesto que hace siempre lo que es del agrado del Señor; véase S.Juan 8,29; 14,31... Es tan obediente que tiene una gran fortaleza según se muestra en los versículos siguientes].

 

* Versículo 6. He dado mis espaldas a los que me herían, y mis mejillas a los que me arrancaban la barba. Y no escondí mi rostro ante las injurias y los esputos [como si se tratara del más despreciable lugar que es elegido para este menester y como una afrenta enormemente ignominiosa (véase Job 30,10); véase Salmos 2117; 68,,8. -Respecto al cumplimiento de esto en Jesús Nazareno, véase S.Mateo 27,30; S.Marcos 14,65; S.Lucas 18,32; 22,64; S.Juan 18,22].

 

* Versículo 7. El Señor, Yahvéh, me ha socorrido, y por eso no cedía ante la ignominia e hice mi rostro como de pedernal [-estas palabras las pronuncia también el siervo de Yahvéh, puesto que están de acuerdo con lo anterior (C.49,1.2.6.8) acerca de la promesa del auxilio divino] sabiendo que no sería confundido [vease S.Juan 16,33 donde se dice que Jesús alcanza la victoria sobre el mundo -por ello prosigue]:

 

* Versículo 8. Cerca está mi defensor. ¿Quién quiere contender conmigo? [véase S.Juan 8,46]. Comparezcamos juntos. ¿Quién es mi adversario? que se ponga frente a mí.

 

* Versículo 9. Si, el Señor, Yahvéh, me asiste. ¿Quién me condenará? [así pues está constituido en el Señor con plena seguridad y total confianza]. Todos ellos caerán en pedazos, como vestido viejo: la polilla [ciertamente un elemento mínimo] los consumirá.

 

Sigue la exhortación a una confianza semejante:

 

* Versículo 10. Quien de vosotros tema a Yahvéh, oiga la voz de su Siervo. El que ande en tinieblas privado de luz, [éste] que confíe en el nombre de Yahvéh y se apoye sobre su Dios.

 

Por el contrario sigue la amenaza para los adversarios:

 

* Versículo 11. Los que estáis encendiendo un fuego y preparando saetas encendidas [esto es TM los que lucháis con dardos incendiarios o saetas ardientes, con la lengua y la impiedad], arrojaos a las llamas de vuestro fuego sobre las saetas que encendéis [expresión irónica, ya que esto se volverá en contra de ellos]: de mi mano os llegará esto, [a saber] seréis atormentados en un lecho de dolor.

 

En el C.51-52,12 el señor consuela a Sión con la esperanza de la salvación; y el C.52,13s de nuevo se habla del siervo de Yahvéh.

 

622. ISAIAS 52,l3ss. Una vez más se habla del siervo del Señor, del cual se había hablado antes (49,1-13; 50,4-11), de tal forma que Isaías presenta de un modo más claro la humillación del siervo del Señor y a causa de ésta su exaltación.

 

* Versículo 13. He aquí que será prudente [será sabio (véase Jeremías 23.5), ya que tiene el espíritu del Señor (véase Isaías 11, 2; 42, 1) , y por tanto obrará con sabiduría; por más que esto se realice mediante la necedad de la cruz] mi Siervo [a saber el mismo del que se ha hablando antes 49,1-13; 50,4-11], prosperará y será engrandecido y ensalzado, puesto muy alto.

 

* Versículo 14. Como de ti se pasmaron [esto es del pueblo de Israel, al cual habla Dios; o bien del siervo de Yahvéh leyendo "de él"] muchos [al ver el abatimiento y la aflicción del pueblo], tan desfigurado estaba su rostro [a saber el rostro del siervo del Señor] que no parecía ser de hombre [de este modo la aflicción y la ignominia del pueblo de Israel es imagen de la aflicción del siervo del Señor; sin embargo después surgirá glorioso].

 

* Versículo 15. Este [TM, los LXX: "así"] rociará a muchas gentes [con la aspersión con la que son purificadas y son limpiadas y son consagradas, según el sentido frecuente del vocablo usado únicamente en el libro del Levítico y en el de los Números (si seguimos esta lección del TM). Ahora bien esta aspersión sacrificial la realizaba únicamente el sacerdote; de donde el siervo del Señor es designado como Sacerdote, y se indica que iniciará la nueva alianza, más amplia que la antigua cuando Moisés roció al pueblo (Éxodo 24,8); puesto que el siervo del Señor rocía no a un sólo pueblo, sino a muchas gentes (véase Hebreos 9,11-22; 12,24). En efecto mediante el precio de su sangre se presenta en el Nuevo Testamento muchas veces al Mesías como redimiendo, expiando y purificando a todos los hombres], y los reyes cerrarán [comprimirán llenos de pasmo y de reverencia] ante él su boca al ver lo que jamás vieron, [a saber. puesto que, vieron lo que les ha sido narrado], al entender lo que jamás habían oído [véase Rom. 15,21].

 

623. ISAÍAS 53,1ss. Sin embargo, una vez anunciada aquélla exaltación futura, será difícil dar crédito a la humillación del siervo del Señor, a no ser que se reconozca en ésta el poder de Dios.[9]

 

* Versículo 1. Por ello el Profeta dice ¿quién creerá lo que hemos oído? [luego lo creerán poco], ¿el brazo de Yahvéh [a saber, su poder el cual se muestra en esto y es necesario para creer esto] a quién fue revelado? [¿a quién le es dado a conocer?; sin duda dice esto de los judíos, ya que se acaba de indicar que se decía que los reyes cerrarán ante él su boca...].

 

* Versículo 2. Sube ante El como un retoño [crecerá como un brote del tronco escondido (véase Isaías 11,1) y humilde, en presencia del Señor] como retoño de raíz en tierra árida [a saber, de tierra seca e igualmente pobre, o sea del pueblo humillado y oprimido; otros entienden de tierra fecunda no a causa de la lluvia o del esfuerzo humano, o sea de la Virgen Madre: pero esto parece que no hace referencia a la humillación sino a la gloria]. No hay en él parecer, no hay hermosura que atraiga las miradas, no hay en él belleza que agrade [a saber, no había en él belleza visible para que le echáramos de menos, otros dicen: no había en él encanto para mirarle, y al no mirarle no sentíamos añoranza por él];

 

* Versículo 3. Despreciado, desecho de los hombres, varón de dolores, conocedor [que ha experimentado bien] de todos los quebrantos [heridas y tormentos], ante quien se vuelve el rostro, menospreciado [como si todos apartaran de él con horror la vista; otros dicen: como escondiendo el rostro por pudor], estimado en nada [a saber, el pueblo de Israel no hemos sentido aprecio por él].

 

* Versículo 4. Pero fue él, ciertamente, quien tomó sobre si nuestras enfermedades [a saber, éste en verdad (con énfasis) asumió en sí mismo nuestros dolores y los castigos, que nosotros hemos merecido (mejor que quitó; y esto por el paralelismo con la siguiente sentencia) y consiguientemente también quitó las secuelas del pecado, las enfermedades; véase S.Mateo 8,17; 1 S.Pedro 2,24] y cargó con nuestros dolores [a saber, con el peso; por tanto el siervo del Señor dará satisfacción vicaria por nosotros] y nosotros le tuvimos por castigado [a saber, con un castigo puesto por Dios] y herido por Dios y humillado [por sus iniquidades, a pesar de que sufría a causa de

nosotros].

 

* Versículo 5. Fue traspasado por nuestras iniquidades y molido por nuestros pecados [así de distintos modos, hasta de cuatro formas, se repite la misma sentencia] el castigo salvador pesó sobre él y en sus llagas hemos sido curados [véase, 1 S.Pedro 2,24].

 

Y dando razón de nuestras iniquidades:

 

* Versículo 6. Todos nosotros andábamos errantes, como ovejas, siguiendo cada uno su camino [siguiendo las propias concupiscencias apartados de la vereda recta], y Yahvéh cargó sobre él la iniquidad de todos nosotros.

 

En cambio él sufría todo esto libre y voluntariamente: ha querido [véase, S. Juan 18,4-11; TM tiene: "maltratado y afligido y él mismo se sometió", esto es lo soportó con paciencia] no abrió la boca, como cordero llevado al matadero, como oveja muda ante los trasquiladores. -Y en esto se pone de relieve el supremo modelo de mansedumbre y de paciencia que es el Mesías; véase Isaías 50,5 y lo que evangelistas indicaron acerca del silencio de Jesús en su pasión: S.Mateo 26,63; 27,14; S.Marcos 14,61; 15,5; S.Lucas 23,9.

 

* Versículo 7. Se ofreció [en sacrificio e inmolación, o bien poniéndose delante y ofreciéndose a los que le aprehenden y a los jueces] porque él mismo

 

* Versículo 8. Fue arrebatado por un juicio inicuo [a saber, a causa de la opresión y por un juicio inicuo (obrando como causa) fue quitado de ésta vida; así como se dirá inmediatamente después: porque fue arrancado de la tierra de los vivos]. ¿Quién explicará con todo detalle su generación? [no hay una explicación constante de esta sentencia. Aparte de aquéllos que corrigen aquí al TM introduciendo una lección diversa (su camino, su muerte, su dolor), muchos más recientes entienden la generación ( γενεά ) respecto al conjunto de los coetáneos, como admirando el profeta la maldad y la crueldad de ellos. Entre otras interpretaciones hay que hacer notar: 1) ".¿quien explicó con detalle el muy antiguo linaje de él?" (véase, V.10; Salmos 21,31; 71,17); 2) la cual interpretación la recomiendan los Santos Padres y los antiguos: "¿quién explicará con detalle su generación bien la eterna en el seno del Padre -o bien (según otros) la temporal en el seno de la Bienaventurada Virgen y Madre, y su nacimiento -o bien su generación gloriosa mediante su resurrección?"; véase las distintas explicaciones al Salmo 2,7; anteriormente en el n.598], sin que nadie defendiera su causa, cuando era arrancado [por tanto con una muerte violenta] de la tierra de los vivientes y muerto por las iniquidades de su pueblo.

 

* Versículo 9. Dispuesta estaba entre los impíos su sepultura [S.Jerónimo lo explica así:"en virtud de su sepultura a muerte se ganará a los gentiles (a los impíos) y al pueblo judío (que es el rico)". Sin embargo el TM dice lo siguiente: y dispone su sepulcro entre los impíos, y (esto es sin embargo) después de su muerte lo entierran en el sepulcro de-un rico; en lo cual aparece la voluntad futura de dar sepultura al Mesías juntamente con los criminales, y sin embargo fue sepultado en el sepulcro de un rico; véase, S.Mateo 27,57.60] a pesar de no haber en él maldad ni haber mentira en su boca [luego también se muestra en esto y se ve de un modo evidente que este siervo de Yahvéh no es el pueblo de Israel, el cual ciertamente había obrado la iniquidad. Véase también, 1 S.Pedro 2,22].

 

624. PREMIO DEL SIERVO DE YAHVEH: ISAÍAS 53,10ss.

 

* Versículo 10. Es que quiso Yahvéh [TM le agradó al Señor] quebrantarle con padecimientos [sin duda a causa de los bienes que se derivarían de esto, y a causa de la glorificación y de la estima de la sabiduría y del poder de Dios, que se muestran en la pasión del siervo de Yahvéh].

 

Ofreciendo su vida en sacrificio por el pecado [esto es, si se pusiera en calidad de sacrificio expiatorio por el pecado, véase 2 Cor.5,21; Hebreos 9,14; 1 S.Juan 2,2] tendrá posteridad [esto es, verá a sus descendientes, los cuales alcanzarán vida por esto mismo] y vivirá largos días [TM tendrá vida perenne (véase, Apoc. 1,18), la cual extenderá también a sus descendientes] y la obra de Yahvéh [esto es, lo que le agrada al Señor, la redención y la restauración del linaje humano] en sus manos prosperará [a saber, irán por el buen camino a causa de él].

 

* Versículo 11. Librada su alma de los tormentos [a causa de los sufrimientos soportados o en vez de los sufrimientos] verá [a saber, los frutos obtenidos] y lo que verá colmará sus deseos [a saber por el gozo a causa de la victoria alcanzada y por los efectos de felicidad respecto a él y respecto a otros]. En su ciencia [a saber, por el conocimiento que él mismo posee y comunica; véase, Isaías 11,2; 42,6s; 49,2.8s; 50, ,4 ] el justo, mi siervo, justificará a muchos [ya que -según las palabras de Jesús- "ésta es la vida eterna, que te conozcan a Ti, único Dios verdadero y a tu enviado Jesucristo" (S.Juan 17,3); "para probar que es justo y que justifica a todo el que cree en Jesús" (Rom. 3,26); de aquí el que también justificará por la comunicación de la ciencia acerca de sí mismo] y cargará con las iniquidades de ellos.

 

* Versículo 12. Por eso yo le daré por parte suya muchedumbres [Salmos 2,8: haré de las gentes tu heredad...] y recibirá muchedumbres por botín [como vencedor después de la batalla]; por haberse entregado a la muerte y haber sido contado entre los pecadores [véase, S.Marcos 15,28; S.Lucas 22,37; S.Juan 18,30] cuando llevaba sobre si los pecados de todos e intercedía por los pecadores [véase, S.Lucas 23,34]. Así en estos cuatro miembros se compendia toda la pasión.

 

625. FRUTOS DE LA PASIÓN DEL SIERVO DE YAHVEH. ISAÍAS, 54ss.        

 

Después de aquéllos capítulos anteriores, se presentan con más abundancia después (C.54...) los frutos alcanzados, verdaderamente extraordinarios en virtud de la humillación y de los dolores del siervo de Yahvéh: la nueva Sión tendrá innumerables hijos y -se le dice a ella- tu descendencia poseerá las naciones (V.1-3). No hay nada que temer para el futuro, puesto que "tu marido es tu Hacedor" "pero en mi eterna misericordia me apiadé de ti, dice Yahvéh, tu Redentor" (V.4-10).

 

Se presentan la seguridad de la nueva Sión (V.11-17) y la universalidad de los bienes que poseerá (C.55,1ss...): porque en el C.55,5 se dice: llamarás a pueblos que te son desconocidos, y pueblos que no te conocen correrán a ti, por Yahvéh, tu Dios, por el Santo de Israel, que te glorificará.

 

Después de las amenazas al pueblo, de nuevo queda en claro la gloria de Jerusalén (C.60): porque sobre ella se mostrará el Señor y su gloria se verá en ella(60, 2) ;

 

* Versículo 3. Las gentes andarán a tu luz -se le dice a ella- y los reyes, a la claridad de tu aurora [nótese de nuevo en este versículo y en los siguientes la universalidad del reino descrito].

 

Y el mismo siervo de Yahvéh, del cual se han proclamado antes cosas tan admirables, (C.61) aparece anunciando la obra de su redención:

 

* Capítulo 61.1. El espíritu del Señor, Yahvéh, descansa sobre mí [antes respecto al mismo siervo: Isaías 11,2; 42,1], pues Yahvéh me ha ungido [es conocido (véase n.384) que en el Antiguo Testamento solían ungir a los reyes, a los sacerdotes, a los profetas]. Y para predicar la buena nueva a los abatidos me ha enviado [por tanto el evangelizar a los pobres era un signo mesiánico; véase S.Mateo 11,5], y sanar a los de quebrantado corazón; para anunciar la libertad a los cautivos y la liberación a los encarcelados.

 

* Versículo 2. Para publicar el año de la remisión de Yahvéh [a causa de la expiación de la culpa que se había llevado a efecto] y el día de la venganza de nuestro Dios [respecto a aquéllos que se mantienen siendo enemigos]...

 

Respecto a la interpretación mesiánica de éste texto según el sentido de los judíos, y respecto a la aplicación a Jesús Nazareno, recuérdense también las palabras de Jesús en la sinagoga de Nazaret: "hoy se cumple esta escritura que acabáis de oír" (S.Lucas 4,21).

 

... para consolar a los tristes, lo cual sé amplifica también en los siguientes versículos y al mismo tiempo se trata también de la renovación de la nueva teocracia (V.4-9).

 

* Versículo 9. Su descendencia será glorificada en los pueblos, y su prosperidad en medio de las gentes [nótese la catolicidad del reino futuro, y en los siguientes versículos también la santidad de los buenos que habrá en él:] y quien los viere reconocerá que son la progenie bendita de Yahvéh. Por tanto Jerusalén llena de gozo se alegrará en el Señor.

 

El Señor, Yahvéh hará brotar la justicia y la gloria ante todas las gentes (V.10.11).

De nuevo se ponderan la gloria y la salvación de Jerusalén (C.62). Viene el Salvador de ella (V.11). Y se presenta la imagen del Mesías vencedor:

 

* Capítulo 63,1. ¿Quién es aquél que avanza desde Edom [desde los enemigos de Israel, los edomitas] enrojecido con vestidos más rojos que los de un lagadero, tan magníficamente vestido, avanzando en toda la grandeza de su poder? Y responde el Mesías: soy yo el que habla justicia, el poderoso para salvar. La fortaleza de aquél, por el cual ha sido obtenida la victoria, y sólo por él, se ensalza bellísimamente en los siguientes versículos (V.2-6).

 

626. Luego según las profecías de Isaías se predicen del Mesías tantas y tan admirables cosas que casi se podría decir que están contenidas en estas profecías todas las cualidades y prerrogativas de aquél, casi su vida entera, tan dolorosa como gloriosa...

 

627. MIQUEAS 2.3. Este profeta, en tiempo de los reyes Joatán, Achaz y Ezequías, y contemporáneo de Isaías anuncia en la primera parte de su profecía (1,1-3,12) la venida del Señor que va a castigar a Israel a causa de sus pecados y por ello "será Sión arada como un campo, y Jerusalén será un montón de ruinas, y el monte del templo será un breñal" (3,12) [se trata por tanto de la destrucción de la ciudad y del templo; pero no parece que se refiera a la destrucción que aconteció después de la venida de Jesucristo].       -A este castigo se contrapone la exaltación futura del monte de la casa del Señor a lo postrero de los tiempos (véase, Isaías 2,1-4), y también la paz y la liberación de los enemigos mediante el rey y el consejero futuro (4,1-13). Acerca de este dominador en Israel tratan las siguientes palabras:

 

628. CAPITULO 5,2. Pero tú, Belén Ephratá pequeño [a saber, un pueblo] para ser contado entre las familias de Judá [entre las ciudades que cuentan un millar en Judá], sin embargo de me saldrá quien señoreará en Israel, cuyos orígenes serán de antiguo, de días de muy remota antigüedad [esto es de la eternidad; como quiera que consta por otra parte que este Mesías es Dios, interpretamos con todo derecho en sentido propio este texto acerca de su origen eterno, mejor que acerca de su origen de una familia antigua, la familia de David].

 

* Versículo 3. A causa de esto [a saber, porque el Mesías ha de venir de un lugar desconocido] los entregará [a saber, entregará a los Israelitas a fin de que sean refrenados; véase 5,1] hasta el tiempo en que la que ha de parir parirá [véase, Isaías 7,14], y el resto de sus hermanos volverá a los hijos de Israel [luego los hermanos del Mesías, en cuanto al linaje del pueblo, dispersos en otro tiempo, regresarán al verdadero Israel].

 

Por último una vez escrito el juicio del Señor con su pueblo [1,16], se describen la penitencia y las hermosas súplicas del pueblo (7,1-20).

 

629. PROFECÍAS DE JEREMÍAS. El profeta Jeremías escribió en el año cuarto de Joaquín hijo de Josías, rey de Judá, por encargo del Señor y mediante su discípulo Baruch las palabras que el Señor le había hablado en contra de Israel y de Judá y en contra de todos los pueblos (Jeremías 36,1-4); el cual volumen había sido en verdad escrito y leído en presencia del pueblo, y echado por el rey al fuego (36,5-26). Sin embargo fueron escritos de nuevo por encargo del Señor y mediante Baruch "al dictado de Jeremías todos los sermones del libro que quemó Joaquín rey de Judá, y se añadieron todavía otros muchos como aquéllos (36.27.32) Entre éstos oráculos divinos, ordenados al arrepentimiento de Judá, se hallan algunos de consuelo, los cuales se refieren a los tiempos mesiánicos.

 

Así pues después de haber reprendido a los pastores [esto es a los reyes] que dispersan y destrozan el rebaño del pastizal del Señor (Jeremías 23,1s), el Señor promete la restauración de su pueblo y que él va a reunir los restos de su rebaño congregándolos de todas las tierras después de la dispersión y que les dará buenos pastores (V.3s): De este modo parece que se predice la restauración en la tierra de Israel después de la cautividad, juntamente con otra restauración universal, de la cual fue figura la restauración de Israel.

 

Sin embargo el Señor habla de un modo especial de un pastor egregio:

 

* Versículo 5. He aquí que vienen días, palabra de Yahvéh, en que yo suscitaré a David un vástago de justicia [el Mesías será del linaje de David; véase, 2 Reyes 7,14ss; Isaías 11,1... véase, Zacarías 3,8; 6,12 donde el vocablo Germen, Oriente se le aplica como propio al Mesías], que, como verdadero rey, reinará prudentemente y hará derecho y justicia en la tierra.

 

* Versículo 6. En sus días será salvado Judá, e Israel habitará en paz [por tanto el Mesías será rey, y la justicia y la paz serán propiedades de su reino] y el nombre con que le llamarán será éste:

 

"Yahvéh Zidqenu (nuestro señor justo) [algunos autores ya antiguos como Maldonado, Mariana..., veían expresada aquí la divinidad del Mesías, ya que se le atribuía el nombre incomunicable de Yahvéh; sin embargo muchos autores más recientes como Knabenbauer, Condamin, interpretan este nombre compuesto "Yahvéh nuestra justicia" de tal forma que acontece en los días del Mesías el que "por obra y don de aquél, Yahvéh es nuestra justicia"; de aquí el que queda expresada mediante el futuro Mesías la obra de la justificación y de la santificación; y por tanto su reino espiritual].

 

A causa de lo cual no solamente aparecerán mediante la nueva restauración cosas admirables en el hecho de sacarles de Egipto, sino también otras nuevas acciones portentosas (V.7s).

 

De nuevo se habla acerca de la restauración en el C.30,1-31,30) y de los bienes mesiánicos futuros. Y el futuro Mesías como vástago de David, es llamado David por lo cual dice el Señor:

 

* Capítulo 30,9. ...sino que servirán a Yahvéh, su Dios, y a David, su rey, que yo les suscitaré.

 

Mientras prosigue hablando de los bienes futuros, leemos en el:

 

* Capítulo 31,22. ...pues hará Dios una cosa nueva en la tierra. La mujer tornará al varón. Ahora bien S.Jerónimo y .otras como Knabenbauer interpretan esto acerca de la concepción virginal del Mesías en el seno de la Bienaventurada Virgen Madre.

 

Y cuando se vuelve a hablar de nuevo de la restauración de la nueva alianza y de los bienes mesiánicos futuros, se repite (33,14-16) la antigua profecía (23,5).

 

630. La mesianidad de los textos anteriores, así como en general desde el C.30 al 33, parece que consta ya por el contexto, atendiendo a otros datos que conocemos por otra parte acerca del reino mesiánico. El profeta describe la restauración de la teocracia de Israel después del exilio; ahora bien ésta o bien es el reino mesiánico, o bien por intención de Dios tiende al reino mesiánico y es figura de él.

 

631. PROFECÍAS DE EZEQUIEL. Ezequiel profetizó en tiempo de la cautividad en tierra de los caldeos (Ezequiel 1,1-3); y presentó en símbolos y en visiones al pueblo del Señor las amenazas del Señor respecto a Judá (C.3-24).

 

Entre estas amenazas se describe el desastre de Judá mediante la alegoría de la espada "de una gran matanza" (21,1-27); y el reino -según se dice- (V.25-27) -irá a la perdición:

 

* Capítulo 21,27. [TM: "¡ruina, ruina! ¡a ruina las reduciré!" y no será más mientras no venga aquél a quien de derecho pertenece y a él se las daré] [el Mesías que había sido preanunciado anteriormente muchas veces como rey (Génesis 49,10; Salmos 2,71,109; Isaías 11,4...) tendrá como suyo propio el reino y se le deberá a él; véase, anteriormente también la profecía de Jacob n.585];

 

Por tanto después de éstas amenazas a Judá (C.3­24), y también después de los oráculos en contra de los gentiles (C.25-32), el profeta expone también el consuelo que se dará mediante la futura restauración de Jerusalén (C.33-29). Entre las distintas promesas del Señor sobresale en el C.34 la promesa acerca del buen pastor que va a ser suscitado.

 

Se resaltan (C.34,1-10) los males que han sido llevados a cabo por los malos pastores, los cuales se apacentaban así mismo; por ello el Señor dice que él mism6 requerirá su rebaño y visitará a sus ovejas (V.10-12): C.34,11... Yo mismo iré a buscar a mis ovejas y las reuniré: V.12 como recuenta el pastor a sus ovejas el día en que la tormenta dispersa a la grey así recontaré yo mis ovejas y las pondré a salvo en todos los lugares en que fueron dispersadas el día del nublado y de la tiniebla.

 

Se amplían las funciones del pastor divino bueno, dulce y solícito, que hace volver a las ovejas de la dispersión (V.13,22), y el mismo Señor dice:

 

* Versículo 23. Suscitaré para ellas un pastor único, que las apacentará, mi siervo David, él las apacentará, él será su pastor [a saber, el Mesías, el rey de la casa de David (2 Reyes 7,14ss; Isaías 9,7; 11,1; Miqueas 5,2; Jeremías 23,5; 30,9; 33,15; Oseas 3,5). Este será el único que en realidad de verdad sea el rey y el pastor, del cual vendrá la salvación y en el cual hay que poner la esperanza]; él las apacentará [a las ovejas], el será su pastor.

 

* Versículo 24. Yo, Yahvéh, seré su Dios, y mi siervo David será príncipe en medio de ellos [en lo cual se muestra la benevolencia de Yahvéh para con aquéllas ovejas y el cargo de pastor propio del Mesías; véase, S.Juan 10,14 donde Jesús Nazareno se llama así mismo el pastor bueno]: yo, Yahvéh, lo he dicho [palabras que hacen referencia a la solemnidad de la profecía].

 

* Versículo 25. Haré con ellas alianza de paz, haré desaparecer de la tierra las fieras, y andarán tranquilas por el desierto y se reposarán en la selva [estas palabras hacen referencia a los bienes de la paz y de la prosperidad, los cuales son bienes mesiánicos (véase, Salmos 71; Isaías 9,6s...), así como también lo que está contenido en los siguientes versículos, V.26ss...].

 

En el capítulo 37 mediante alegorías acerca de los huesos dispersos que han sido vivificados y acerca de la unión de los báculos en orden a formar uno solo se presenta una nueva promesa respecto a la restauración de Israel que regresará de la dispersión. Se describe de nuevo el Salvador futuro: C.37.24 mi siervo David será su rey, y tendrán todos un solo pastor. Y, del mismo modo que aparece de nuevo David como figura del Mesías, así también Jerusalén y la restauración del pueblo en ciudad es figura del nuevo reino mesiánico que va a ser instaurado.

 

Los restantes bienes mesiánicos, el de la santificación y el de la paz (a saber, bienes en grado sumo espirituales) se indican en los V.24-28; ciertamente en orden a aquéllos que trabajarán en su santificación y se someterán al Mesías rey. También se anuncia de antemano la perpetuidad del reino del Mesías:

 

* Versículo 25 ... y por los siglos será su príncipe David, mi siervo [véase, S.Lucas 1,33].

 

632. PROFECÍA DE DANIEL 9,24-27. El profeta Daniel, tras una hermosa plegaria a fin de que Dios conceda por su gran misericordia la salvación a Jerusalén (Daniel 9,1-19), después de los setenta años de desolación que habían sido anunciados de antemano por Jeremías, 25,11-13; 29,10 (Daniel 9,2), recibe del arcángel Gabriel a la hora del sacrificio vespertino (V.20-23) la siguiente profecía no precisamente acerca de los setenta años sino acerca de las setenta "semanas".

 

633. El sentido mesiánico de la profecía consta:

a) no solo por los antiguos rabinos (sirviéndonos de testigos Raimundo Martí), sino también,

b) por la naturaleza de los bienes que se prometen en el V.24, a saber bienes propiamente mesiánicos, según consta por otras profecías: así el término de las trasgresiones, el fin del pecado, la expiación de la iniquidad, la aportación de la justicia eterna...

c) La muerte violenta "del ungido" (como se le denomina al Mesías) está de acuerdo con otras profecías acerca de los dolores y la pasión del Mesías (Salmos 21; Isaías 53).

d) Lo que se predice aparece perfectamente cumplido en Jesucristo: así (V.24) la suspensión y el término cumplido de las profecías del Antiguo Testamento, "porque todos los profetas y la Ley han profetizado hasta Juan" (S.Mateo 11,13); la abolición del culto del Antiguo Testamento y la confirmación de la nueva alianza (V.27); la destrucción de la ciudad y del templo (V.26s); se lleva a cabo perfectamente el cómputo de semanas hasta la época de Jesús Nazareno, y así se explica la expectación mesiánica que había en su tiempo.

 

Nada tiene de extraño el que prácticamente con un acuerdo unánime los interpretes católicos tienen esta profecía como mesiánica, aunque no coincidan en el cómputo de las semanas que deben ser tenidas en cuenta en cuanto al término "a quo", y por defecto de un conocimiento cronológico seguro.

 

634. Dice el arcángel San Gabriel a Daniel "varón de deseos", a saber, varón que es entrañable y el predilecto de Dios.

 

* Versículo 4. Setenta semanas [en un número concreto, no simbólico e indeterminado; puesto que al instante se dirá que están prefijadas esto es decretadas y determinadas, y después se subdividen por partes: 7 + 62 + 1.

 

Estas semanas no son de días, ya que el ángel anuncia la destrucción de Jerusalén (V.7) y, queriendo consolar a Daniel que ruega en favor de la ciudad, no le ofrecería ningún consuelo anunciándole la inmediata destrucción de la ciudad; ni tampoco sería posible en tan corto espacio de tiempo hacer todo lo que se indican en los V.25-27.

 

Por tanto se trata de semanas de años, esto es, se refiere a setenta años sabáticos; este modo de hablar no era extraño a los judíos (Levítico 25,2.4.8; 26,34.43). Así esto responde a los setenta años que Daniel en el V.2 había pensado que tenían que cumplirse para que llegara el término de la cautividad.

 

Se diría totalmente sin fundamento el que se trata de semanas de jubileos o de centenarios...].

 

Están prefijadas ["esto es, definidas, establecidas] sobre tu pueblo [en favor del cual había rogado Daniel] y sobre tu ciudad santa [santa porque Dios colocó allí su templo y su sede, y era después de la restauración figura del reino mesiánico] para acabar las transgresiones [esto es, para que la prevaricación tenga fin, según se dice en los versículos siguientes], y dar fin al pecado [esto es, para que queden sellados, imposibilitados y refrenados los pecados], para expiar la iniquidad -[Consta por los profetas anteriores que todos éstos son bienes mesiánicos: Isaías 4,4; 53,4­12; 60,18; Jeremías 3,17; 31,34...], y traer la justicia eterna [igualmente un bien mesiánico, del cual se habla en el Salmo 71; Isaías 11,9; véase, también 1 Cor. 1,30 donde se dice que Cristo Jesús ha venido a ser justicia para nosotros].

 

Para sellar la visión y la profecía [a saber, o bien con el término cumplido de las antiguas visiones, o bien porque cesen las visiones según la costumbre antigua (no en cambio según la costumbre nueva, de la cual hablan Joel 2,28 y Hech. Apóst.2,17) y por el hecho de que el Señor nos habla en el Hijo (Hebreos 1,1); "porque todos los profetas y la Ley han profetizado hasta Juan (Bautista)", según nos dice S.Mateo 11,13].

 

Y ungir una santidad santísima. [Ahora bien, ¿de que unción se trata? Todos los bienes anunciados hasta ahora son mesiánicos, y en los versículos siguientes se habla de alguna persona ungida. Así pues se diría sin fundamento alguno que se trata de la dedicación del templo en época posterior, puesto que no se menciona ninguna unción ni en la dedicación del templo segundo (Esdras 6,14-17; 3,2s), ni en la purificación en tiempo de los Macabeos (1 Macabeos 4,52-58).

 

Autores más recientes (Palmieri) hacen referencia en éste texto a la unción del nuevo templo, a saber, de la Iglesia, una unción mística. Sin embargo se entiende mejor, según los Padres y las versiones, en referencia a Jesucristo mismo, el cual es llamado el Ungido por el Espíritu Santo (Isaías 61,1; Salmos 44, 8; S.Lucas 4,18; Hech.Apóst.18,38) y, ungido en verdad en su divinidad, es presentado públicamente como ungido (según la interpretación de los cristianos) en el bautismo de Jesús Nazareno. Entonces empieza la semana septuagésima, en el centro de la cual Cristo será matado].

 

635. Versículo 25. Sabe, pues, y entiende [como una explicación ulterior] que desde la salida del oráculo [a saber, del decreto] sobre la restauración y edificación de Jerusalén [este decreto en el que se-' ordena la edificación de la ciudad es el término desde el que deben ser contadas las semanas. Se trata de un decreto que ha de darse en época posterior, y puede ser aplicado al edicto de Artagerges I el año séptimo de su reinado, a saber, publicado el año 458, del cual se hace mención es Esdras 7,1-7.11-26. En este decreto se dio una potestad muy amplia al escriba Esdras, de donde parece seguirse una potestad para edificar la ciudad juntamente con los muros; lo cual también parece que se desprende de los hechos y de las palabras acerca de Esdras y de Nehemías.

 

En efecto a Esdras se le otorgó el poder de ordenar la política: a) y aquélla comunidad debía ser puesta a buen recaudo en contra de los ataques de los enemigos, lo cual en verdad no podía llevarse a cabo sin muros y sin fosas; b) y parece ciertamente que Esdras comenzó la edificación de los muros, lo cual se deduce de la acusación de los samaritanos a Artagerges (Esdras 4,12-16); por lo que el rey contesta por escrito prohibiendo la edificación, esto es que se detenga "para que ésa ciudad no. sea reconstruida sin una autoridad mía" (Esdras 4,21); por lo cual, puesto que el decreto del rey no lo prohíbe severamente, no se puede deducir que Esdras comenzó la edificación de la ciudad sin la autoridad real. c) ahora bien este comienzo y cese de la edificación de la ciudad se confirma por el modo de obrar de Nehemias (Nehem.1,1­3; 2,1ss), el cual se informa acerca de Jerusalén (informe que sería ocioso e inútil, si no se hubiera emprendido nada en ella), y derrama lágrimas cuando oye que el muro había sido destruido.

 

De esta forma no es necesario aplicar la profecía al edicto del año 20 del reino de Artagerges I, año 445, del cual se habla en Nehem. 2,5-8].

 

Hasta un ungido príncipe habrá siete semanas.

 

En sesenta y dos semanas [por tanto desde el año del decreto de Artagerges I, año 458 -según la interpretación que hemos dado- hasta la manifestación de Jesucristo ungido príncipe en el bautismo, año 26 después de Jesucristo se cuentan 7 + 62 semanas].

 

Se reedificarán [en Jerusalén] plazas y muros [y una fosa] en tiempos difíciles [esto es, en medio de muchas dificultades y persecuciones, de las cuales se habla en Esdras 4,12-16; Nehem. 1,3; 4,1ss; 6,1ss].

 

636. Versículo 26. Al fin de estos tiempos, sin juicio alguno será muerto el Ungido [TM "será quebrantado", será destrozado: vocablo solemne empleado para los delitos graves, cuando se anuncia la pena; Cristo es aquél del que antes se ha hablado en el V.24s, el cual morirá de muerte violenta como también había predicho Isaías y el Salmo 21. -Este oráculo se cumplió en Jesús Nazareno después de las 62 semanas + 7 a partir del edicto de Artagerges I, a saber, después de 483 años contando desde este edicto, esto es después del año 26 de Jesucristo] y no tendrá el pueblo que le negará [así según la Vg. supliendo en el TM el vocablo "pueblo"; a saber, tal pueblo dejará de ser el pueblo de Dios; sin embargo se han dado respecto a éste texto muchas interpretaciones].

 

La ciudad y el santuario serán destruidos con un príncipe [es un oráculo acerca de la ciudad, colocado inmediatamente después de todo lo anterior, ya que tal suceso está unido con un nexo causal -según la interpretación de los cristianos- con la pasión y muerte de Jesucristo; si bien no es necesario que deba seguirse inmediatamente después de la muerte de Jesucristo, sino cuando la ciudad sea ocupada por el ejército de los romanos bajo el mando de Tito. -Según otras versiones: "la ciudad y el santuario perecerán con el príncipe que ha de venir", a saber, con Jesucristo mismo el cual era llamado (véase, anteriormente n.393), en lo cual se ve un nexo moral entre la muerte del príncipe que ha de venir y la destrucción de la ciudad y del santuario],

 

Y el fin llegará como una inundación, y durará hasta el fin la guerra"; véanse n.518-520.

 

637. Versículo.27. Confirmará [hará firme aquél príncipe que ha de venir, el Mesías] el pacto [la alianza, que se nombra muchas veces en las Sagradas

 

Escrituras acerca de la instauración del futuro reino mesiánico, v.gr. en Jeremías 31,31s] para muchos [ τοϊς πολλοϊς , a saber, para todos; véase éste modo de hablar de una forma universal en S.Mateo 20,28. Y se tratará del futuro reino universal] una semana [a saber, la última semana; luego entre los años 26-33 se confirmará una nueva alianza perpetua], y a la mitad de ésta [con toda probabilidad por tanto hacia el año 30, cuando suceda la muerte de Jesucristo] cesará el sacrificio y la oblación [a saber, el sacrificio cruento y el incruento: y de este modo se declara abolido el antiguo culto sacrificial].

 

Con una relación lógica, si bien no necesariamente con una sucesión inmediatamente cronológica, llega el oráculo de la devastación del templo: y habrá en el santuario una abominación desoladora [véase anteriormente, a Flavio Josefa, en su obra de bello judaico, acerca de la guerra judía, donde dice que los ladrones o celotas habían ocupado el templo antes del asedio de la ciudad, y habían constituido a éste como baluarte de su violencia y su rapiña; y a base de los estandartes de las deidades paganas, traídas por los soldados romanos, el templo comenzaba a ser violado; véase S.Mateo 24,15; S.Marcos 13,14], hasta que la ruina decretada venga sobre el devastador; [véase n.518-520].

 

638. AGRO 2,7-10. El profeta Ageo dice (1,1) que por su mano se ha realizado la palabra de Yahvéh "en el año segundo del rey Darlo I", a saber, el año 520; y, habiendo exhortado a la edificación del segundo templo de Jerusalén ve la gloria futura que tendrá este templo: y dice el Señor: C.2,6... estará en medio de vosotros mi espíritu; no temáis.

 

* Versículo 7. Porque así dice Yahvéh Sebaot: de aquí a poco haré aún temblar los cielos y la tierra, los mares y lo seco.

 

* Versículo 8. Y haré temblar a las gentes todas, y vendrá el Deseado de todas las gentes [TM y texto de los LXX: "y vendrán las preciosidades (lo precioso, lo anhelado, el deseo) de todas las gentes"; lo cual se entiende de un modo más adecuado no solo de los metales preciosos que se van a traer sino de otros deseos mejores de las gentes, a saber, del deseo del' Salvador y de los bienes mesiánicos que se anhelan], y enchiré de gloria esta casa, dice Yahvéh Sebaot...

 

* Versículo 10. La gloria de esta postrera casa será mas grande que la de la primera, dice Yahvéh Sebaot, y en este lugar daré yo la paz [bien mesiánico], dice Yahvéh Sebaot [todo esto se refiere a la llegada del Mesías cuando esté levantado el segundo templo de Jerusalén...].

 

639. PROFECÍAS DE ZACARÍAS. El profeta Zacarías realizó su misión a partir del año segundo del rey Darío I (Zacarías 1,1).

 

* En la visión de la futura gloria de Jerusalén (2,1­13) ve las dimensiones de esta ciudad que no tendrá murallas (V.1-5):

 

* Versículo 4. ...sin murallas será habitada Jerusalén; tal será en ella la muchedumbre de hombres y de animales. Hace mención el Señor a una dispersión del pueblo (V.6-9), sin embargo los consuela con su llegada:

 

* Versículo 10. Jubila y regocíjate, hija de Sión, porque llegaré y habitaré en medio de tí, dice Yahvéh. Y les anuncia la futura conversión de los gentiles que formarán también el pueblo del Señor.

 

* Versículo 11. Aquél día se unirán a Yahvéh muchas gentes que serán mi pueblo, y yo habitaré en medio de ti, y sabrás que Yahvéh Sebaot me ha enviado a ti.

 

* Versículo 12. Yahvéh poseerá a Judá, su heredad, en la tierra santa, y será Jerusalém su elegida...

 

* En la visión de Josué sumo sacerdote (3,1-10) dice el Señor:

 

* Versículo 8... He aquí que yo hago venir a mi siervo Oriente [TM. "Germen"; lo cual se refiere 6 bien al Mesías, puesto que en los versículos siguientes se habla de una abundancia y prosperidad especiales, 6 bien al menos se refiere a Zorobabel figura del Mesías]...

 

* En la visión de la coronación del sumo sacerdote Josué, hijo de Jeosadác (6,9-15)...,

 

* Versículo 12. Así habla Yahvéh Sebaot, diciendo: he aquí que el varón cuyo nombre es oriente [TM. "Germen", y del cual surgirá [TM: "y del cual se producirá germinación"] y edificará el templo de Yahvéh [puede entenderse del templo material que iba a ser construido por Zorobabel, o bien del templo espiritual del cual aquél era el símbolo, el cual templo espiritual iba a ser edificado por el Mesías].

 

* Versículo 13. Y el mismo elegirá el templo al Señor, se revestirá de majestad, se sentará y dominará en su trono...

 

* En la descripción del futuro reino mesiánico (C.9­14), después de presentar, a manera de una victoria universal, vencidos a los pueblos vecinos enemigos de Israel: entonces dice el profeta:

 

* Capítulo 9, Versículo 9. Alégrate con alegría grande, hija de Sión. Salta de júbilo, hija de Jerusalén. Mira que viene a ti tu rey. Justo y Salvador, humilde, montado en un asno, en un pollino hijo de asna [un rey en verdad obrador de la paz; véase S.Mateo 21,5; S.Juan 12,15]. Y propone a todos la paz en el reino universal del siguiente modo:

 

* Versículo 10 ... y promulgará a las gentes la paz, y será de mar a mar su señorío y desde el río hasta los confines de la tierra.

 

640. Haciendo alusión en el resto de la profecía a los últimos tiempos, presenta el profeta la protección del Señor sobre Jerusalén (12,1-8); y prosigue el Señor:

 

* Capítulo 12, Versículo 9 aquél día me pondré yo a destruir a todas las gentes que viniere contra Jerusalén: y se menciona el espíritu de la gracia difundida sobre Jerusalén de forma que miren al Señor mismo "al que crucificaron":

 

* Versículo 10 y derramaré sobre la casa de David, y sobre los moradores de Jerusalén, un espíritu de gracia y de oración, y alzarán sus ojos [en hebreo mirarán con admiración y reverencia... ] a mí; y a aquél a quien traspasaron [el cumplimiento de esta profecía se refiere a los últimos tiempos, sin embargo ya se sigue de ella que los habitantes de Jerusalén traspasaron al Señor; lo cual también S.Juan 19,37 lo aplica a la muerte de Jesús Nazareno, el cual fue traspasado por la lanza. El mismo S.Juan en Apoc. 1,7 hacía alusión a este texto (Zacarías 12,10ss) cuando habla del Señor que vendrá "en las nubes le verá y le verán todos los ojos (por tanto todas las gentes del reino universal) y los que le atormentaron (a saber, los habitantes de Jerusalén que mataron al Señor); y se lamentarán a causa de El todas las tribus de la tierra": lo cual también se dice en Zacarías en los versículos siguientes]: le llorarán como se llora al unigénito, y se lamentarán por El como se lamenta por el primogénito... Sigue la descripción de este llanto por familias [esta conversión del pueblo de Israel todavía no se ha cumplido, según está claro].

 

* Capítulo 13, Versículo 1 Aquél día habrá una fuente abierta para la casa de David y para los habitantes de Jerusalén, para la purificación del pecado y de la inmundicia. Y no habrá idolatría ni pseudoprofetas en la tierra (V.2-6).

 

También se menciona algún pastor

 

* Versículo 7 :...hiere al pastor, y que se disperse el rebaño [lo cual debe entenderse según el texto de S.Mateo 26,31 al menos simbólicamente y en sentido típico acerca de Jesucristo].

 

641. MALAQUIAS 1,11. SOBRE EL SACRIFICIO PURO QUE SE HA DE OFRECER EN TODAS PARTES. Malaquías fue profeta en los tiempos de Esdras y Nehemías. En la primera parte de su profecía una vez presentados los pecados de los sacerdotes que menosprecian el nombre del Señor y ofrecen el pan inmundo y las víctimas devaluadas

(1,6-9), dice el Señor:

 

* Capítulo 1, Versículo 10. ¡Oh si alguno de vosotros cerrara las puertas y no encendierais en vano el fuego de mi altar! [en vano; esto es, sería mejor si cerrarais las puertas y no ofrecierais nada]. No tengo en vosotros complacencia alguna, dice Yahvéh Sebaot; no me son gratas las ofrendas de vuestras manos [y propone un nuevo sacrificio que ha de ser ofrecido en todas las partes de la tierra, en vez de los sacrificios anteriores]:

 

* Versículo 11. Porque desde el orto del sol hasta el ocaso es grande [versión de los LXX: es glorificado con dignidad] mi nombre entre las gentes y en todo lugar se ofrece a mi nombre un sacrificio humeante y una oblación [TM. minhah, sacrificio incruento] pura [luego aquí se entiende sacrificio propiamente tardo, tanto en base a los vocablos empleados, como por la oposición que se señala respecto a los sacrificios que deben ser rechazados de los sacerdotes hebreos; por lo cual el sacrificio futuro debe ser mucho más excelso que los sacrificios de los hebreos; y no puede entenderse en sentido metafórico v.gr. de un sacrifico de alabanza, de oraciones... puesto que también los Hebreos tenían tales sacrificios), pues grande es mi nombre entre las gentes dice Yahvéh Sebaot.

 

Este sacrificio (incruento), el cual es ofrecido en todas las partes de la tierra y con el cual se le honra a Dios en el grado máximo, no puede ser otro que el sacrificio de los católicos, el cual lo instituyó Jesús Nazareno en la última cena (Sateo 26,26-28; S.Marcos 14,22s; S.Lucas 22,19s), y ordenó a sus discípulos que lo hicieran en memoria suya (1 Cor. 11,24-26).

 

642. ACERCA DEL PRECURSOR DEL MESÍAS. En la segunda parte habla el profeta del juicio y del castigo de los pecados. Y con este fin presenta a Dios hablando: Malaquías 3,1 pues qué aquí que yo [el Señor] voy a enviar a mi mensajero [véase Isaías 40,3], que preparará el camino delante de mí [Jesús Nazareno interpretó éstas palabras acerca de Juan el Bautista, su precursor; véase S.Mateo 11,10] y luego enseguida vendrá a su templo el Señor [TM. "ha'adon", el (por antonomasia) Señor; luego también Dios] a quien buscáis [ya que preguntáis (2,17): ¿dónde está el Dios justo?] y el ángel de la alianza [a saber, aquél que es enviado (esto pertenece también a la noción y a la visión del ángel) para instaurar la alianza] que deseáis. Ved que viene, dice Yahvéh Sebaot.

 

En los siguientes versículos se describe la obra purificadora mediante este Ángel de la alianza; y por último al final de la profecía de nuevo se vuelve a hablar de la llegada del precursor:

 

Malaquías 4,5 Ved que yo mandaré a Ellas, el profeta, antes de que venga el día de Yahvéh, grande y terrible.

 

* Versículo 6. El convertirá el corazón de los padres a los hijos y el corazón de los hijos a los padres... [lo cual Jesús Nazareno lo interpretó acerca de Juan el Bautista (S.Mateo 11,14; 17,11-13); puesto que también Juan el Bautista -según se había dicho ­"convertirá a muchos hijos de Israel a Dios el Señor de ellos; y Juan el Bautista irá delante del Mesías en el espíritu y en el poder de Ellas: a fin de convertir los corazones de los padres a los hijos y a fin de convertir a los incrédulos a la prudencia de los justos, para preparar al Señor un pueblo perfecto" (S.Lucas 1,16s). De donde se muestra a Juan el Bautista como la figura de Ellas que ha de venir al final de los tiempos.

 

643. Ahora bien, en virtud de las anteriores profecías será ya fácil el entretejer el orden de éstas siguiendo el curso cronológico de la vida del Mesías y el hacer una psinosis de otras propiedades que le convienen al Mesías mismo.

 

644. 2) Todas estas profecías se refieren a una sola persona determinada. Esto es forman una gran profecía acerca del Mesías, como de una persona individual y concreta, por consiguiente no en líneas generales acerca de alguna esperanza vaga y confusa de un estado mejor respecto al pueblo de Israel. Consta así:

 

a) porque aquéllos detalles tan particulares y minuciosos que hemos expuesto acerca del Mesías en las profecías anteriores, muchas veces designan a una persona concretísima de una forma más clara que la luz del sol.

b) la persuasión totalmente firme de los judíos en tiempo de Jesús, según aparece en los evangelios demuestra esto mismo: así esperaban a aquél de quien escribió Moisés en la Ley y los profetas (S . Juan 1, 45), y al Mesías que permanece para siempre (S.Juan 12,34); y Jesús recurrió, sin que se le opusieran los judíos 03 al testimonio de las Escrituras acerca de su persona 13 singular y concreta (S.Juan 5,39; S.Lucas 18,31; 5 24,27.44), esto es acerca de Sí mismo; en efecto el 13 Señor había levantado un cuerno de salvación en la casa de David, su siervo, como había prometido por la boca de sus santos profetas desde antiguo (S.Lucas 1,70).

c) Y los samaritanos pensaban lo mismo, ya que esperaban al Mesías para que los adoctrinara (S.Juan 4,25).

d) Esto puede confirmarse de un modo totalmente claro por el análisis de los documentos que testifican la misma persuasión de los judíos, después de la vida terrena de Jesús: así v.gr. lo vemos en los Hechos de los Apóstoles y en las epístolas de San Pablo; y también se indica esto en el Talmud y en Maimóides.

 

645. 3) CONSTA ACERCA DE LA VERDAD HISTÓRICA, DE LA VERDAD FILOSÓFICA Y DE LA VERDAD RELATIVA DE ESTAS PROFECÍAS.

 

Acerca de la verdad histórica consta por la historicidad que ya henos probado (o que probaremos) de los libros del Nuevo y del Antiguo Testamento, tanto respecto a la revelación histórica de las profecías como respecto al cumplimiento histórico de las mismas.

 

Acerca de la verdad filosófica de estas profecías consta:

 

a) porque las predicciones se refieren a sucesos futuros libres o bien libres decretos de Dios que se refieren a hechos futuros:

b) y consta también porque con las palabras con las que se predicen los hechos no se expresan simples deseos de los contemporáneos: en efecto esto se dice sin prueba alguna y de un modo inadecuado, cuando se trata de hechos concretos y a primera vista indiferentes, como es por ejemplo cuando se trata del lugar y del tiempo del nacimiento del Mesías o de otros detalles minuciosos -o cuando se trata del Mesías que llamará a todas las gentes a su reino -o de la desolación y devastación del templo y de la ciudad -o si se presenta la pasión la muerte violenta del Mesías;

c) éstas predicciones no son simples conjeturas que se han cumplido fortuitamente ya que se predicen muchos datos y muy minuciosos.

 

Luego las profecías fueron hechas en virtud de una ciencia comunicada a los profetas por Dios y cumplen todos los requisitos que se exigen para una verdadera profecía.

 

Acerca de la verdad relativa de estas profecías, esto es el que estas profecías van dirigidas a sellar la legación y el testimonio de Jesús, consta no solo por los profetas mismos que las predicen, sino también por Jesús mismo que apela a las profecías que se han dado acerca de El. (S.Juan 5,39; S.Mateo 11,4; S.Lucas, 4,17-21; 18,31; 24,27.44), como que manifiestan el testimonio de su misión. Y no se ve ninguna razón (considerando la persona de Jesús y su modo de obrar, el fin que pretende y los frutos que se derivaron) para sospechar el que Dios no apruebe la conexión entre estas profecías y la misión y el testimonio de Jesús.

 

Luego las profecías del Antiguo Testamento, las cuales se han cumplido, prueban la legación divina y el testimonio de Jesús Nazareno.

 

646. OBJECIONES.

 

1. Algunas de las profecías mesiánicas no se cumplieron, v.gr. la paz y justicia perfectas (Salmo 71,2.7.12-14; Isaías 11,6-9...).

 

Respuesta: 1) Las profecías mesiánicas hacen referencia a la economía íntegra hasta que llegue la Gloria final de Jesucristo' (véase, Daniel 7,13s; 12,1-3; Joel 3,14ss): luego algunas profecías todavía no completas pueden o podrán cumplirse y completarse.

2) Muchas cosas pueden predecirse mediante alegorías y símbolos, y algunas no raras veces de una forma hiperbólica, y de hecho se predicen; puesto que la inspiración profética se acomoda a la naturaleza del profeta y a la naturaleza de aquéllos en cuyo favor se dan las profecías. Luego la paz prometida debe entenderse principalmente de un modo espiritual.

 

2. En las profecías mesiánicas se promete el restablecimiento del reino de Israel, juntamente con una prosperidad temporal (Isaías, 11,12: "alzará su estandarte en las naciones, y reunirá a los dispersos de Israel, y juntará a los dispersos de Judá de los cuatro confines de la tierra"; Amos 9,12: "... para que conquisten los restos de Edom y los de todas las naciones...";

 

* Versículo 15: "los plantaré en su tierra y no serán ya mas arrancados de la tierra que yo les he dado").

 

Respuesta: 1) Aunque algunas profecías parezca que se refieren a bienes materiales que se prometen, sin embargo el conjunto de las profecías trata de una forma clara y abundante de la salvación de un modo primordial espiritual y universal que va a ser aportada a todas las gentes, la cual salvación de naturaleza espiritual y universal debe prevalecer absolutamente sobre otros bienes materiales y nacionales. Además concierne al Reino de Cristo, al menos por una cierta exigencia, la felicidad temporal por razón del orden espiritual que se debe promover en la sociedad y en los individuos.

2) Las profecías de los bienes temporales a veces se exponen de diversas formas. Hay quienes quieren explicarlas en sentido espiritual; otros en cambio en sentido temporal, de tal manera que con la llegada de Jesucristo adquieran de una forma sucesiva un significado espiritual; por último otros prefieren exponer las profecías en sentido temporal, acerca de los bienes temporales prometidos, pero de un modo condicionado, e independencia del cumplimiento de la ley y de la alianza por parte de los judíos, la cual condición ciertamente no se cumplió.

-De estas soluciones habrá que preferir y emplear aquéllas que se adapten más a cada uno de los textos.

3) Por lo que concierne a los textos presentados en la objeción hay que advertir que a estos textos pueden proponerse el sentido espiritual; y principalmente véase,,Hech.Apóst. 15,15s (por lo que se refiere a Amos 9,11s), y Rom. 11,25s (por lo que hace referencia a la vuelta a reunirse los dispersos de Judá, "ya que el endurecimiento vino a una parte a Israel, hasta que entrase la plenitud de las naciones; y entonces todo Israel será salvo...").

 

4. Las dificultades que provienen en general del estilo profético dependen sobre todo:

a) del hecho de que los profetas como que colocan muchas veces sin perspectiva en el mismo plano sucesos distantes en el tiempo; por tanto "la óptica profética no es como la óptica histórica";

b) los profetas conocen y expresan solamente fragmentos o líneas no la imagen total y la figura íntegra, la cual queda plenamente aclarada solamente al fin;

c) y esto sucede no raras veces bajo las imágenes y los símbolos;.

d) y bajo fórmulas hechas que nosotros no conocemos bien;

e) hay que añadir que los profetas hablan en un medio histórico concreto, el cual igualmente nos ha resultado o desconocido o no lo suficientemente claro...

 


[1] De forma semejante, entre las profecías conexionadas con la obra de Jesús Nazareno puede considerarse la profecía hecha por la Madre de Nuestro Señor, María, en su cántico del Magnificat (S.Lucas 1,48): "...me llamarán bienaventurada todas las generaciones", lo cual vemos que se cumple constantemente a través de los siglos, y nos muestra que es grato a Dios el culto tributado a la Santísima Virgen María; el cumplimiento de esta profecía está en verdad íntimamente conexionado con la verdad de la obra y del testimonio de Jesús Nazareno.

[2] Las palabras te arrastrarás sobre tu pecho y comerás el polvo son un modo de hablar de los orientales, en orden a dar a entender una humillación muy profunda: véase Salmos 71,9; Isaías 49,22; Miqueas 7,17.

[3] Balaam obró entonces como verdadero profeta, puesto se cumplió lo que predijo, y la tradición judía y también la cristiana la consideran como profeta. Parece que reconoció al verdadero Dios, sin embargo se dejó atraer por el premio de la iniquidad, el dinero que le habían propuesto; por ello marchaba con la mala intención de maldecir, hasta que fue reducido (Números 22,7s; 2 S.Pedro 2,15s); después quiso perder a Israel con la idolatría y la fornicación (Números 31,26; Judas,ll).

[4] Según las Respuestas de la Comisión Bíblica no puede negarse en concreto el origen davídico de este Salmo y de otros: 15, 17, 31, 68, 109 (véase D.2133).

[5] Además según el Decreto de la Comisión Bíblica, aprobado el 1 de julio de 1933, no está permitido interpretar el Salmo 15,10s de tal manera como si el autor sagrado no hubiera hablado de la Resurrección del Señor; véase, D.2272).

[6] Puede también añadirse esta semejanza: así como Melquisedec bendijo como superior a Abraham y a sus sucesores, los sacerdotes de Leví; así también el sacerdocio de Cristo sobresale sobre el sacerdocio levítico aaronítico.

[7] Pio VI el año 1779 condenó la opinión de que ésta profecía del origen divino del Emmanuel de una virgen no era mesiánica.

[8] y que Israel no será congregado (y que ¿Israel no quiere ser congregado? o, cuasi interrogando ó admirándose: porque el que puede hacerse lo contrario, a saber, que Israel no será congregado?: o leyendo   ګٵ el mismo en vez de کא no: Israel mismo será congregado. Por eso.

[9] En este capítulo se ve con toda evidencia que el siervo de Yahvéh no es una mera idealización, puesto que de él se predicen cosas totalmente reales; y que tampoco es el pueblo de Israel, según pretenden algunos no católicos; en efecto la inocencia que de él se pregona públicamente (V.6) y la expiación de los pecados de las gentes, expiación llevada a cabo por él, todo esto no puede aplicarse al pueblo de Israel; el cual además se contradistingue de éste siervo: C.49,5; 50,10; 53,8. -Igualmente el siervo de Yahvéh no puede ser el conjunto de los buenos israelitas, porque también éstos, y de un modo especial ellos son el pueblo de Israel y el siervo de Yahvéh se contradistingue del pueblo de Israel; más aún se contradistingue claramente también de éstos fieles (50,10). Además para estos fieles la predicación profética anunciada de antemano, bienes, no la expiación de los pecados. Por ello el siervo de Yahvéh, dejando a parte también otras ficciones que no tienen fundamento alguno, es solamente una persona real: el Mesías. Así lo han entendido los Santos Padres según la tradición recibida y atendiendo a las palabras del Nuevo Testamento S.Mateo 12,17; S.Lucas 22,,37; 1 S. Pedro 2,,21-25); y así lo han entendido todos los católicos, y también los antiguos judíos. Por tanto solamente en Jesús Nazareno, el cual se prueba por otra parte que también es el Mesias vemos que se ha cumplido exactamente todo lo anteriormente predicho.