31 Marzo


 

 

San Miguel Pro


Miguel Pro, mártir jesuita, mexicano (Año 1927).
El Padre Pro es un santo del siglo veinte. Murió en 1927, y fue beatificado por el Santo Padre Juan Pablo II en 1988.-


Nació en Guadalupe, México, el 13 de enero de 1891. Siendo muy niño se intoxicó al comer unas frutas pasadas y estuvo al borde de la muerte. La mamá lo llevó ante la imagen de la Sma. Virgen y lo encomendó con toda su fe, y el niño curó prodigiosamente.-



De jovencito es sumamente inquieto. Muy alegre, trabajador y optimista, pero pone toda la casa en revolución. Un día oye que la mamacita llena de angustia exclama: "Oh Dios mío: convierta a este hijo mío". Y el joven que amaba inmensamente a la buena mamá, le da un abrazo y le dice: "Mamá: mi segundo nombre es Agustín, y San Agustín fue un gran convertido. Ya verás que yo también me voy a convertir".-



A los veinte años siente un gran vacío: necesita de alguien que lo dirija espiritualmente. Se da cuenta de que él sólo no logrará atinar con el camino de la perfección y de la santidad. Afortunadamente un Padre jesuita lo invita a una convivencia de tres días, y allí encuentra paz y luces espirituales.-



Desde su encuentro con los padres jesuitas, Miguel ha cambiado totalmente. Ahora ya es más meditador y menos superficial. Su hermana se va de religiosa y él siente también un gran dese o de entrar a una comunidad. Los jesuitas lo aceptan para su noviciado o año de preparación para entrar en la congregación. –



En 1911 se va al noviciado de los jesuitas. Para su alma tan inquieta, aquella quietud y seriedad del noviciado se le vuelve supremamente dura. El Padre Maestro de novicios lo invita a resistir siquiera por seis meses, y entonces Miguel, que todo lo que hace lo hace con toda su alma, se dedica de lleno a la oración, a la meditación y a las buenas lecturas y llega a ser un novicio muy alegre y simpático, pero también muy piadoso y cumplidor de sus deberes.-



En 1913 hace sus votos o juramentos de pobreza, castidad y obediencia y queda admitido como jesuita .Ese año estalla una revolución en México y el papá de Agustín pierde sus bienes que pasan a manos de los guerrilleros. El noviciado jesuita es invadido y los religiosos tienen que salir huyendo disfrazados.-



Miguel viaja disfrazado de charro y por entre maizales y montes logra llegar a Guadalajara. Los superiores viendo el peligro que corren los jóvenes novicios los envían a Estados Unidos a seguir sus estudios. Pero el no saber inglés les trae muchas molestias y entonces lo envían a España, país neutral durante la primera guerra mundial (1914 - 1918).-



Los jesuitas lo envían a Bélgica para que vea cómo trabajan los sacerdotes con los obreros, y luego a París para que conozca los apostolados sociales de la Iglesia. Así se va encariñando más y más con el apostolado entre los más pobres.-



Es ordenado sacerdote en 1925, y enviado otra vez a su patria México, donde la persecución a la Iglesia Católica es espantosa. El presidente Calles ha jurado acabar con la religión católica y prohibe toda actividad en favor de la religión



El Padre Pro va por las casas celebrando la eucaristía, disfrazado de vendedor o de médico, etc. Viaja en bicicleta como un mensajero y organiza un grupo de 400 catequistas para enseñar la religión. Los policías son diez mil pero no lo logran capturar.-



En plena persecución dicta en ciudad de México una tanda de retiros por tres días a un gran número de sirvientas y ninguna cuenta a la policía que ese es el famoso Padre Pro. Disfrazado de mecánico va a los garajes y talleres a dar conferencias de religión a los obreros, y vestido a la última moda llega a las casas de los ricos a dictar conferencias de religión a las señoras ricas allí reunidas.-



Sus grandes devociones son la Eucaristía, el Espíritu Santo y la Sma. Virgen. Respecto al Espíritu Santo exclama: "Yo por mi poca instrucción debería decir negro y digo blanco en mis charlas, porque confío en el Divino Espíritu y El me ilumina siempre lo que debo decir". Y en cuanto a la Sma. Virgen sentía por Ella el afecto de un buen hijo hacia la mejor de las madres y la Madre de Dios lo libró y le salvó la vida muchísimas veces, porque los peligros eran de todos los días y a todas horas.-



Lo llevaron a la cárcel y le dictaron sentencia de muerte. Antes de ser fusilado le dijeron que expusiera su último deseo: "Quiero que me dejen unos momentos para rezar y encomendarme al Señor". Y en el momento en el que le iban a disparar extendió sus brazos en cruz y gritó: "Viva Cristo Rey". Y murió mártir por defender la santa religión católica. Era el 23 de noviembre de 1927.-



La sangre de los mártires es semilla de nuevos cristianos decían los antiguos. El Padre Pro derramó su sangre por defender la religión de Cristo y ahora en México el catolicismo es la religión de la inmensa mayoría y sigue progresando admirablemente con la bendición de Dios.




 


San Miguel Pro


Himno


Palabra del Señor ya rubricada
Es la vida del mártir, ofrecida
Como prueba fiel de que la espada
No puede ya truncar la fe vivida.-


Fuente de fe y de luz es su memoria,
Coraje para el justo en la batalla
Del bien, de la verdad, siempre victoria
Que, en vida y muerte, el justo en Cristo halla.-


Martirio es el dolor de cada día,
Si en Cristo y con amor es aceptado,
Fuego lento de amor que en la alegría
De servir al Señor es consumado.-


Concédenos, oh Padre, sin medida,
Y tú, Señor Jesús crucificado,
El fuego del Espíritu de vida
Para vivir el don que nos has dado. Amén


 


 

31 Marzo


 

 

Profeta Amós



Amós, profeta (s. VIII a.C.)
Antes de su vocación, Amós fue pastor y labrador que apacentaba sus ovejas y cultivaba cabrahígos (planta masculina de la higuera silvestre) en Tekoa, localidad de la montaña de Judá, situada a 20 Kilómetros al sur de Jerusalen.-

A pesar de su pertenencia al reino de Judá, Dios lo llamó al reino de Israel (cfr:1,1; 7,14s ) para que predicase contra la corrupción moral y religiosa de aquel país cismático que se había separado de Judá y el Templo.-

El marco en que desempeña su ministerio profético está situado junto al santuario de Betel. Desde un principio, el profeta se mostró intrépido defensor de la Ley de Dios, especialmente en su encarnizada lucha contra el culto del becerro de oro erigido en Betel.-

Perseguido por Amasías, sacerdote de aquel becerro (7, 10), el profeta murió martir, según una tradición judía. La Iglesia le conmemora en el calendario de los santos del 31 Marzo.-

Los dos primeros capítulos contienen amenazas contra los pueblos vecinos, mientras los capítulos 3 a 6 comprenden profecías contra el reino de Israel por sus extorsiones, avaricia, fraudes e idolatría.-

Los capítulos 7 a 9 presentan cinco visiones proféticas acerca del juicio de Dios sobre su pueblo y el reino mesiánico, a cuya maravillas dedica los últimos versículos, como lo hacen también Oseas, Joel, Abdías y casi todos los Profetas Mayores y Menores.-

Y la época particular de su función para hablar en nombre de de Dios, es en el reinado de Jeroboán II (783-743 a. C.). Es uno de los momentos gloriosos del pueblo de Israel consideradas las cosas desde el punto de vista humano; se vive en paz y tranquilidad, el Reino del Norte se extiende y enriquece hasta el punto que el lujo de los grandes y poderosos es un insulto para la miseria en que está el pueblo. Incluso el esplendor del culto, encubre la ausencia de una religión verdadera.-

Con un estilo sencillo y tan rudo como cabe esperar de un pastor que pasa su vida entre los animales que cuida en soledad, condena la vida corrompida de las ciudades, se indigna por las desigualdades sociales que claman al cielo como grita una injusticia y protesta por la falsa seguridad depositada por sus contemporáneos en los ritos religiosos que están vacíos porque no llevan a compromisos personales.-

Dios castigará a los poderosos -clase dirigente- de Samaría que pecan maltratando a los pequeños del pueblo. Critica las idolatrías, violencias, injusticias, disolución y universal corrupción en la que está sumido el rebaño elegido.-

Por primera vez emplea dos expresiones que luego serán utilizadas ampliamente en la literatura profética posterior. Habla del ”día de Yahwéh”, cargado de acentos terribles, para designar el momento en que Dios tomará justas decisiones reivindicativas; en medio de tinieblas, Yahwéh castigará a Israel por sus maldades, utilizando a un pueblo que en la mente del profeta Amós es Asiria.-

Otra expresión novedosa es el resto, término con el que se quiere designar a una porción de israelitas fieles al yawismo puro en quienes reposará la esperanza de una perspectiva de salvación posterior.-

Desde siempre ambicionó el hombre las riquezas para poseer, el poder para dominar a los demás y la gloria para alimentar su soberbia; esto trae como directa consecuencia el oscurecimiento y eclipse de Dios. Amós, profeta, dijo en su nombre que Él mira y valora lo de adentro.-

Cumplió con valentía el encargo dificultoso de hablar claro y sin tapujos para clarificar actitudes, aunque le llevaran a sufrir las acusaciones de Amasías, sacerdote de Betel, y la persecución de su hijo Ozías.
Otros Santos: Renovato (Renato), obispo; Joab, profets; Balbina, virgen; Benjamín, diácono; Teódulo, Anesio, Félix, Cornelia (Nélida), mártires; David, Esteban, Guillermo, Agilulfo confesores.




 


Amós


Oración

Concédenos, Señor todopoderoso, que el ejemplo del Profeta Amós nos estimule a una vida más perfecta y que cuantos celebramos su fiesta sepamos también imitar sus ejemplos. Por nuestro Señor Jesucristo, tu Hijo.-