25 DE FEBRERO

 

-San Valerio, confesor († s. VII)

-Beato Sebastián de Aparicio, ingeniero y constructor de obras públicas. Nació en Gudina, diócesis de Orense; fue criado de un gran señor de Salamanca, se embarcó para Nueva España, y después de haber pasado algún tiempo en Puebla de los Ángeles, se estableció en Méjico. No tardó en dar muestra de una gran habilidad en el arte de la construcción, dirigiendo sobre todo la vía pública que lleva de Méjico a Zacatecas. Se hizo terciario de San Francisco, sin abandonar por eso sus trabajos, que prosiguió hasta su muerte; 1600

-Santos Victorino, Víctor, Nicéforo, Claudiano, Dioscoro, Serapión y Papías, Egipto, s. III.

-Santos Donato, Justo, Herenas y otros, África, s. III.

-San Félix III papa, Roma, 492. Fue bisabuelo de San Gregorio Magno, y estaba, par tanto, emparentado con la famosa familia de los Anicios. Depuso a Pedro Mongo, patriarca herético de Alejandría, y condenó al de Constantinopla, Acacio, oue se rebeló contra la sentencia, dando lugar al primer cisma bizantino, que duró treinta y cinco años. En el dominio político. el pontificado de San Félix se vió nublado por la invasión de Teodorico y sus ostrogodos, que dio fin al efímero reino de los hérulos y de su rey Odoacro.

-San Tarasio, patriarca de Constantinopla, varón insigne por su piedad y ciencia; nos queda de él una epístola al papa Adriáno I, en la que defiende el culto de las imágenes.

-San Cesario, médico en la corte de Juliano el Apóstata y hermano de San Gregorio Nacianceno. 369.

-Santa Aldetrudis, virgen y abadesa de Maubeune. Francia, 696.

-Santa Valburga, virgen y abadesa del monasterio de Heidenheim, entre las fronteras de Franconia y Baviera. Fue una de las numerosas monjas inglesas que siguieron a San Bonifacio en su misión germana para enseñar la doctrina a los convertidos, 780.

-San Regino, obispo de Spoleto, asesinado por Constancio, emperador arriano, 455.