KARMA


Esta palabra significa el acto y constituye el dogma central del hinduismo (v.). Aparece en los medios filosóficos de las especulaciones de los textos de las Upani shads (v. VEDAS, ESCRITOS DE Los), en los s. viii-vi a. C. y este concepto, nuevo entonces, de la importancia del acto, ya sea mental o corporal, del individuo y de sus frutos, se oponía a la noción védica de las fórmulas mágicas y de los ritos védicos como medio infalible de lograr la dicha futura. El porvenir del hombre depende no de esas fórmulas védicos, no de la voluntad de un dios, no del resultado de un sacrificio mágico, sino de sus propios actos. «El que hace el bien será dichoso, el que hace el mal será desgraciado», escribe la Brihadáranyaka upanishad (4,4,5), una de las más antiguas. El k. es una fuerza invisible, sutil, que afecta al alma de la persona y que es el resultado de sus acciones; sigue cuando sus elementos corporales y psíquicos desaparecen a su muerte y determinan la condición de su nuevo nacimiento. El alma individual pasa así a través de diversas existencias bajo el aspecto humano o, a veces, de un animal, según el k. que esté «pegado» a ella; es la base de la teoría hindú de la metempsícosis (v.), en cuyo artículo de esta Enciclopedia se estudia la evolución de la noción misma del karma.
      El origen de este concepto tan importante ha dado lugar a muchas hipótesis: la noción del tiempo cíclico que introduce la existencia del hombre dentro de la periodicidad de la naturaleza, la duda de los pensadores sobre la eficacia automática y mágica de los ritos védicos, las creencias populares sobre la metempsícosis que existían en los medios primitivos de la India; se ha pensado en una influencia griega, pero no hay hechos que así lo confirmen, más bien podría decirse todo lo contrario.
      La ley del k. alcanza a todos los seres vivientes del universo, incluidos los dioses, y actúa de manera infalible. La vida actual es el resultado de la vida anterior, pero, al mismo tiempo, determina el estado en el cual uno nacerá de nuevo. Todos los acontecimientos son el fruto de un k. colectivo, conjunto de los k. individuales, y el k. hace a los hombres esclavos de esta existencia terrestre y les obliga a quedarse en la rueda de existencias, el samsára, palabra sánscrita que traduce el concepto de reencarnación o transmigración. Esta rueda no para de girar y por ello el individuo se encuentra siempre sin descanso en la corriente de la vida. Esta ley del k. es a la vez determinismo por la fatalidad del k. como producto de los actos pasados y poder autónomo y mecánico, y libertad porque el ser humano puede, sin embargo, por medio de su esfuerzo, crear un k. mejor y preparar su futura salvación.
      El Vedánta clásico de Shankara elaboró una teoría filosófica y metafísica del concepto del k.; distingue el k. que se acumula, samcita, y que causará la próxima encarnación; el k. en curso, prárabdha, que se fabrica en la vida presente del individuo, y el k. pasado, ágámin, que actúa en la existencia actual y la determina. Pura causa mecánica en su origen, el concepto del k. ha llegado a ser así una ética más flexible que genera el dharnia, la ley del universo, la norma de la conducta privada y pública.
      La solución para parar esta corriente es no actuar, lo que ha influido mucho en el modo de ser de los hindúes, ya que todo acto es fuente de sufrimiento. La solución se encuentra en la Bhagavadgitá (v.), que enseña a actuar sin buscar los frutos de la acción, a actuar sin interés para no crear un nuevo karma. Otra vía de liberación es el ascetismo y la práctica del yoga (v.), que «quema» el k. existente y permite escapar a la necesidad de renacer y lograr de este modo la liberación, nioksha, la unión con el Ser. Las escuelas visnuistas han desarrollado también el camino del amor-fe, de la bhakli; por abandono y sumisión al Señor, el cual puede responder por la gracia, prasáda, y borrar así gran parte del k. del devoto elegido por él; también una parte del k. se retribuye en paraísos o infiernos temporales y, en parte, en vidas humanas.
     
      V. t.: METEMPSÍCOSIS; ASCETICISMO I, 3; INDIA VI; BRAHMANISMO, 4.
     
     

BIBL.: L. RENOU, El Hinduismo, Buenos Aires 1960, 28-32; ]. GONDA, Les religions de l'Inde. I. Védisme et Hindouisme anclen, París 1962, 248-252,333-334; L. RENOU y J. FILLIOZAT, L'Inde classigae, 1, París 1947, 555-563; A. DEs GEORGES, La réincarnation des ámes, París 1966.

 

M. FERRER REGALES.

Cortesía de Editorial Rialp. Gran Enciclopedia Rialp, 1991