Baptistas
 

El nombre b., del griego baptizein (sumergir), designa a los grupos protestantes cuya idea esencial es el bautismo de los creyentes, rechazando el de los niños.

1. Orígenes. Respecto al origen de los b. se ha suscitado alguna discusión. Unos hablan de un parentesco espiritual con anabaptistas (v.), mennonitas (v.) y arminianos (v. ARMINIO); y otros subrayan su dependencia del movimiento inglés de noconformistas (V.), puritanos (v.) y congregacionalistas (v.). Esta última opinión es la más impuesta en la actualidad. En cuanto a los dos grupos más conspicuos del baptismo inicial (General Baptists y Particular Baptists), está probado que derivan respectivamente del congregacionalismo separatista y noseparatista, si bien los primeros recibieron influencias de los anabaptistas en algunos puntos menores. Tanto separatistas como noseparatistas eran congregacionalistas; tenían las mismas convicciones con respecto a la naturaleza y gobierno de las comunidades: creían que debían ser autónomas y basadas sólo en la confesión de la fe. Diferían en cambio en su actitud hacia el anglicanismo. Los separatistas sostenían que la «Iglesia de Inglaterra» era falsa e insistían en romper con ella de modo absoluto y sin condiciones. Los noseparatistas, de espíritu más ecuménico, deseaban mantener algún lazo de unión (cfr. W. S. Hudson, Baptists, 140).

2. Los baptistas ingleses. Uno de los primeros en seguir los principios b. fue John Smyth. Formado para ministro de la comunión anglicana, se graduó en humanidades en 1593, y en 1600 fue elegido lecturer de la ciudad de Lincoln. Perdió este puesto al convertirse en leader del movimiento noconformista fundando y dirigiendo el grupo puritano de Gainsborough (Lincolnshire). A causa de la persecución de 1608 el grupo salió de Inglaterra y se estableció en Amsterdam. En 1609 Smyth publicó sus teorías sobre el bautismo en The Character of the Beast: el bautismo de los niños es inválido; sólo es aceptable el bautismo de los creyentes. A continuación se bautizó a sí mismo y a otros 36 miembros de su congregación. Más tarde entró en contacto con los mennonitas de Holanda y se convenció de sus ideas haciéndose bautizar de nuevo y recomendando a sus seguidores la unión con ellos. Esto dividió al grupo inicial: Thomas Helwys regresó a Inglaterra con una parte y Smyth quedó en Holanda donde m. en agosto de 1612. A su muerte, el grupo que había permanecido con 61 se unió a los mennonitas. Th. Helwys llegó a Londres en 1611 ó 1612 y formó allí la primera comunidad b. Encarcelado por haber publicado peticiones de libertad religiosa, m. antes de 1616 en la prisióh real. Este primer grupo b. recibió el nombre de General Baptists por profesar las doctrinas arminianas de la universalidad de la gracia y del libre albedrío (v. ARMINIO Y ARMINIANOS). El otro grupo b. inicial (llamado Particular Baptists por su rígido calvinismo en cuanto a la predestinación) procede de una comunidad cahgregacionalista no separatista de Londres que había sido establecida en 1616 por Henry Jacob. En 1638 se separó de ella un grupo, con John Spilsbury a la cabeza, para practicar el bautismo de los creyentes. En 1640 enviaron a Ratisbona para que fuese bautizado válidamente por los mennonitas, a Richard Blount; el cual, a su regreso, rebautizó a 55 miembros, con lo que quedó constituida la primera comunidad de Particular Baptists.
Durante los años 164060 (Guerras civiles y protectorado de Cromwell) los b. experimentaron un fuerte crecimiento, especialmente los Particular b. A partir de la Restauración de los Estuardo (1660) fueron perseguidos, lo que les dio un fuerte afán proselitista que evitó su disminución. Cuando en 1689 Guillermo de Orange (v.) firmó el Acta de Tolerancia, había en Inglaterra más de 100 comunidades b. Sin embargo, con la libertad, ambos grupos cayeron en un periodo de estancamiento que duró hasta finales del s. XVIII. Entre los General b. se impuso el escepticismo y disminuyeron a causa de disputas antitrinitarias (unitarismo). Los Particular b. cayeron en un hipercalvinismo que paralizó casi por completo su actividad. De esta postración vino a sacarles la renovación teológica de Andrew Fuller que supuso «una bocanada de aire fresco en la atmósfera de hipercalvinismo que había ahogado a los Particular b.» (N. H. Maring, Baptists, 77). Este fullerismo provocó una ola de proselitismo agresivo en Inglaterra y en las misiones extranjeras por obra de William Carey y de la English Baptist Missionary Society fundada en 1792 (v. 5). Los General b., por su parte, formaron en 1770 un nuevo grupo (New Connection General Baptist Group) de teología wesleyana (v. WESLEY, JOHN; METODISMO). En 1891 ambos grupos b. se unieron formando la Baptist Union of Great Britain and Ireland. A partir de este momento creció el prestigio e influencia de los b. apoyados por el partido liberal, uno de cuyos líderes, Lloyd George, era b. A partir de la I Guerra mundial comenzó a declinar la influencia y el número de miembros de los b. ingleses.
Quizá el más famoso b. inglés de todos los tiempos haya sido Charles Haddon Spurgeon (1834-92). Después de una experiencia en una capilla metodista el 6 en. 1850, se hizo b. contra el parecer de su familia el 3 maya 1850. En la doctrina fue un calvinista moderado, y unió la predestinación con un evangelismo cordial en el mayor templo b. de Londres. Escribió muchos libros, dirigió la revista «Sword and trowel», fundó orfanatos para ambos sexos, organizó y dirigió una Escuela para pastores y administró la Colportage Association and Book Fund para ministros b. Doctrinalmente era conservador, y defendió la Biblia contra los falsos ataques de liberalismo. Políticamente era liberal, y un firme amigo del primer ministro Gladstone.

3. Los baptistas americanos. a) Periodo colonial. Roger Williams, predicador puritano inglés, llegó a Boston en 1631. Nombrado profesor de una iglesia en Salem, fue poco después expulsado de Massachusetts por sus opiniones sobre la separación de Iglesia y Estado. Entonces fundó una nueva colonia (Rhode Island), en la que se garantizó completa libertad religiosa, y fundó la ciudad de Providence. Las ideas b. que había traído de Inglaterra se acentuaron en su nueva patria, «haciéndose bautizar nuevamente por inmersión de manos de su amigo Hesekiel Hollman en 1639; luego realizó el mismo rito con éste y con sus once compañeros» (K. Algermissen, o. c. en bibl., 1116). De este modo quedó fundada la primera comunidad b. de América. Williams dejó poco después a los b. y el grupo recién fundado se mantuvo durante algunos años de modo lánguido hasta que en 1652 se reorganizó según el tipo de los General b. Éstos se desarrollaron por varias colonias de Nueva Inglaterra, teniendo como centro Rhode Island. En 1670 formaron una asociación de todas las comunidades, con reuniones anuales para estudiar y resolver los problemas comunes. Hacia finales de sigla cayeron en una decadencia de la que ya no salieron: muchas de sus iglesias se reorganizaron como Particular b. y otras desaparecieron.
Mientras tanto habían comenzado las actividades de los Particular b. Entre 1641 y 1648, John Clarke había fundado la primera comunidad en Newport (también en la colonia de Rhode Island), y desde aquí comenzaron su expansión. Ésta fue muy lenta al principio y nunca llegó a cuajar del todo en Nueva Inglaterra. Sin embargo, en las colonias centrales (Middle Colonies) experimentó un prodigioso crecimiento. En 1707 se unieron cinco grupos de Nueva Jersey, Pennsylvania y Delaware para formar la Philadelphia Baptist Association, que desarrolló una fuerte acción misionera y mantuvo cierta uniformidad doctrinal; se asentaron las disputas y se intensificó la educación. El número de comunidades creció tanto que en 1767 se hizo necesaria la creación de nuevas asociaciones: la Warren Ass. en Nueva Inglaterra y la Ketochton Ass. en Virginia, a las que siguieron poco después otras subdivisiones.
Este gran desarrollo estuvo muy influido por el fenómeno del despertar (v.) que arrojó sobre América centenares de congregacionalistas, separatistas, puritanos y noconformistas y de los cuales se nutrieron las filas de los b. En el Sur se produjo el mayor incremento: de un puñado de b. en 1740 su número creció a más de 1.300 comunidades en 1800.
b) Siglos XIX y XX. El comienzo del s. XIX presenció una disgregación motivada por el elevadísimo número de grupos existentes y acentuada por la guerra de la Independencia. En esta situación, el catalizador de unión y cooperación lo constituyeron las misiones extranjeras. Gracias a los esfuerzos de Luther Rice (v. 5) se creó en 1814 la General Convention of the Baptists cuyos principales efectos se notaron en tres campos: las misiones extranjeras y nacionales, la educación y la actividad editorial. De aquí nacieron tres sociedades: American Baptist Foreign Mission Society, American Baptist Home Mission Society y American Baptist Publication Society a las que siguieron varias sociedades educativas; todas ellas estaban compuestas por personas interesadas que pagaban una aportación anual. La adopción de este «método de la sociedad» para subvencionar las misiones y la educación tuvo una influencia muy grande y permitió el desarrollo rápido de estas actividades. En cuanto a la educación (por la que los primitivos b. americanos no habían sentido el menor interés), en el s. XVIII se habían fundado la Hoperwell Academy y la Brown University; a partir de 1820 se organizaron las escuelas dominicales y se establecieron academias y colleges en casi todos los estados; en 1825 se fundó la Newton Theological Institution en Massachusetts; los seminarios b. de Colgate y Rochester y el Seminario del Sur se establecieron antes de la Guerra Civil; hasta 1875 se fundaron otras ocho instituciones educativas; 25 más entre 1825 y 1850; 39 entre 1851-75 y 70 entre 1876-1900. Este avance educativo culminó en 1891 con la fundación de la Universidad de Chicago.
La unidad se rompió de nuevo por la controversia esclavista. En 1845, en Augusta (Georgia) los b. del Sur formaron la Southern Baptist Convention que se lanzó sobre todo a las misiones extranjeras; en lugar de adoptar el «método de las sociedades» organizó una estructura centralizada responsable de todas las misiones tanto nacionales como extranjeras. Los b. del Norte formaron en 1907 la Northern Baptist Convention (desde 1950 se llama American Baptist Convention).
Un capítulo aparte merece el estudio de la expansión de los b. entre los negros. Éstos, antes de la Guerra Civil, habían estado mezclados con los blancos en las reuniones b. Después de la guerra, en cambio, comenzaron a organizarse por su cuenta, mostrando gran tendencia a la formación de convenciones. En 1880 se unieron todos los grupos Negro b. en la National Baptist Convention of America que en 1916 se dividió en dos partes: la menor conservó el nombre y la mayor tomó el de National Baptist Convention, USA, Inc.
El s. xx ha presenciado el aumento de las divisiones, ocasionadas por controversias teológicas, de organización y antiecuménicas. En 1905 se formó la American Baptist Association por las comunidades de Oklahoma, Texas y Arkansas, descontentas de que la Northern Baptist Convention diera su nombre para movimientos ecumenistas. La controversia fundamentalismomodernismo, cuyo climax tuvo lugar entre 192025 (V. FUNDAMENTALISMO; TEOLOGÍA LIBERAL: MODERNISMO), trajo como consecuencia la separación, en 1932, de la General Association of Regular Baptist Churches y, en 1947, de la Conservative Baptist Association.

4. Situación actual. La actividad misionera de los b. ha provocado su expansión creciente por todo el mundo habiendo superado recientemente los 30 millones de adeptos distribuidos del siguiente modo:

Zona 1968 1969 Diferencia
África ... ... ... ... ... ... 471.856 487.486 15.360
Asia . ... ... ... 960.938 987.709 26.771
América Central ... ... 214.363 214.274 89
Europa .. ... ... ... ... 1.157.432 1.183.730 26.298
Norteamérica ... ... ... ... 26.603.129 27.160.091 556.862
Oriente Medio ... ... ... 1.068 1.001 67
Pacífico Sudoeste ... ... 111.873 134.886 23.013
Sudamérica ... ... ... ... 297.048 318.725 21.677
TOTAL ... ... ... ... 29.917.707 30.487.802 670.095
En cuanto a la valoración de estas cifras hay que tener en cuenta que los b. sólo admiten al bautismo a los adultos, lo que hace suponer que en su gran mayoría deben considerarse más o menos practicantes; esto hace que su influencia (relativa al número de miembros) sea mayor que la de otras confesiones.
En cuanto a la actividad ecuménica, aunque no hay relaciones orgánicas entre las diversas ramas b., muchas de ellas son miembros de la Baptist World Alliance organizada en 1905 y que se reúne cada 5 años. La American Baptist Convention (antes Northern B. C.) ayudó a la fundación en 1908 del National Council o f Churches o} Christ in USA; también forma parte del Consejo Mundial de las Iglesias (v. ECUMENISMO II, 2). La Southern B. C. no está afiliada al National Council ni al Consejo Mundial. Los b. ingleses están en el Consejo Mundial, pero los escoceses no.

5. Actividad misionera. William Carey fue el primer misionero b. Creció en un hogar anglicano, se adhirió a los b. a los 17 años y comenzó a asistir a las reuniones de oración y a los sermones de un noconformista. Tenía 21 años y trabajaba de zapatero ambulante cuando oyó defender el bautismo de los niños. Estudió la Biblia y quedó convencido de las doctrinas b. Recibió el «bautismo de los creyentes» el 5 oct. 1783. Ordenado predicador en ag. 1787, continuó trabajando de zapatero y predicando. Según estudiaba, iba creciendo su interés por las misiones hasta que comenzó a hablar sobre ello a la congregación b. animándola a que hiciera lo mismo que la Comunidad de Hermanos Moravos (v.). «Las misiones mundiales no nos conciernen menos que el bautismo», afirmó. En la Asociación de pastores, finalmente, le entregaron dinero para que pudiera marchar a la India y comenzar la obra misionera. Permaneció allí durante 40 años y colaboró a que la Biblia fuera traducida a más de 23 idiomas y dialectos indios. Por esos años, otros dos americanos, Adoniram Judson y Luther Rice fueron a la India como misioneros congregacionalistas. Al llegar a Calcuta entraron en contacto con W. Carey y se hicieron b. Judson pasó como misionero a Birmania, donde tuvo muy buena acogida entre las tribus Karen. Rice (v. 3, b) volvió a América para tratar de unir a los b. en los esfuerzos misioneros. En 1950 había en Asia 750.000 b. en 17 países.
En África comenzaron la actividad misionera los Negro b. de Richmond. En 1950 eran unos 300.000. En América Latina, donde empezó la misión la Southern Baptist Convention, eran, en 1950, 275.000 b.
En Europa la expansión comenzó por Alemania donde John Gerhardt Oncken organizó en Hamburgo, en 1834, la primera comunidad b. Desde Alemania y por alemanes se extendió el movimiento b. a Austria, Hungría, Rumania, Bulgaria, Suiza, Bélgica, Holanda, Dinamarca, Polonia y Rusia. Independientemente se inició en Francia, Italia y
España. En Suecia comenzó con la incorporación de dos marinos: Gustav W. Schroeder, unido en Nueva York en 1884, y Frederick O. Ni1sson, unido por Oncken en 1847. Desde Suecia se extendió a Noruega y Finlandia. En Rusia, por influencia de Oncken, se formó en 1884 la Unión Baptista Rusa y en 1908, por influencia de los b. ingleses, la Unión de Cristianos Evangélicos. Entre 191729 experimentaron un gran crecimiento llegando a alcanzar los cuatro millones y medio. Después de las persecuciones bolcheviques se redujeron a unos 500.000. Actualmente los dos grupos unidos forman la Unión de Cristianos EvangelicoBaptistas.
En Australia y Nueva Zelanda comenzaron los b. ingleses en 1831 y 1854 respectivamente. En Canadá las influencias fueron diversas: en 1763 llegó a Nueva Escocia, Ebenezer Moulton; los primeros b. que llegaron a Ontario fueron colonos fieles a Inglaterra (United Empire Loyalists) que abandonaron USA al vencer la Revolución Americana; otros grupos se fundaron por inmigrantes escoceses y misioneros de Vermont y Nueva York. En la actualidad todos los grupos están unidos en la Baptist Federation of Canada.
Los b. conservan, en general, el espíritu misionero. Algunos de los métodos que utilizan son emisoras de radio, publicaciones de todas clases, escuelas dominicales, escuelas bíblicas, televisión, universidades, seminarios, hospitales, predicación pública, misiones ambulantes, etc. Actualmente hay misiones b. en Japón, Asia Sudoriental, India, Pakistán, Oriente Medio, África, Europa, América Latina e islas del Pacífico. En 1964 había 29 organizaciones misioneras b. trabajando en más de 200 zonas con cerca de 5.000 misioneros y unos 15.000 cooperadores nativos; tenían 190 colegios y 346 hospitales.

6. Los baptistas en España. Cuando la revolución de 1868 proclamó la libertad religiosa (v. ESPAÑA VII, 8), los b. enviaron su primer misionero: William Knapp, americano, profesor de idiomas. Este predicó en Madrid desde 1870 y entró en contacto con unas 1.300 personas. El l0 ag. 1870 formó una comunidad b. dé 33 miembros. En 1873 eran 250. En 1877 Knapp regresó a América para preparar el envío de más misioneros.
Independientemente de Knapp, el sueco Henry Lund y un español llamado Preví comenzaron a trabajar en Galicia, pero Preví murió y Lund regresó a Suecia en 1881. Volvió posteriormente a Cataluña y en 1883 se organizó la primera comunidad b. en Barcelona con ocho miembros. De Suecia llegó Haglund para ayudar a Lund, y marchó a Valencia. Su primera comunidad data de 1888. Después de la guerra hispanoamericana la labor misionera se hizo más difícil, y Lund hubo de irse.
En 19201a Warld Baptist Alliance encargó a la Southern Baptist Convention reemprender con mayor organización su tarea difusora. Se consolidó la labor b. y se aceleró el crecimiento en manos de baptistas nacionales. En 1928 la Convención Baptista de España tenía 895 miembros, y casi toda la labor se financiaba desde el extranjero. Los grupos más fuertes eran autónomos. En la década de los años 30 el crecimiento fue muy pequeño, pero en los últimos años ha sido algo mayor. La Unión Evangélica Bautista Española tiene más de 60 comunidades con unos 5.400 miembros. La Federación de Iglesias Evangélicas Independientes, de las que casi todas son b., superan las 40 congregaciones con unos 3.100 miembros aproximadamente. Las Asambleas de Hermanos, que siguen los principios b., cuentan con más de 80 comunidades y 6.000 miembros.

7. Doctrina. Inicialmente, los b. se caracterizaron por un calvinismo (v.) más o menos moderado, según los grupos. Aunque no eran partidarios de formular su fe por medio de confesiones oficiales, en algún caso lo hicieron: los Particular b. en 1677 publicaron la Second London Confession y los General b., en 1678, el Orthodox Creed (que acepta los credos de los Apóstoles, Niceno y Atanasiano). Más adelante, los Particular b. formularon alguna otra confesión de fe (Londres 1688 y Filadelfia 1742), con tendencia cada vez más calvinista, llegando a la exageración. Hacia 1800 esta antigua tradición comienza a ser reemplazada por las doctrinas del renacimiento evangélico en Inglaterra y de la teología del despertar (v.) en USA. En 1900 el antiguo calvinismo había desaparecido casi por completo y dominaba el evangelismo con sus tendencias irénicas y su casi exclusiva preocupación por una religión vital despojada de una estructura teológica sólida. Más adelante se insinúa y toma cuerpo el modernismo (v.) al que los b. proporcionaron numerosos teóricos. Ante esto, la reacción del fundamentalismo (v.) provocó una fuerte controversia que no cesó hasta 1950. Actualmente están inmersos en controversias provocadas por la teología liberal (v.) y especialmente por las doctrinas de Rudolf Bultmann (v.).
Aunque no coinciden los diversos grupos, pueden seña larse algunos puntos característicos o aspectos comunes a la mayor parte de los b.:
a) Sagrada Escritura. Para ellos posee la autoridad suprema en todas las cuestiones de fe y costumbres. La Biblia fue escrita por hombres divinamente inspirados y es un perfecto tesoro de instrucción celestial, que tiene a Dios por autor y por fin la salvación (V. BIBLIA).
b) Fe. Son muy laxos en lo doctrinal. Uno de sus postulados fundamentales es la absoluta libertad de creencia y la desaprobación de toda obligatoriedad de cualquier confesión, credo o símbolo de fe, incluido el de los Apóstoles (V. FE II y III).
c) Bautismo de los creyentes. Es la convicción más característica de los b. Antes de recibirlo se precisa uri bautismo interior. «Aunque los b. admiten la imposibilidad de saber perfectamente quién ha sido elegido para formar parte del pueblo de Dios, creen que hay signos que indican a los que verdaderamente han sido regenerados. De este modo, los aspirantes deben exponer a la comunidad su experiencia de la gracia de Dios antes de entrar en la congregación. Cuando se convencen de la autenticidad de tal testimonio, `por un juicio de caridad' aprueban el acceso del aspirante al bautismo. Una vez admitido en la iglesia, acepta las obligaciones convenientes y se sujeta a la disciplina de la congregación» (N. H. Maring, o. c., 75). En cuanto al rito, aunque al principio practicaron la infusión, pronto cambiaron esta práctica por la inmersión (V. BAUTISMO III; JUSTIFICACIÓN).
d) Sacramentos. Sostienen en este punto un calvinismo más o menos acentuado: los reducen, pues, a meros actos dispuestos por Dios para representar la unión con Cristo y la inclusión en su pueblo. Para los b. la Cena del Señor es sólo un símbolo del sacrificio de Cristo en el Calvario, y durante la ceremonia no hay presencia de Cristo (V. SACRAMENTOS II; EUCARISTÍA II).
e) Eclesiología. Con Lutero (v.) y Zwinglio (v.) niegan el sacerdocio ministerial jerárquico; todos los creyentes, dicen, tienen idénticos derechos y poderes sacerdotales; los ministros (pastor y diácono) tienen responsabilidades especiales, derivadas del consentimiento de la comunidad, pero no constituyen un estado sacerdotal diferente. La congregación local es autónoma e independiente, gobernada directamente por Jesucristo y el Espíritu Santo: las comunidades pueden unirse entre sí por la recta teología y la caridad, pero no por jerarquía. Además defienden la separación IglesiaEtado; esto ha estado presente desde el nacimiento mismo de los b., como rasgos que tienen en común con los demás movimientos noconformistas surgidos a partir del s. XVII.
Algermissen afirma (ib., 1126) que «Hay que reconocer sin ningún regateo que muchísimos b. y familias b. practican un cristianismo serio y escrupuloso... Sin embargo, es lamentable que el movimiento b. prive de la gracia del bautismo a numerosos niños que mueren jóvenes y que, con su doctrina de la experiencia previa de la salvación mantenga alejados del bautismo a algunos jóvenes mayores... El baptismo pretende llegar a la unidad cristiana mediante la renuncia a todos los símbolos de la fe y a todos los escritos confesionales; es un método completamente equivocado, como lo demuestra su propia historia».

8. Organización y culto. La autoridad fundamental en la vida de los baptistas, después de Cristo, es la comunidad local, la cual admite y excluye miembros, llama y ordena los pastores y organiza su vida común de acuerdo con lo que cree ser el deseo de Jesucristo. Las congregaciones locales suelen estar unidas en organismos superiores a los cuales envían sus delegados. Se insiste en que estos organismos no tienen control o autoridad alguna sobre la congregación local; existen para impulsar los intereses comunes misioneros, educativos, filantrópicos, etc de las congregaciones locales.
El patrón de la organización de la comunidad local ha sufrido cambios durante el s. XX. Tradicionalmente el pastor era el leader y moderador de la congregación. Más recientemente se ha impuesto la tendencia a considerarlo como un gerente de la congregación y a elegir un moderador laico para actuar en su lugar en los debates o reuniones. Tradicionalmente, las funciones del diácono eran ayudar al pastor y servir como agente para ejecutar los deseos de la comunidad en asuntos tanto temporales como espirituales; más recientemente existe la tendencia a multiplicar el número de oficiales eclesiásticos para la formación de departamentos de administración, educación, misiones, etc. Tradicionalmente las decisiones se tomaban en una reunión general. últimamente, estas reuniones generales han empezado a hacerse cada vez menos frecuentes y se tiende a delegar las decisiones a los departamentos.
Los servicios religiosos de los primitivos b. eran muy simples; consistían en canciones comunitarias, oraciones, una lectura de la S. E. y un sermón. Se prohibieron los adornos y símbolos tales como velas, crucifijos, imágenes, vidrieras e instrumentos musicales y no se observaban las fiestas de Navidad y Pascua. Hoy día, las cosas permanecen sustancialmente igual; el culto se centra sobre todo en la exposición de la S. E. por medio del sermón, se practica la oración callada o meditación y a continuación se exponen las experiencias habidas en ella; todo esto acompañado del canto de himnos. La comunión suele ser una práctica mensual.

9. Grupos derivados. Aparte de las divisiones ya mencionadas, del tronco b. se separaron otras ramas para constituir grupos que, al menos en parte, deben considerarse al margen de los b.
Discípulos de Cristo (v.). Fundados por el párroco presbiteriano irlandés Thomas Campbell hacia 1830; de doctrina más arminiana que calvinista, con deseos ecuménicos y fuerte conciencia misionera.
Iglesias de Cristo. En 1859 se separaron de los anteriores conservando el mismo nombre, pero con doctrina más calvinista y organización más congregacionalista. En 1906 se constituyeron en comunidad propia tomando el nombre de Iglesias de Cristo. Llevaron hasta el extremo el principio de la autonomía de la iglesia local. A finales de 1954 eran 1,5 millones de miembros adultos y 15.000 comunidades.
Aparte de los dos mencionados hay numerosos grupos b. independientes, aunque poco importantes ya que ninguno supera los 200.000 miembros. Sin embargo, algunos son interesantes desde el punto de vista confesionológico. «Demuestran con especial claridad que cualquier movimiento protestante que rechace al cristianismo en cuanto Iglesia, caerá en una desmembración cada vez mayor, a pesar de haberse propuesto como objetivo el superar la división del cristianismo. En los últimos tiempos se ha llegado a una mayor unificación en el campo del baptismo. Pero esto se debe a las pocas exigencias que se hacen en el aspecto confesional. No se requiere confesión fija; lo único que reúne a todos es el bautismo de los adultos por inmersión y la lectura de la Biblia» (K. Algermissen, o. c., 1121).
Dunkers. También llamados Tunkers o GermanBaptists. Fundados en 1708 en Alemania por Alexander Mack, entre 171729 emigraron a Pennsylvania, donde se propagaron entre la población de origen alemán de USA y Canadá. Reciben el bautismo por inmersión estando de rodillas y no de pie como en el resto de los b. Además del bautismo y la cena practican el lavatorio de los pies y la unción con óleo; rechazan el juramento y el servicio militar; enseñan la apocatástasis (v.) al estilo de Orígenes (salvación y glorificación de todos los seres espirituales al final de los tiempos). En la actualidad su rama más importante es la Brethren Church (o Progressive Dunkers) la cual se dividió en 1939 en dos grupos: el GraceGruppe, estrictamente calvinistas, con más de 20.000 miembros, y el AshlandGruppe, de tendencia arminiana, con cerca de 20.000 miembros.
1Veobaptistas. Fundados en 1830 por el párroco suizo Samuel H. Fr5hlich, inspirándose en los b. En 1850 llegaron a América (Illinois) donde han recibido el nombre de Apostolic Christian Church o Nazarenos (v. APOSTÓLICAS, SECTAS). Admiten la unción de los enfermos y afirman la inminencia de la parusía (v.) y del reino milenario (v. MILENARISMO II).
Nazarenos húngaros. Derivados de la actividad de los neobaptistas en Hungría. Al principio fueron perseguidos, pero consiguieron tolerancia en 1895. Se extendieron por Hungría del Sur, Transilvania, Austria y USA (Ohio). Además del juramento y el servicio militar rechazan los estudios teológicos y toda forma eclesiástica externa. Actualmente son unos 25.000 miembros.
AntiMissions Baptists. Surgidos en 1813 en el ambiente rural inculto de los estados americanos del Sur. Rechazaron toda actividad misionera y toda cultura religiosa. Actualmente son unos 160.000 miembros.
Baptistas del Séptimo Día. Su origen se remonta a la segunda mitad del s. xvii. Celebran el sábado. En 1844 una mujer de este grupo, Ellen Gould Harmon (Sra. White) pasó a los adventistas (v.) llegando a fundar los adventistas del séptimo día.
Iglesia de Dios (Church of God Movement). Fundada por D. S. Warner en Indiana con la pretensión de ser un movimiento de renovación para toda la cristiandad. Presenta tendencias fuertemente relativistas a base de abolir las confesiones obligatorias y todas las diferencias confesionales.


JOSEMARÍA REVUELTA.
 

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Cortesía de Editorial Rialp. Gran Enciclopedia Rialp, 1991