BAHÍA BLANCA (Argentina)
Historia de la Iglesia
Tierra totalmente desierta y
deshabitada hasta que en 1828 el coronel Estomba levantó un fuerte,
avanzada en la línea de frontera. Con dicho trazado se ganaron
extensiones de tierra que, unidas a la explotación e inmigración,
constituyeron focos de futuras poblaciones corno Tandil, Azul, Tapalqué,
etc. Dicha región pertenecía a la diócesis de Buenos Aires, y su primer
cura, capellán del fuerte, fue el genovés, Juan Bautista Bigio. Al año
siguiente se inauguró el oratorio de N. S. de la Merced.
Agitaba a la opinión pública el problema del indio en el momento
en que el arzobispo León Aneiros asumió el gobierno de la diócesis y
emprendió la obra de las Misiones e instaló un Consejo destinado a tal
fin. En Azul y en Bragado quedaban encargados de ellas los Padres
Lazaristas, y ofreció Carhué, libre de indios desde 1877 y, en general,
las misiones de la Patagonia a los salesianos, quienes en 1880, tras
rápida y generosa aceptación, desembarcaron en Carmen de Patagones,
última avanzada de la civilización.
En 1885 los núcleos urbanos de la primitiva aldea eran de mayoría
anticlerical. Los sacerdotes vivían sujetos a burlas y, a poco de
designados, tenían que renunciar.
El mismo mons. Aneiros debió interrumpir su visita pastoral ante
vejámenes y hostilidades. Para solucionar dicho problema se ofreció la
parroquia, regentada durante 55 años por clero secular, a los
salesianos, que habían demostrado experiencia y tacto en Buenos Aires,
especialmente en La Boca. El lugar fue bien mirado por servir de paso a
las misiones del S y aceptó la tarea un valiente sacerdote, Miguel
Borghino, que luchó incansable dentro de una sociedad de licenciosas
costumbres y en la que el periodismo local presentaba la acción del
sacerdote en las formas más calumniosas. Instalado en una miserable casa
parroquial, el P. Borghino inició las obras que infundieron en aquel
ambiente el primer soplo de espiritualidad: la escuela primaria, un
colegio secundario y otro artesanal. En 1894 comenzó a construir, sobre
la vieja, la nueva iglesia parroquial, que después sería la iglesia
catedral. Bahía Blanca se convirtió entonces en un centro de irradiación
misional salesiana. Periódicamente los religiosos recorrieron toda la
zona, llegando hasta las sierras de la Ventana y Curumalal y, por el S,
hasta Río Colorado. junto a este último, se encontraba el Fortín
Mercedes, construido en 1883 para contener el paso devastador de los
malones. En 1895, el P. Pedro Bonacina construyó un colegiohogar cerca
del río. En 1897 Bahía Blanca integró la recién creída diócesis de La
Plata. El 4 en. 1913 se retiraron los salesianos de la parroquia. Mons.
Terrero encomendó nuevamente su atención al clero secular, con la
intención de fundar allí la vicaría foránea de las parroquias del S de
la provincia, lo que consiguió el 9 sept. 1918. Elevada a diócesis en
1934 (Sinus Albi) fue su primer obispo mons. Leandro Astelarra.
El seminario menor diocesano, que funcionó en la localidad de
González Chávez, fue fundado en 1936, y en 1951 fue colocada la primera
piedra del nuevo seminario. El 30 jul. 1953 fueron creadas las vicarías
foráneas de Pigué y Tres Arroyos. En 1957, fue elevada Bahía Blanca a
arquidiócesis con las siguientes diócesis sufragáneas: Comodoro
Rivadavia (Rivadaviae), 13 parroquias, 14 sacerdotes diocesanos, 36
regulares y 170.000 habitantes; Río Gallegos (Rivogallaécensis), 15
parroquias, 3 sacerdotes diocesanos, 39 regulares y 95.000 hab.; Santa
Rosa (Sanctae Rosae in Argentina) 24 parroquias, 16 sacerdotes
diocesanos, 30 regulares y 175.000 hab.; Viedma (Viedmensis), 16
parroquias, 15 sacerdotes diocesanos, 53 regulares y 290.000 hab. (datos
de 1970).
La arquidiócesis de Bahía Blanca tenía, en 1970, 51 parroquias, 54
sacerdotes diocesanos,. 87 regulares y 500.000 habitantes.
JUAN CARLOS ZURETTI.
BIBL.: V. la de ARGENTINA IV; BUENOS AIRES III.
Cortesía de Editorial Rialp. Gran Enciclopedia Rialp, 1991