HOMILIA II Domingo de Cuaresma- CICLO B

LA TRANSFIGURACION DE CRISTO

 

Para comprender la Transfiguración hay que recordar:

 1) Lo que sucedió seis días antes en Cesárea de Filipo,

 2)  Y la fiesta de los Tabernáculos o de las Tiendas

 

I.-      EN CESAREA DE FILIPO

 

El primer día de la Fiesta de la Expiación 

A)    Pedro confesó: “Tu eres el Mesías, el Hijo de Dios”.

B)    Cristo les anunció su pasión, muerte y Resurrección.

C)    Les comunicó la necesidad, para quien quisiera seguirle, de la negación de si mismo y de tomar la cruz para poder participar de la gloria de su Reino

D)    Les prometió que algunos de los allí presentes verían venir el Reino de Dios en todo su esplendor.

Estas cuatro verdades fueron confirmadas por Jesús el día de la Transfiguración.

 

II.-  LA FIESTA DE LAS TIENDAS O TABERNÁCULOS 

 

         Al terminar los seis días de la Fiesta de la Expiación se celebraba  la Fiesta de los Tabernáculos o de las Tiendas, que se había convertido en una fiesta nacionalista pues se esperaba que en ella se manifestara la realeza de Yahvé en el Mesías, Rey libertador del pueblo judío.

Jesús para evitar ser aclamado como Mesías-Rey no se quedó a celebrarla.

 

III.-  Tomó a Pedro, Santiago y a su hermano Juan, los tres discípulos predilectos  que iban a ser testigos de su agonía en Getsemaní, y subió con ellos a un monte alto, para orar. Para meditar sobre su pasión, muerte y Resurrección que iba a suceder muy pronto. La tradición señala el Monte Tabor, (monte aislado, a una legua al este de Nazaret)

 

IV.- LA TRANSFIGURACIÓN

 

          Y sucedió que mientras oraba (Luc 9,24) se transfiguró (Mat 17,2):

          El aspecto de su rostro cambió (Luc 9,29) resplandecía como el sol

       Sus vestidos se volvieron blancos como la luz (Mat 17,2), brillaban de      resplandor (Luc 9,29) relampagueantes como el fulgor de un rayo.

         “Pedro y sus compañeros se caían de sueño pero se espabilaron y

          vieron su gloria” (Luc 9,32)

         Estas descripciones del rostro y vestido, son propias del género literario apocalíptico,

         para expresar lo inexpresable: que Jesús dejó transparentar a través de su humanidad la gloria de su divinidad. (Bouyer Dicc.630-631).

 

1)     La blancura de sus vestidos (Marcos) dado que procede de la luz de Cristo no es la tonalidad de un color, es un resplandor que simboliza las realidades celestes y escatológicas; tiene el brillo de la luz (San Mateo) y el fulgor del rayo (Lucas).

 

2)     La luz que resplandeció en el rostro de Cristo, es la luz tabórica  no es el conjunto de ondas electromagnéticas que llamamos luz, es la luz de la Gloria de Dios mismo

      (2 Cor 4,6) la gloria del Padre. Dios es luz (1J 1-5).

      Esta luz Gloriosa del Padre es compartida por el Hijo y por el Espíritu Santo.

      “EL HIJO ES LUZ DE LUZ Y EL ESPÍRITU SANTO ES EL ESPLENDOR DE   ESA LUZ”.

 

3)   San Lucas dice “VIERON SU GLORIA” (Luc 9,27)

        San Juan lo explica:”HEMOS CONTEMPLADO SU GLORIA”, “GLORIA DEL UNIGÉNITO DEL PADRE”, LLENO DE GRACIA Y DE VERDAD” (J 1, 14)

4)   Dado que se trataba de la luz de la gloria divina de Cristo, su visión no pudo ser una experiencia normal sensible sino una experiencia mística.

      El Señor transformó su ser y sus ojos para que pudieran ver esa luz.

 

V.-   LA TRANSFIGURACIÓN SE EFECTUÓ MIENTRAS JESÚS ORABA (Luc 9,29)

 

En la contemplación de amor se manifestó la gloria divina.

En el Bautismo de Jesús aconteció la teofanía divina mientras Jesús oraba, es decir, mientras Jesús en alta contemplación de amor de su misión mesiánica se ofrecía al Padre con su Espíritu de infinito amor diciendo: Aquí estoy para hacer tu voluntad y fue ungido para realizar su misión mesiánica.

         En el Monte Tabor, mientras Jesús oraba en alta contemplación de amor aceptando su pasión y muerte con su Espíritu de infinito amor, la gloria divina fue transfundida en su cuerpo, en plenitud terrenal para poder realizar el ofertorio de su vida en Getsemaní llevándolo a cabo en su pasión y muerte.

 

La transfiguración no es un anticipo de la Resurrección  pues en ésta su cuerpo será transformado sino, es la presencia del Dios trinitario y de toda la historia de la salvación en su cuerpo predestinado a la cruz. En este cuerpo de Jesús queda definitivamente sellada la alianza entre Dios y la humanidad (Balthasar Homilías)

La transfiguración es prefiguración de la Resurrección.

 

VI.- ESTA MANIFESTACIÓN DE LA GLORIA DIVINA DEL HIJO DE DIOS SE EFECTUÓ PARA PROTEGER A LOS APÓSTOLES DEL ESCÁNDALO

       Que podría suscitar lo que estaba próximo a suceder:

        VI.1    Cuando vieran la agonía de Cristo en Getsemaní.

VI.2    Cuando oyeran los insultos a Cristo como seductor y blasfemo, se         acordarían de esa voz celestial que atestiguaba que él era el verdadero Hijo de Dios.

VI.3    Cuando vieran su rostro desfigurado y ensangrentado, recordarían que Él era, el mismo que ellos habían visto resplandeciente y hermoso más que el sol.

 

VII.- “DE REPENTE SE LES APARECIERON MOISÉS Y ELÍAS CONVERSANDO CON ÉL

 

1)     Ambos habían sido admitidos a ver la gloria de Dios (1Re19).

2)     Moisés, es el fundador de la Ley y de la antigua Alianza, con su aparición se manifiesta que Cristo será el autor de la Nueva Alianza.

3)     Elías, era el profeta esperado al final. Con su aparición se quiere proclamar a Jesús como la figura escatológica esperada para el fin de los tiempos,el Mesías escatológico”.

    4 Lucas, dice que hablaron con Jesús de la muerte que habría de sufrir en Jerusalén, como un éxodo, un salir de esta vida y un llegar a su gloria. Con lo cual se proclama a Jesús “Mesías espiritual sufriente”, el Siervo de Yhavé.

     Y así se enseña de acuerdo con la ley y los profetas:

QUE LA PASIÓN ES EL CAMINO DE LA RESURRECCIÓN”.

 

Pedro lleno de gozo al ver la gloria de Jesús, fuera de sí y sin saber lo que decía exclamó:

 

 

 

VIII.- “SEÑOR ¡ QUÉ BUENO ES QUE ESTEMOS AQUÍ! SI QUIERES HARÉ TRES TIENDAS UNA PARA TI, OTRA PARA MOSIÉS Y OTRA PARA ELÍAS

 

         La vivencia de la Transfiguración durante la fiesta de las Tiendas hizo que Pedro reconociera que la Transfiguración indica la llegada del tiempo mesiánico, pues una de las características de este tiempo era, que los justos morarían en las tiendas cuya figura era la fiesta de las Tiendas.

 

IX.-  LA NUBE LUMINOSA

      

       Todavía  estaba hablando cuando, “una nube luminosa” los cubrió con su sombra (Mat 17,4) y fueron llenos de temor al entrar en la nube.

1º)  La nube sagrada sobre la tienda del encuentro en el Antiguo Testamento no significa  el fenómeno meteorológico que llamamos nube, sino, es una claridad velada celestial e inaccesible que no acertamos a expresar, símbolo de la presencia de Dios, de su Gloria.

       Esto explica el miedo sagrado que sintieron ante la gloria de Dios en Cristo.

2º)  La Gloria de Dios no solo envolvió a Jesús, sino también a los tres discípulos, lo cual significa que los discípulos no son simples espectadores sino, partícipes también del acontecimiento.

 

X.-  Y UNA VOZ DESDE LA NUBE DECÍA:

 

 “ESTE ES MI HIJO, EL AMADO, EN QUIEN ME COMPLAZCO,¡ESCUCHADLE!”

 1) Este es mi Hijo

             La mejor prueba que se dio de la divinidad de Cristo durante su vida fue esta voz del Padre junto con la anterior acción del Espíritu Santo transfigurando a Cristo manifestando la luz de su gloria.

             Por eso San Pedro para demostrar que no se fundaba en fábulas fantasiosas cuando dio a conocer el poder divino de Nuestro Señor Jesucristo les adujo la Transfiguración como prueba diciendo:

             “Porque él recibió de Dios Padre honor y gloria cuando desde la sublime Gloria se le transmitió aquella voz:”Este es mi Hijo amado, en quién me he complacido. Y esta misma voz, transmitida desde el cielo, es la que nosotros oímos estando con él en la montaña sagrada” (2 Pe 1,18).

             Fijémonos bien:

Para demostrar la divinidad de Jesús, no recurrió a la Ascensión porque ésta oculta la realidad que constituye su término. Tampoco recurrió a las apariciones pascuales porque éstas únicamente pretenden mostrar la identidad del Resucitado con Jesús de Nazaret y su presencia continúa con nosotros.

         En cambio, la Transfiguración nos enseña que la vida de Jesús estaba secretamente iluminada por la luz de la Gloria divina. (Dufour)

2)   En quién me complazco

Porque Él es mi Verdad real en quién os he dado todo, y por tanto hay que escucharle y seguirle negándose a sí mismo tomando la cruz de cada día.

 

XI.- APLICACIÓNES DEL EVANGELIO A NUESTRA VIDA

 

1)     En la Transfiguración se nos presenta la prueba expresa y más importante de la divinidad de Cristo durante su vida. En esta época de confusión en que estamos inmersos, acudiremos a Él pues solo Él tiene palabras de vida eterna.

2)            La pasión y la cruz son el Camino para la Resurrección

Jesucristo siempre que habló de su muerte la refirió a su amor(muerte por amor) y a su resurrección.

La vida cristiana no empieza ni termina en la cruz.

El principio y el fin de todo es el amor de Dios en Cristo hecho efectivo en el prójimo.

“   LA CIENCIA DE CRUZ ES LA MISTICA DEL AMOR  “

3)     En esta vida podemos participar de la luz divina de Cristo

        Esto se significa por el hecho que la nube cubrió a los discípulos pues con esto se indica que ellos no son simples espectadores sino partícipes del acontecimiento

         Dios es divina luz y amor y Cristo es el sacramento de esa luz y ese amor:

a)     Por el Bautismo

Cuando el Espíritu nos da una nueva vida en Cristo tiene lugar un cambio maravilloso: Nos revestimos de la luz de Cristo y nos convertimos nosotros mismos en luz de Cristo

            

b)     La Eucaristía plenitud del bautismo

Al acrecentar nuestro amor, aumenta nuestra luz porque el fuego del amor es luz.

Al infundir Dios en nosotros el amor de Cristo sobre todas las cosas nos lleva a no apegar nuestro corazón a ninguna de las criaturas, y así el amor nos va purificando cada vez más hasta el desapego total.

A medida que nos va purificando, Dios nos va infundiendo un grado más de su Gloria, por eso San Pablo dice (2Cor 3,17):

Todos nosotros con el rostro descubierto, reflejando la Gloria del Señor, somos transfigurados según su propia imagen de gloria en gloria.

4)     Puede llegar a tanto la copiosidad de luz que reciba una persona que venga a  parecer todo luz.

        Esto se suele dar en el último estado de la vida espiritual (el matrimonio espiritual) o después de comulgar o en la contemplación de amor que son los momentos en los que se da mayor unión de amor, una unión más íntima o más intensa.

         En estos momentos se puede dar el fenómeno de la irradiación de luz del cuerpo del santo llamado luminosidad.

 

        Tenemos múltiples testimonios de esta luminosidad en los “monjes resplandecientes” y en otros muchos santos. Estos fenómenos suelen abundar en épocas de crisis del mundo y de la Iglesia.

          

         Pero como pueden darse fenómenos de luminosidad de orden natural hay que ser muy cautos a la hora de atribuirlos a causa sobrenatural.

         No se les debe dar importancia como a ningún otro fenómeno exterior extraordinario, no hay que desearlos y si se presentan deben ser apartados en cuanto sea posible, según San Juan de la Cruz.

         Lo importante es la unión de amor

 

XII.- ORACIÓN FINAL

Gracias Padre santo porque en virtud de tu Espíritu nos revelaste la luz de la gloria de tu Hijo Unigénito. Concédenos que escuchemos con fe viva las palabras de tu Hijo como palabras de vida eterna.

Alegrémonos con el gozo interior de su palabra y haz que purificados por ella podamos contemplar con mirada limpia la gloria de tus obras.

Te damos gracias también porque al darnos en la eucaristía el cuerpo glorioso de tu Hijo al ir infundiendo cada vez un grado más de su amor y nos vaya aumentando un grado más de la luz de su gloria y nos va configurando según su propia imagen, de gloria en gloria.