Gentileza de  http://www.hernandarias.edu.ar/ceiboysur/
para la BIBLIOTECA CATÓLICA DIGITAL

 

La enseñanza social de la Iglesia

Oscar Campana

 

Lamentablemente, no todos los cristianos son conscientes de la importancia que la Iglesia siempre ha dado a los problemas que plantea la realidad social, política y económica. Se dice que la Iglesia tiene una "doctrina social". ¿Pero que tiene que ver lo social con la fe?

Ante las mil formas que esta pregunta podría revestir, no estaría de más remontarnos a algunas cuestiones básicas que hacen a la relación entre Iglesia y sociedad, fe y cultura, Evangelio e historia. Estas cuestiones no son de orden sociológico sino teológico. Pero llevan necesariamente al campo de las ciencias sociales, que son aquellas que nos relatan e interpretan las cosas que acontecen.

Hay quienes identifican la "doctrina social" con los documentos que en los últimos cien años -desde León XIII a Juan Pablo II- los papas han dedicado a la cuestión social. La identificación no es errónea aunque sí insuficiente.

Es necesario decir que la Iglesia desde siempre tuvo una enseñanza referida a lo social, o mejor, lo social siempre fue parte de su mensaje. Esa enseñanza -que puede rastrearse en los mismos evangelios, que reconoce importantísimos antecedentes en el Antiguo Testamento, que ocupó las mentes y los corazones de los padres de la Iglesia y que se explayó en autores de la talla de Tomás de Aquino y Bartolomé de las Casas- se ha expresado en el último siglo en un cuerpo doctrinal más sistemático impulsado proféticamente por el magisterio de los papas.

Profundicemos en ello.

La fe y la historia

La vida de la Iglesia y de cada creyente se desenvuelve en una encrucijada: la de la historia y la de la fe. La Iglesia es, por la gracia de Dios, esa parte del acontecer humano que, en forma explícita y consciente, se abre al Reino de Dios misteriosamente presente en él.

De allí que todo lo que hace a la vida del hombre la Iglesia lo considere no como un añadido sino como algo intrínseco a su preocupación y a su misión evangelizadora.

Si hay una religión que no puede darse el "lujo" de alienarse de la historia, esa es la religión cristiana, que cotidianamente profesa la fe en un Dios que "se hizo carne y puso su carpa entre nosotros" (Jn 1, 14), compartió nuestra debilidad e hizo presente su salvación en medio de los avatares de nuestra historia. Para un cristiano, alienarse de la historia es renunciar a "medio credo".

De allí que la preocupación por lo social, lo económico y lo político no sea el "berretín" de algunos cristianos con "inclinaciones sociales". Forma parte de la misión integral de la Iglesia. Para hacer explícito esto, a lo largo de la encíclica Evangelii Nuntiandi el papa Paulo VI, cada vez que se refería a la "evangelización", agregaba: "liberación y promoción humana".

¿Por qué una "doctrina social"?

El Evangelio, que no deja a los cristianos indiferentes antes los problemas del tiempo en que les toca vivir, es quien alienta la reflexión y el compromiso. Esta reflexión y este compromiso se fueron cristalizando, a lo largo de los años, en un cúmulo de "principios de reflexión, normas de juicio y directrices de acción" (Paulo VI, Octogessima adveniens, nº 4) que hoy conocemos con el nombre de doctrina social de la Iglesia.

Es necesario destacar el carácter dinámico de esta doctrina. Ella no constituye un cuerpo cerrado de verdades por el simple hecho de ser expresión de una fe en constante diálogo con los desafíos que proceden de la realidad:

La enseñanza social de la Iglesia nació del encuentro del mensaje evangélico y sus exigencias con los problemas que surgen de la vida de la sociedad (Congregación para la doctrina de la fe, Instrucción sobre la libertad humana y la liberación "Libertatis conscientia", nº 72).

Por implicar fe e historia es que el sujeto privilegiado de la enseñanza social de la Iglesia son las propias comunidades cristianas. En sintonía con la imagen de la Iglesia como comunión de Iglesias particulares que emana del Concilio Vaticano II, Paulo VI afirma:

Incumbe a las comunidades cristianas analizar con objetividad la situación propia de su país, esclarecerla mediante la luz de la palabra inalterable del Evangelio, deducir principios de reflexión, normas de juicio y directrices de acción (...) A estas comunidades toca discernir, con la ayuda del Espíritu Santo, en comunión con los obispos responsables, en diálogo con los demás hermanos cristianos y todos los hombres de buena voluntad, las opciones y los compromisos que conviene asumir para realizar las transformaciones sociales, políticas y económicas que aparezcan necesarias con urgencia en cada caso (Carta apostólica Octogesima adveniens, nº 4).

Analizar, esclarecer, deducir, discernir, asumir, realizar... Reflexión y acción comunitarias se entrelazan dando forma a un pensamiento y a una praxis que no pretende ser una "tercera posición" entre las grandes ideologías del mundo moderno sino, más bien, una instancia de confrontación permanente con la realidad social tratando de indicar un horizonte superador de las realizaciones -y limitaciones- del acontecer humano. En 1987, Juan Pablo II lo expresó con toda claridad:

La doctrina social de la Iglesia no es, pues, una "tercera vía" entre el capitalismo liberal y el colectivismo marxista, y ni siquiera una posible alternativa a otras soluciones menos contrapuestas radicalmente, sino que tiene una categoría propia. (...) no pertenece al ámbito de la ideología, sino al de la teología y especialmente de la teología moral (Carta encíclica Sollicitudo rei socialis, nº 41).

La Iglesia y la política

Todo esto, sin embargo, puede no acallar el interrogante fundamental: ¿qué tiene que ver la Iglesia con la política? En este sentido son iluminadoras las palabras del documento de la IIIª Conferencia General del Episcopado Latinoamericano realizada en Puebla, México, en 1979:

Deben distinguirse dos conceptos de política y de compromiso político: primero, la política en su sentido más amplio que mira al bien común, tanto en lo nacional como en lo internacional. Le corresponde precisar los valores fundamentales de toda comunidad... Define también los medios y la ética de las relaciones sociales. En este sentido amplio, la política interesa a la Iglesia y, por tanto, a sus pastores, ministros de la unidad. Es una forma de dar culto al único Dios, desacralizando y a la vez consagrando el mundo a Él (LG 34) (Documento de Puebla, nº 521).

Segundo: la realización concreta de esta tarea política fundamental se hace normalmente a través de grupos de ciudadanos que se proponen conseguir y ejercer el poder político para resolver las cuestiones económicas, políticas y sociales según sus propios criterios o ideologías. En este sentido se puede hablar de "política de partido". (...) ningún partido político por más inspirado que esté en la doctrina de la Iglesia, puede arrogarse la representación de todos los fieles, ya que su programa concreto no podrá nunca tener valor absoluto para todos. La política partidista es el campo propio de los laicos (Documento de Puebla, nº 523-524).

La acción de la Iglesia es política en tanto que mira al bien común de la sociedad (primer sentido), más allá de cómo se posicionen sus miembros a la hora de las opciones -partidarias- concretas (segundo sentido).

Por eso es que puede decirse que no existe -como a veces se pregona- lo apolítico, aunque sí lo apartidario. Palabra y silencio, acción u omisión tienen, entonces, una repercusión política más allá de las intenciones explícitas de sus protagonistas.

 

Principales documentos magisteriales de la enseñanza social

Documento

Año

Autor

Rerum novarum

1891

León XIII

Quadragesimo anno

1931

Pío XI

La solennità

1941

Pío XII

Mater et magistra

1961

Juan XXIII

Pacem in terris

1963

Juan XXIII

Gaudium et spes, IIª Parte, c. III-V

1965

Concilio Vaticano II

Populorum progressio

1967

Paulo VI

Documentos Finales de Medellín,

1968

IIª Conferencia Gral. del Episc. Latinoamericano

Declaración del Episcopado Argentino

1969

Conferencia Episcopal Argentina

Octogesima adveniens

1971

Paulo VI

La justicia en el mundo

1971

Sínodo de obispos

Documento de Puebla

1979

IIIª Conferencia Gral. del Episc. Latinoamericano

Iglesia y comunidad Nacional

1981

Conferencia Episcopal Argentina

Laborem exercens

1981

Juan Pablo II

Dios, el hombre y la conciencia

1983

Conferencia Episcopal Argentina

Libertatis conscientia

1986

Congregación para la doctrina de la fe

Sollicitudo rei socialis

1987

Juan Pablo II

Centessimus annus

1991

Juan Pablo II

Subsidio bibliográfico

  1. Documentos del magisterio

    Concilio vaticano II, Gaudium et Spes, Buenos Aires, 1965.

    Conferencia episcopal argentina, Documento de San Miguel, Buenos Aires, 1969.

    , Iglesia y comunidad nacional, Buenos Aires, 1981.

    , Líneas Pastorales para la Nueva Evangelización; Buenos Aires, 1990.

    Congregación para la doctrina de la fe, Instrucción sobre algunos aspectos de la "teología de la liberación", Buenos Aires, 1984.

    , Instrucción sobre la libertad cristiana y la liberación, Buenos Aires, 1986.

    Congregación para la educación católica, Orientaciones para el estudio y enseñanza de la doctrina social de la Iglesia en la formación de los sacerdotes, Buenos Aires, 1989.

    IIª Conferencia General del episcopado latinoamericano, Documentos Finales de Medellín, Buenos Aires, 1968.

    IIIª Conferencia General del episcopado latinoamericano, Documento de Puebla, Buenos Aires, 1979.

    IVª Conferencia General del episcopado latinoamericano, Documento de Santo Domingo; Buenos Aires, 1992.

    Juan Pablo II, Centessimus Annus, Buenos Aires, 1991.

    , Laborem Exercens, Buenos Aires, 1981.

    , Sollicitudo Rei Socialis, Buenos Aires, 1988.

    , Tertio Milennio Adveniente; Buenos Aires, 1997.

    Juan XXIII, Mater et Magistra, Buenos Aires, 1961.

    , Pacem in Terris, Buenos Aires, 1963.

    León XIII, Rerum Novarum, Buenos Aires, 1991.

    Paulo VI, Octogessima Adveniens, Buenos Aires, 1971.

    , Populorum Progressio, Buenos Aires, 1967.

    Pio XI, Quadragessimo Anno, Buenos Aires, 1991.

    Pio XII, La Solennita, Buenos Aires, 1991.

     

  2. Comentarios a los documentos del magisterio

    Aubert, J.-M., La Iglesia ante el desarrollo humano, Bilbao, 1970. (Comentario a la Populorum Progressio).

    Calvez, J. Y., F. Storni, Enseñanza social. Instrumento de liberación, Buenos Aires, 1993. (Comentarios a la Sollicitudo Rei Socialis y a la Centessimus Annus).

    Cias, Laborem Exercens. Comentario del Centro de investigación y acción social, Buenos Aires, 1984.

    —, Mater et Magistra. Prólogo y comentarios del Centro de investigación y acción social, Buenos Aires, 1962.

    Gera, L., Ferrara, R. y otros, Gozo y esperanza. Aspectos fundamentales de la Constitución pastoral sobre la Iglesia en nuestro tiempo, Buenos Aires, Paulinas, 1968.

    Gutiérrez, G., "Enseñanza social y opción por los pobres", en Densidad del presente, Lima, 1996, 17-99. (Observaciones a la Laborem Exercens y a la Centessimus Annus).

     

  3. Manuales

    Aa.Vv.: Fe cristiana y realidad social, Buenos Aires, 1992.

    Alburquerque Frutos, E., La dimensión social de la caridad. Proyecto de moral social cristiana, Madrid, 1991.

    Antoncich, R., Munárriz, J. M., La doctrina social de la Iglesia, Florida, 1986.

    Aubert, J.-M., Moral social para nuestro tiempo, Barcelona, 1973.

    Biancucci, D., El reino y su justicia. La enseñanza social del Evangelio, Buenos Aires-Bahía Blanca, 1996.

    Calvez, J. Y., Fe y justicia. La dimensión social de la evangelización, Santander, 1985.

    Cuadron, A. (Coord.), Manual de la doctrina social de la Iglesia, Madrid, 1993.

    Depas-Celam, Fe cristiana y compromiso social, Buenos Aires, 1983.

    Farrell, G., Doctrina social de la Iglesia, Buenos Aires, 21982.

    Galán, C. L.; Brardinelli, R. L.; Farrel, G., Manual de Doctrina Social de la Iglesia, Buenos Aires, 1994.

    Häring, B., Libertad y fidelidad en Cristo III, Barcelona, 1987.

    Messner J., Etica Social, Política y Económica, Madrid, 1974.

     

  4. Sagrada Escritura, patrística y tradición teológica

    Aa.Vv., "Fundamentos bíblicos para una ética social cristiana", en Voces 12 (1998) 9-144 (número monográfico).

    Comp., Justicia e injusticia en la tradición cristiana antigua, Buenos Aires, 1979.

    Díaz Mateos, M., Llamados a la solidaridad. Una perspectiva bíblica, en Páginas 56-57 (1983), Separata.

    García, R. (Comp.), Dios y el César, Buenos Aires, 1978.

    —, La primera evangelización y sus lecturas. Desafíos a la nueva evangelización, Buenos Aires, 1990.

    Giaquinta, C., Todo es común, Buenos Aires, 1984.

    Gnuse, R., Comunidad y propiedad en la tradición bíblica, Estella, 1987.

    Gutiérrez, G., Dios o el oro en las Indias. Siglo XVI, Lima, 1989.

    Lona, H., Carisma y libertad. Tres estudios sobre San Pablo, Buenos Aires, 1994.

    —, Fe cristiana y realidad social. Estudios sobre el cristianismo antiguo, Buenos Aires, 1992.

    Sicre Díaz, J. L., Con los pobres de la tierra. La justicia social en los profetas, Madrid, 1980.

    Sierra Bravo, R. (Comp.), Antología completa de la doctrina social de los Padres, Madrid, 1967.

    Tomas De Aquino, Suma Teológica, Parte IIa-IIae, 57-122.

     

  5. La doctrina social de la Iglesia en América Latina

    Antoncich, R., La relevancia de la doctrina social del la Iglesia para el siglo XXI, en AA. VV., El futuro de la reflexión teológica en América Latina, Santafé de Bogotá, 1996, 167-193.

    Farrel, G., Gera, L. y otros, , la doctrina social de la Iglesia en vísperas del tercer milenio, buenos Aires, 1999.

    Hünermann, R. (Dir.), Enseñanza social de la Iglesia en América Latina, Madrid, 1991.

    Hünermann, P., Scannone, J. C. (Dir.), América Latina y la doctrina social de la Iglesia. 1: Reflexiones metodológicas, Buenos Aires, 1992.

    —, América Latina y la doctrina social de la Iglesia. 2: Identidad cultural y modernización, Buenos Aires, 1992.

    —, América Latina y la doctrina social de la Iglesia. 3: Pobreza y desarrollo integral, Buenos Aires, 1993.

    Hünermann, R. (Dir.), Enseñanza social de la Iglesia en América Latina, Madrid, 1991.

    Scannone, J. C., Teología de la liberación y doctrina social de la Iglesia, Madrid-Buenos Aires, 1987.

    Tamayo, J. J., Presente y futuro de la teología de la liberación, Madrid, 1994.

    Codina, V., Ser cristiano en América latina, Buenos Aires, Latinoamérica Libros, 1986.

     

  6. La opción por los pobres

    Azcuy, V.: "La contemplación del pobre que sufre", Proyecto 5/6, 165-183

    Boff, C., Pixley, J.: Opción por los pobres, Paulinas, Buenos Aires, 1986.

    Boff, L.: "Por lo pobres y contra la pobreza", en La fe en la periferia del mundo. El caminar de la Iglesia con los oprimidos. Sal Terrae, Santander, 1981, 193-200

    Ellacuría, I. : "Pobres", en Conceptos fundamentales de pastoral, Cristiandad, Madrid, 786-802.

    Gutiérrez, G., Pobres y opción fundamental, en Ellacuría, I.; Sobrino, J., Mysterium Liberationis..., T. I, 303-321.

    —, "Pobres y liberación en Puebla", en La fuerza histórica de los pobres, Sígueme, Salamanca, 1982, 169-211.

    Nápole, G.: La opción de la Iglesia por los pobres, Buenos Aires, 1991 (Nuevas Voces 11, Centro Nazaret).

    Sobrino, J., La Iglesia de los pobres. Concreción latinoamericana del Vaticano II. Ante el próximo Sínodo extraordinario, en Revista Latinoamericana de Teología 5 (1985) 115-146.

     

  7. Bibliografía complementaria

Aguirre, R.; Vitoria Cormezana, F. J., Justicia, en Ellacuría, I.; Sobrino, J., Mysterium Liberationis. Conceptos fundamentales de teología de la liberación, Madrid, 1990, T. II, 539-577.

Alonso, J., González Faus, J. I. y otros, Fe y justicia, Salamanca, 1981.

Arroyo, A.M., Borda, R. y otros, Apostar a la vida del pueblo, Buenos Aires, 1991. (Nuevas Voces 10, Centro Nazaret).

Barcesat, E. y otros, La ideología de la seguridad nacional, Buenos Aires, 1983.

Berger, K., Justicia, en Sacramentum Mundi, Barcelona, 1977, IV, 162-177.

Bresci, D. (Comp.), Documentos para la memoria histórica. Movimiento de Sacerdotes para el Tercer Mundo, Buenos Aires, 1994.

Campana, O., Apuntes de la cátedra, Buenos Aires, 1999.

Comblin, J., Cristianos rumbo al siglo XXI, Madrid, 1997.

—, El poder militar en América Latina, Salamanca, 1978.

De Charentenay, P., El desarrollo del hombre y de los pueblos, Santander, 1992.

Dussel, E., Ética cristiana, Florida, 1987.

Equipo De Reflexión Del Centro Nazaret, Crepúsculos y amaneceres. Un nuevo modo de pensar para una nueva realidad, Buenos Aires, 1994.

Gera, L., Evangelización de la cultura, en SEDOI 40 (1979).

Gutiérrez, G.: Teología de la liberación. Perspectivas, Sígueme, Salamanca, 1973, 21-41.

Libanio, J. B., Formación de la conciencia crítica. 1: Aportes filosófico-culturales, Bogotá, 1980.

—, Formación de la conciencia crítica. 2: Aportes socio-analíticos, Bogotá, 1980.

—, Formación de la conciencia crítica. 3: Aportes psico-pedagógicos, Bogotá, 1980.

Libanio, J. B.; Taborda, F., Ideología, en Ellacuría, I.; Sobrino, J., Mysterium Liberationis..., T. II, 579-599.

Mardones, J. M., Fe y política. Compromiso político de los cristianos en tiempos de desencanto, Santander, 1993.

Moltmann, J., Teología política. Ética política, Salamanca, 1987.

Pieper, J., Justicia, en Virtudes fundamentales, Madrid, 21980, 83-172.

Rodríguez, J. F., Doctrina social de la Iglesia y ciencias sociales. ¿De la contradicción al diálogo?, Santafé de Bogotá, 1992.

Sung, J. M., Economía. Tema ausente en la teología de la liberación, San José, 1994.