La imagen panteísta e islámica de Dios se extiende entre los jóvenes


Según constata Francesc Torralba, filósofo y teólogo

- La imagen de Dios está cambiando en los últimos años entre los jóvenes europeos, constatan los estudios del filósofo y teólogo Francesc Torralba.

Entre las imágenes más habituales que los jóvenes tienen de Dios en nuestros días se encuentran la del Dios cristiano, la del Dios como Principio Cósmico o como Energía, la del Dios panteísta o el Dios-Tierra, una imagen marcada por el politeísmo mediático de los famosos, la del Dios del Islam y una imagen negativa de Dios que se suma a algunos casos de personas que no tienen una imagen de Dios.

Así lo señaló el profesor de la Universidad Ramon
Llull en la sesión del Fórum «Jóvenes, religiosidad y Evangelio» celebrada este miércoles en el Centro Teológico Salesiano Martí-Codolar de Barcelona.

A partir de la experiencia universitaria de Torralba y de su relación con el mundo juvenil, destacó cómo se han extendido en los últimos años las imágenes panteísta e islámica de Dios entre los jóvenes.

«El panteísmo considera la divinidad como el conjunto de lo real, de manera especial es el "Dios de
la Naturaleza" –destacó el filósofo-. Por eso crea en los jóvenes una sensibilidad ecológica, de manera especial entre los que viven en las grandes urbes y el amor a ese Dios se traduce en amor a la Tierra y lleva al joven a la huida de la ciudad, a una ecosensibilidad, a una ecolatría y a toda clase de reivindicaciones ecológicas«.

Respecto a la imagen del Dios del Islam, Francesc Torralba explicó que se trata de «una imagen prejuzgada negativamente por intereses occidentales y que se va extendiendo con el gran flujo migratorio a partir de la gente proveniente de la inmigración de países que profesan esta religión». Esa imagen, más extendida desde el once de septiembre de 2001, presenta un Dios «intolerante y belicista, el de los terroristas y de los ignorantes».

Sin embargo, muchos jóvenes conservan la imagen del Dios cristiano, que ha sido hegemónica durante mucho tiempo, confiesa, aunque una parte de ellos la une a una Iglesia en la que no confían.

«Si no tiene credibilidad el agente transmisor, la imagen de Dios la perciben deformada --destacó Torralba, laico y padre de familia--. En muchos de ellos, la imagen del “Dios legal” ya ha quedado postergada, dando paso al “Dios del Amor”. Pero, con frecuencia, este Dios lo perciben como un “Dios a la carta”, es decir, seleccionan su rostro amable pero que no pone en tensión su vida, ni les crea conflictos. Y, además, es un Dios sin mediaciones: “Dios sí; la iglesia, como mediadora, no”».

Tras la ponencia, los participantes debatieron sobre la pastoral juvenil y la manera de transmitir una la imagen del Dios del Amor, que muchos conservan, y llegaron a la conclusión de que hoy resultan imprescindibles las actitudes de silencio, escucha y coherencia personal.