Los objetivos específicos en la formación católica

Autor: Tere Fdez. del Castillo /Lucrecia R. de Planas

La evaluación en la Formación Católica es más compleja que la de otras asignaturas, ya que debemos evaluar no únicamente conocimientos, sino también actitudes. Esto es importante ya que debemos lograr que la razón, iluminada por la fe, guíe toda la vida del alumno y le lleve a traducir su fe en obras y en un compromiso apostólico serio.

Esto se expresa concretamente en dos tipos de objetivos específicos:

Objetivos doctrinales:
Se refieren a los conocimientos que los alumnos deben aprender.

Objetivos morales:
Se refieren a los sentimientos, valores, emociones y actitudes que los alumnos deben ir adquiriendo.


Ejemplos de objetivos doctrinales:
• El alumno enlistará los siete pecados capitales.
• El alumno describirá algunos rasgos de la persona y las actividades del Papa reinante.
• El alumno explicará cuál es la importancia del Espíritu Santo (santificador) en la Iglesia y en la vida de todo cristiano, así como el significado del sacramento de la Confirmación.

Ejemplos de objetivos morales:
• El alumno se identificará afectivamente con la persona del Papa estando dispuesto a defenderlo y a rezar por él.
• El alumno tomará conciencia del valor de la fe en su vida y de la necesidad de defenderla de sus enemigos.
• El alumno adoptará una actitud militante en su vida cristiana, participando en alguna actividad propiamente apostólica, y se sentirá identificado con iniciativas de este tipo.


1. Evaluando la labor del profesor
2. Evaluando el desempeño de los alumnos
3. Los objetivos específicos en la formación católica
4. Cómo evaluar en Formación Católica
5. Elaboración de exámenes de catequesis
6. Conclusión