¿Dónde están los Elías? 

“He aquí, yo os envío el profeta Elías, antes que venga el día de Yahweh, grande y terrible.  El hará volver el corazón de los padres hacia los hijos, y el corazón de los hijos hacia los padres, no sea que yo venga y hiera la tierra con maldición” Mal. 4:5,6

Mucho se ha hablado y escrito acerca de esta tremenda profecía.  Algunos, “antes de que venga el día de Yahweh grande y terrible” van a ser usados por Dios a fin de poder cumplir con el propósito de esta profecía. Dios va a levantar hombres, mujeres y niños, que preparen el camino del Señor. 

Así como Juan el Bautista fue el instrumento humano que Dios usó para preparar el camino a la primera venida del Mesías, Dios va a usar de nuevo a instrumentos humanos para preparar la Segunda Venida de Cristo ahora como “Rey de reyes y Señor de señores” Ap. 19:16

Cuando el ángel se presentó a Zacarías en el templo y le dijo: “Zacarías, no temas; porque tu oración ha sido oída, y tu mujer Elizabet te dará a luz un hijo, y llamarás su nombre Juan...” veamos ahora algunas de las características que haría Juan, “Y hará que muchos de los hijos de Israel se conviertan al Señor Dios de ellos.  E irá delante de él (Cristo) con el espíritu y el poder de Elías, (Mal. 4:5) para hacer volver los corazones de los padres a los hijos y de los rebeldes a la prudencia de los justos, para preparar al Señor un pueblo bien dispuesto” Lc. 1:16,17

Por tanto, para poder preparar la primera venida de Cristo Dios usó a Juan el Bautista para preparar al Señor “un pueblo bien dispuesto”.  Juan, tenía un mensaje que dar.  Juan, no fue educado en institutos de enseñanza humana.  Juan, recibió del mismo Dios en la naturaleza el mensaje que debía ser dado a un pueblo apóstata y a un mundo rebelde a Dios.

Juan, en la soledad del desierto, meditó y estudió en el libro de la naturaleza.  Allí vio la mano de su Creador.  Allí comprendió la forma de acercarse cada día más al ideal que Dios tiene para cada uno de nosotros.

Cuando llegó su hora, su voz, como los truenos y relámpagos en el monte Sinaí, denunciaron a aquel pueblo, el pueblo hebreo, el pueblo que decía ser “pueblo de Dios” los pecados que habían hecho de esa nación, una nación apóstata y rebelde a los mandamientos de Dios y a sus estatutos y preceptos.

Cuando llegó la hora de preparar el Camino para el Señor, Juan, no fue con mensajes de paz, de amor, de confianza, de historietas para niños, no asistió a cursillos para matrimonios, a clubs de conquistadores, a semanas de oración, no fue dirigente de iglesia, no fue por supuesto reconocido como miembro del Sanedrín, (podríamos decir ahora, pastor) y tantas cosas que se inventan los hombres, en lugar de acudir a Dios ya que “El principio de la sabiduría es el respeto al Eterno” Sal. 111:10. “El temor de Yahweh es el principio de la sabiduría, y el conocimiento del Santísimo es la inteligencia”. (Prov. 9: 10). “Y si alguno de vosotros tiene falta de sabiduría, pídala a Dios, el cual da a todos abundantemente y sin reproche y le será dada” St. 1:5  Aquellos hombres, mujeres y niños que Dios pueda usar para ser parte de los Elías del tiempo presente, porque ya estamos viviendo en el fin del tiempo del fin, deberán haber pasado o estar viviendo la misma experiencia que Juan el Bautista y que anteriormente la tuvo que pasar el profeta Elías en tiempos de la malvada Jezabel.

Los Elías de este tiempo del fin, deberán depender única y exclusivamente de Dios, porque de El, tiene que venir el poder y la sabiduría para proclamar el mensaje que debe preparar un pueblo que pueda estar en pie ante la Segunda Venida de Cristo.

¿Por qué debe ser de esta manera?  ¿Quiénes son los que el Señor va a usar para ser parte de los Elías del tiempo actual?  La vida de Juan el Bautista es una vida a considerar.  Su mensaje fue un mensaje que debe ser considerado también en la misma profundidad que su vida.

Si queremos ser Elías o Juanes Bautistas que preparen el Camino para el Señor, debemos vivir la vida que ambos tuvieron que vivir, pasar por las experiencias que tuvieron que pasar y finalmente, unos y otros recibir la recompensa de acuerdo a la voluntad de nuestro Señor.

En la Palabra de Dios no hay constancia de que ni uno ni otro, recibieran enseñanza humana.  No hay evidencias de que Juan recibiera ni siquiera un simple folleto de escuela sabática que con un solo informe diario están manipulando la mente de todos los  millones que dicen ser adventistas del séptimo día.  ¿Cómo es posible que no se levanten más voces dentro del llamado movimiento adventista del séptimo día en protesta por la manipulación del mensaje que se está presentando en los folletos de escuela sabática?  ¿Pueden pensar de quién partió esa idea de que un hombre acapare el poder de la mente de todos los miembros que por ser fiel a la iglesia, a las imposiciones que ella hace, se ven obligados a estudiar las mentiras, la manipulación del mensaje, cautivando las mentes de todos en lugar de estudiar las Escrituras que fue lo que dijo nuestro Señor?

¿No has llegado a pensar querido hermano/a quién es el que desea controlar las mentes para que no tengas libertad para comprender y estudiar la Palabra de Dios?  ¿No te das cuenta de que te están encajonando con sus falacias e introducen errores y quitan los temas que deben de prepararnos para la eternidad?  ¿No te das cuenta de que no hay mensajes de reforma, de amonestación, tocan el libro de Isaías para extraer la parte histórica y la espiritual, la que debe prepararnos para evitar caer en  los mismos errores que cayeron nuestros antepasados?

¿No te das cuenta de que por mucho que desde el púlpito se pretenda decir, no hay avances en la obra del Señor?

Tampoco hay evidencia de que Juan fuera amigo de los sacerdotes. No hay evidencias de que asistiera a ninguna de las escuelas de los rabinos.  No hay evidencia alguna de que fuera moldeado a la semejanza humana.  Sino todo lo contrario.  Fue educado de acuerdo al plan de Dios: en la soledad del campo y en pleno contacto con Dios y la naturaleza.

Por eso mismo, como no estuvo influenciado por nadie, como su mente estaba libre y limpia para denunciar los pecados del pueblo, como no tenía amigos del Sanedrín (pastores), como no estaba supeditado a nadie, no se había sentado entre publicanos y fariseos, (miembros del C.M.I. FEREDE y otras instituciones ecuménicas)  tuvo el poder de salir, llegado su hora, y retumbar las vidas de sus contemporáneos con mensajes que despertaron muchas conciencias dormidas.  “Arrepentíos, porque el reino de los cielos se ha acercado” Mt. 3:2

Pregunto, ¿se oyen estos mensajes hoy en las iglesias?  Me da la sensación que no se dan, porque de darse, habría un resultado que hoy no se está viendo, a pesar de que quieran tapar la realidad de las cosas y haciendo creer al laico, que sigue siendo la iglesia de Dios, cuando hace años que la mensajera del Señor dijo que, “la presencia de Dios no está en su medio” EUD 50 (1898) ¿Por qué?  “Porque la iglesia se encuentra en el estado laodicense” y finalmente Dios la va a vomitar con su boca tal como está registrado en Ap. 3 que todos creo que conocemos.

¿Y en cuanto a los laicos?  La gran mayoría de ellos sólo se dedican a despreciar por despreciar a la iglesia, a sus dirigentes, pero, carecen de mensajes espirituales que puedan hacer que “todos lleguemos a la unidad en la fe” ya que muchos todavía siguen/seguimos influenciados por nuestras concepciones pasadas y no aceptan/aceptamos nuevas verdades y se impide que el laico pueda tener también la oportunidad de decidir entre su salvación o perdición.  La mayoría de los pastores laicos, de los obreros laicos que están recibiendo diezmos de los feligreses siguen actuando de la misma manera que cuando estaban en la organización: Ni entran ni dejan entrar. Ni oyen ni dejan oír. No se permite que las verdades sean presentadas para que individualmente uno pueda decidir de acuerdo al plan de Dios.  Somos libres para ello y  no debemos de estar sujetos por nadie, y más, cuando se está haciendo referencia a la Palabra de Dios.  “Y conoceréis la verdad, y la verdad os hará libres” Jn. 8:32

No hay unidad ni en la iglesia ni fuera de ella.  Y el mismo Señor nos aconseja a que seamos “uno” en “la unidad en la fe” en los mismos puntos de doctrina, porque donde hay confusión, es sinónimo de Babilonia.  Unos creemos que Daniel 12 es futuro; en la correcta interpretación de la palabra “tiempos” de Daniel 7:25 que el diablo “intentará, pensará y se creará con la facultad de cambiar “los tiempos” y la ley...” si intentará, si pensará si se creará con la facultad de cambiar, es porque para Dios todavía están vigentes y nos advierte de lo que precisamente haría la bestia apocalíptica en su primera fase del 538-1798 DC. Algunas versiones de las Escrituras mencionan con más claridad el concepto de lo que significa la primera palabra “tiempos” de Daniel 7:25.

Ahora bien, debemos saber diferenciar y conocer el verdadero concepto de iglesia, y son “las almas fieles de Dios”, esa es su verdadera iglesia. Aquellos que hoy se congregan en grupos pequeños para evitar precisamente la manipulación del Sanedrín, sea la iglesia organizada o los pastores asalariados que pretenden imponer sus puntos de vista “porque donde están dos o tres congregados en mi nombre, allí estoy yo en medio de ellos” Mt. 18:20 y de una manera humilde ir aceptando las nuevas verdades que Dios revela en este tiempo a fin de prepararnos para la eternidad.

Es la única manera hermano/a que tú puedas sentirte realmente libre, porque “conoceréis la verdad y la verdad os hará libres”  Jn. 8:32  Esta es la esencia del Evangelio.  Yo no veo a ningún miembro de iglesia que se sienta libre sino todo lo contrario.  Está sujeto a imposiciones, a órdenes, a dar pero no pedir, usted no pregunte que es lo que se hace con los diezmos y con las ofrendas, porque nunca recibirá un documento oficial que acredite que está siendo usado para esto o para aquello, tienes que pagar para todo, folletos de escuela sabática, revista oficial, colegios caros, algunos padres se ven forzados a trabajar horas y horas porque al dar la enseñanza a sus hijos en estos colegios adventistas, se creen que están haciendo la voluntad de Dios, mientras, los pastores tienen muchas más ventajas que los laicos, y éstos, para poder pagar los colegios de sus hijos, se esclavizan hasta el punto de tener que trabajar horas y horas lo que les quita el tiempo para estudiar la Palabra de Dios.  Por supuesto, tienes que cumplir la promesa que cada sábado se repite desde los púlpitos, con una insistencia semanal diezmos y ofrendas, cuantas más mejor... sin embargo, poca exhortación se hace para el estudio de la Palabra de Dios,  todo eso para alimentar a unos cuantos hombres que dicen ser pastores que no están predicando el mensaje que debe predicarse en estos momentos. No predican el Evangelio, sino que viven del Evangelio.  “Son atalayas ciegos, todos ellos ignorantes; todos ellos perros mudos, no pueden ladrar... y los pastores mismos no saben entender; todos ellos siguen sus propios caminos, cada uno busca su propio provecho, cada uno por su lado” Is. 56:10,11  Sin embargo, con el pretexto de que son “ungidos” no sé por quién, dan órdenes, imponen sus puntos de vista, actúan como los curas, y lamentablemente el laico suele llegar a decir, “lo que diga el cura eso haremos”, en otras palabras, “lo que diga el pastor eso haremos” en lugar de decir, “¿qué dice la Palabra de Dios?.  Estos supuestos ungidos, reciben ayuda en concepto de vivienda, ayuda para el auto, ayuda para desplazamientos, enseñanza más económica para los hijos, préstamos con tus diezmos y ofrendas, viven privilegiados, buenas  viviendas, algunos hasta hacen negocio con las mismas al comprar la vivienda y luego la ofrecen a la organización, como vivienda para los futuros pastores que vengan destinados a ese lugar, así reciben un alquiler mientras ellos están recibiendo ayudas para sus gastos de vivienda. ¿Te das cuenta hermano dónde llega el poder y la hipocresía de algunos?  Por si esto no fuera bastante, disponen de ofertas para viajes organizados para visitar ciertos lugares... tienen unas ventajas que el laico, aquel que con sus diezmos y ofrendas intenta ser fiel a Dios al devolver lo que ellos piensan que debe ser así, noi tienen, no tenemos, y muchos apenas tienen para comer.  Nada más que saben pedir, pero, díganme hermanos si ustedes conocen de algún pastor que haya dado de su dinero, de su comida, alimentos a un hermano en la fe que estuviera necesitado.  Posiblemente aparezca alguno, pero, alguno.  La mayoría son como los sacerdotes y los levitas, “Aconteció que descendió un sacerdote por aquel camino y viéndole, pasó de largo.  Asimismo un levita, llegando cera de aquel lugar y viéndole, pasó de largo...” Lc.10:31,32 pasan de largo.  Son incapaces de dar ayuda a aquel hermano/a que con sus diezmos le está dando de comer.  “Por sus frutos los conoceréis” Mt. 7:16

Por eso mi hermano/a, los Elías de este tiempo del fin, tienen que tener las mismas características que tuvieron tanto Elías como Juan el Bautista: estar lejos de la influencia humana.  Estar lejos de la influencia religiosa que gobierna la iglesia actual que dice ser la verdadera.  ¿Por qué?  Porque la iglesia ya no predica la verdad.  Porque la iglesia ya no sabe diferenciar los mensajes que deben darse.  Porque la iglesia ha perdido su orientación.  Porque la iglesia ha perdido su rumbo.  Ya no saben quién es Babilonia, quien es la bestia ni quien es el 666, vean, lean, algunas revistas oficiales Adventistas como Adventus, el folleto de escuela sabática del 2 trimestre del año 2002 y otras muchas publicaciones y se dará cuenta de que están manipulando las conciencias del laico al ir cambiando los mensajes que dieron origen al nacimiento del movimiento adventista en cumplimiento de la profecía relativa a Dn.8:14, que tuvo su culminación en un día de expiación, en una Fiesta Solemne, (y eso que la mayoría siguen diciendo que no hay que guardarlas,) un 22 de octubre de 1844.  Se confía mucho más en la creencia evangélica falsa de la gracia que en la verdadera obra que debe de realizarse en cada uno de nosotros.  Los frutos de “la santidad sin la cual nadie verá al Señor” Hb. 12:14

Por eso el Señor dice: “Te vomitaré de mi boca” Ap. 3:16 y luego de una forma personal, dice: “Yo estoy a la puerta y llamo”  si está a la puerta y llama es porque está afuera intentando entrar, ¿no es cierto?  Por lo tanto, el Señor Jesús está fuera, no está en la iglesia laodicense, precisamente por su condición.  ¿Me explico?  Sigue diciendo el mismo Señor Jesús: “si alguno oye mi voz y abre la puerta, entraré a él y cenaré con él y él conmigo” Ap. 3:20  Siempre el mensaje es individual, es personal, si “alguno” oye la voz del Señor, tiene que abrirle la puerta de su corazón para que El pueda entrar y de esa manera poder conversar amigablemente como se suele hacer en una cena.

En ningún momento el Señor Jesús está haciendo referencia a la iglesia como tal, sino a la persona individualmente, porque a la iglesia, lamentablemente, a pesar de todo lo que la quieran defender, y sacar los textos de su contexto, “El Señor la va a vomitar de su boca”.

Cuando los apóstoles fueron ungidos con el poder del Espíritu Santo, no tuvieron ningún temor en proclamar: “Arrepentíos y convertíos, para que sean borrados vuestros pecados; para que vengan de la presencia del Señor tiempos de refrigerio...” Hch. 3:19 Cuán diferente eran estos ungidos del Señor, que los supuestos “ungidos de ahora”, donde todo está bien, no hay que ser alarmistas, no hay que causar temor, tampoco tenemos que actuar como jueces, no hay que precipitar la persecución, debemos ser prudentes... son expresiones que hoy son las que pronuncian esta “nueva clase de ungidos”.

Juan el Bautista, no tuvo ningún reparo, ningún temor en denunciar los pecados del pueblo, precisamente por ello, fue decapitado. “¡Generación de víboras! ¿Quién os enseñó a huir de la ira venidera? Haced, pues, frutos dignos de arrepentimiento” Mt. 3:7,8

¿Predican eso hoy aquellos que dicen ser “ungidos de Yahweh”?  ¿Están estos hombres que viven de los diezmos y las ofrendas de los laicos predicando el mismo mensaje que predicó Juan el Bautista?  Si no lo están predicando, son indignos de estar recibiendo el diezmo que debe ser empleado única y exclusivamente para el adelanto de la obra del Señor.  Si ellos no están proclamando el mensaje que debe darse, usted no debería de estar apoyando con sus diezmos y ofrendas porque ante los ojos del Señor será considerado como cómplice, porque “el que sabe hacer lo bueno y no lo hace, le es pecado” St. 4:17

La misma ley terrena condena a aquellos que son partícipes en alguna trasgresión a la ley como cómplices de robo, de asesinato... si ante la ley de los hombres, los encubridores son juzgados como autores también de los hechos, ¿cómo Dios va a actuar de diferente manera si es el Dios del Universo y su santidad es la que rige los destinos del cielo?

El pueblo de Dios son aquellos hombres, mujeres y niños que con el temor de Dios en sus corazones, están guardando “los mandamientos de Dios y la fe de Jesús” Ap. 14:12, esa es la iglesia de Dios, ese es el pueblo de Dios a pesar de que todo el arsenal adventista del séptimo día y todas las demás denominaciones religiosas se lancen contra estos grupos de hijos de Dios, cumpliéndose la parte final de Ap. 12:17 “y se fue a hacer guerra contra el resto de la descendencia de ella, los que guardan los mandamientos de Dios y tienen el testimonio de Jesucristo”, para defender lo que no se puede defender y sólo lo defienden lo que menos saben de la historia y los hechos que están aconteciendo dentro del mundo adventista oficial y de cualquier otra denominación religiosa.

Usted quiere ser Juan el Bautista o Elías de este tiempo del fin, llénese del poder del Espíritu Santo y predique el mensaje que debe de predicarse y verá los resultados enseguida.  Si no ocurre así, cuestiónese el porqué a nivel personal.  “Y también todos los que quieren vivir piadosamente en Cristo Jesús padecerán persecución” 2 Tim. 3:12 “Y seréis aborrecidos de todas las gentes por causa de mi nombre” Mt. 24:9  ¿Está usted viviendo persecución por causa del nombre del Señor Jesús?  Si no lo está siendo, medite hermano/a en su vida, porque estamos viviendo en el tiempo del fin del tiempo del fin y si como algunos dicen que todavía no ha llegado este tiempo, deberíamos reflexionar y ver qué es lo que les sucedió a todos los apóstoles, cómo murieron, qué le pasó al apóstol Pablo y nos daremos cuenta de cuán lejos estamos de hacer la voluntad de nuestro Señor. Estudiemos los mensajes que dieron y veremos cuál fue su resultado.  Haga usted lo mismo hermano/a si no lo está haciendo, y verá como en pocas horas sus amigos se convertirán en sus peores enemigos.  Entonces, estará mal para la iglesia, será considerado reformista, disidente, separatista, alarmista y todo cuanto quieran vilipendiarle, y lo echarán de la iglesia o se tendrá que ir usted porque verá que no puede estar ya más tiempo con ellos, pero, ante  los ojos de Dios, estará haciendo su voluntad, porque “gozaos y alegraos, porque vuestro galardón es grande en los cielos; porque así persiguieron a los profetas que fueron antes de vosotros” Mt. 5:12  “¿A cuál de los profetas no persiguieron vuestros padres? Y mataron a los que anunciaron de antemano la venida del Justo, de quien vosotros ahora habéis sido entregadores y matadores...” Hch. 7:52  “Y seréis aborrecidos de todos por causa de mi nombre; mas el que persevere hasta el fin, éste será salvo” Mt. 10:22

El verdadero hijo de Dios estará siendo aborrecido por causa del nombre de Jesús, por estar viviendo a la altura que Dios quiere que se viva, porque estará denunciando los pecados que se han estado cometiendo e introduciendo en el campamento, porque estará llamando al pecado por su nombre.  Esos serán los que Dios use para hacer la obra de Juan y Elías en este tiempo del fin.

Sin embargo, para la gran mayoría, para aquellos que les gusta que hablen bien de ellos,  el mismo Señor dijo: “¡Ay de vosotros, cuando todos los hombres hablen bien de vosotros! Porque así hacían sus padres con los falsos profetas” Lc. 6:26

Y para aquellos que no les gusta reprender el pecado que se ve, para aquellos que no estén denunciando las irregularidades que se están introduciendo en el campamento, en la iglesia, los que no sienten pesar por su condición ni claman ni gimen por los pecados del pueblo, “Pasad por la ciudad en pos de él y matad; no perdone vuestro ojo ni tengáis misericordia... Comenzaron, pues, desde los varones ancianos que estaban delante del templo... y comenzaréis por mi santuario” Ez. 9:5,6  Esta es la visión que vio Ezequiel y que es válida para este tiempo del fin, porque está haciendo referencia al sellamiento y al fin del tiempo de gracia, y la iglesia ASD será la primera en recibir los azotes de la ira de Dios por no haber cumplido con su misión.  La historia siempre se repite.  Y los primeros que van a sentir los azotes de la ira de Dios, van a ser los dirigentes tanto a nivel  mundial como nacional y local, aquellos que han tenido la responsabilidad de educar al pueblo y no lo han sabido hacer.  A los pastores, a los dirigentes de las iglesias locales, a los maestros, a todos aquellos que han estado ocupando cargos de responsabilidad dentro de las filas del “supuesto pueblo de Dios”.

Por lo tanto, Juan, tuvo un mensaje que dar y lo dio porque vivió a la altura que debía de vivir para poder ser lleno del Espíritu Santo y salir a convulsionar las conciencias de las multitudes que estaban dormidas como consecuencia de las falsas enseñanzas del Sanedrín, de los sacerdotes, de los escribas, de los pastores...

Juan estuvo muy lejos de pertenecer a esa organización religiosa.  Estuvo totalmente sólo dependiendo de Dios y no de los hombres.

Para este tiempo del fin, la profecía debe volver a cumplirse y tenemos que comprender varios aspectos de la vida de Elías y ver si realmente encaja en nosotros para que podamos ser uno de ellos.  Como ASD no vamos a tener otra oportunidad.  O somos parte de los Elías del tiempo del fin, es decir, o somos usados por Dios para proclamar este último mensaje que debe darse a la tierra o nos pasará como a las cinco vírgenes fatuas que cuando quisieron darse cuenta oyeron la voz del esposo que les dijo: “No os conozco” Mt. 25:12  “Porque es tiempo de que el juicio comience por la casa de Dios; y si primero comienza por nosotros, ¿cuál será el fin de aquellos que no obedecen al evangelio de Dios? Y si el justo con dificultad se salva, ¿en dónde aparecerá el impío y el pecador? 1 Pe 4:17,18 ¡Cuán terrible será haber conocido la verdad y estar eternamente perdido! ¡Cuán terrible será estar esperando la Venida del Hijo del Hombre y recibir alguna de las plagas por habernos perdido!  ¡Qué triste para aquel, que, teniéndolo todo, se haya/me haya perdido por su/mi incredulidad!

Veamos, pues, algunas de las características del profeta Elías y ver en qué lugar nos encontramos nosotros ahora para ver si podemos llegar a ser parte de este último movimiento que debe preparar al Señor “un pueblo bien dispuesto”.

Creo que todos conocemos más o menos la historia de Elías, cuando vivió, qué es lo que hizo... etc. etc.  lo podemos encontrar en 1 Rey. 17 en adelante.

Pero, me gustaría compartir algo y ver si realmente podemos comprenderlo.

3)      Su esposa Jezabel (pagana, idólatra) gobernaba la falsa religión (1 Rey.18:19)