EL EVANGELIO DE HOY
P. Rufino Mª Grández, ofmcap.

 


Domingo
XXXIV, ciclo A
Mt 25,14-30

 

Jesucristo
Rey del Universo



Nota introductoria. Vea el lector los himnos que hemos publicado en esta sección el domingo XXXIV del año B y del año C, válidos igualmente para el año A.

El himno que presentamos es para adorar a Cristo Rey del universo, centrándonos en lo más puro y esencial de su reinado (estrofa 2), que es su santo rostro, el amor que de él irradia y la intimidad que se establece.

(Manoppello es un municipio de los Abruzos de la provincia de Pescara).

... Benedicto XVI en Manoppello. En 2006 celebramos el 500 aniversario de la llegada a Manoppello, según la tradición, del Sagrado Velo con la imagen de Cristo, reliquia que, sobre todo en los últimos años, ha conocido una extraordinaria notoriedad en Italia y en todo el mundo, gracias a los estudios que han afirmado su autenticidad.

El 1 de septiembre de 2006 hubo un acontecimiento que sin duda alguna cambiará la historia de esta importante reliquia de toda la cristiandad: la visita de Benedicto XVI al santuario del Santo Rostro de Manoppello. El Papa entre nosotros, el Papa con nosotros –como escribió monseñor Bruno Forte–. «Así es como lo vimos, padre, amigo, hermano, que a todos saludaba, y a todos bendecía. El Papa teólogo que nos ha abierto su corazón de creyente, comunicándonos con transparencia y sencillez la experiencia vivida en los largos minutos de intensa oración ante aquel Rostro. […] El Papa que viene de la gran cultura teológica y filosófica alemana, que no duda en presentarse como el enamorado del Señor, que ha vivido y sigue viviendo continuamente esa experiencia».

Después de una larga espera que duró siglos y siglos, el primer Papa venía a Manoppello, pasado muy poco tiempo de su elección a la sede de Pedro. Y la aguda observación del padre Pfeiffer, que dice: «Yo estoy convencido de que muchos de sus predecesores han visto ya la misma imagen, cuando este mismo Rostro Santo todavía era llamado la “Verónica”, conectándolo con la tradición legendaria y la devoción popular de una mujer piadosa del mismo nombre que enjuagó el rostro de Cristo durante su camino al Calvario. Es enorme y benéficamente significativo que el actual Papa haya visto y contemplado largo tiempo con sus propios ojos esta imagen de Cristo que fue venerada durante los siglos como la reliquia más importante de la cristiandad. […] Además del gozo del encuentro con el pueblo de Manoppello y de toda la región de los Abruzzos, la larga estancia de Benedicto XVI frente a la imagen-reliquia fue el gesto más elocuente de su visita. El Papa estaba visiblemente emocionado y permaneció en profundo silencio ante la imagen de Cristo, como en un encuentro directo con Jesús, hecho posible por el Santo Rostro»” (tomado de “La vista de Benedicto XVI al Santo Rostro de Manoppello”, por Cármine Cucinelli, rector del santuario, artículo publicado en “30 Días”, año 2009, n. 4).



SANTO ROSTRO DE JESÚS
en Manopello


1. Eternidad de amor en esos ojos,
los dulces ojos de Jesús amando,
mirada de mi Dios que se revela
y trae paz, inmensa paz, resucitado.

2. Tu frente luminosa y dilatada
acoge cuanto Dios haya pensado;
allí estoy yo, eterno pensamiento,
creado para ti en tu reinado.

3. Me dejo penetrar muy dulcemente
por la luz de tu rostro sacrosanto;
tu rostro buscaré; es mi refugio,
tu gloria es mi perdón, mi gracia y manto.

4. Tus labios son palabra para mí,
festín de la Escritura que yo amo,
divino Verbo de María Virgen,
mi todo Dios, donado y encarnado

5. Tu santo rostro brille, e ilumine
la faz del mundo entero atribulado,
y sea la alegría regalada
que el Padre y el Espíritu me han dado.

6. Dulcísima esperanza de mi vida,
oh santo rostro de mi Dios amado,
a ti mi gratitud y mi alabanza
ahora y por los siglos consumados. Amén.


Puebla de los Ángeles, 15 noviembre
fr. Rufino María Grández, OFMCap.