TIEMPO DE NAVIDAD
P. Rufino Mª Grández, ofmcap.
 

 

La Virgen María en Navidad - 3


La Madre llena de ternura


(Noticia. Este himno está compuesto el día de Año Nuevo de 1977 en Madrid, en la comunidad de las Religiosas de la Sagrada Familia de Burdeos, rama contemplativa, celebrando con ellas espiritualmente la octava de Navidad. Con ello se explican mejor las alusiones del mismo, que tienen sentido en cualquier otra comunidad cristiana. El himno mariano puede servir como himno en la octava de Navidad. La mención de la “ofrenda vespertina” asocia el himno al rezo de Vísperas).

La piedad cristiana conoce esta imagen: María arrimando a su Niño a la mejilla. ¡Qué escena más dulce! El Oriente cristiano tiene la imagen de María “Glycophilousa” (la Madre de la dulzura). Es el deseo íntimo que tiene el hijo para con su madre: la caricia de la madre, que en este ademán es una compenetración suprema de dulzura.

Ante esta imagen meditamos el misterio de la Encarnación, y pensamos que María, que ha engendrado al Príncipe de la Paz, es la Reina de la Paz).


La Madre llena de ternura
que arrima un Hijo a sus mejillas
alce también hasta su rostro
a esta familia reunida.

Y esos sus ojos penetrantes
que a todos unen y cobijan
pongan la paz y el suave gozo
en esta ofrenda vespertina.

Una mujer de nuestra tierra,
una entre todas tan sencilla,
es por la Iglesia proclamada
Madre del Verbo de la vida.

Madre del Dios omnipotente,
ella que esclava se decía,
la virgen cuyo don precioso
al mundo entero santifica.

Sea la Reina de la paz,
ella quien cure las heridas;
sea la aurora y la promesa
del Año Nuevo que principia.

Te bendecimos, Flor bendita,
y te pedimos, oh María,
tu corazón sumiso y puro
y esa tu fe contemplativa.

¡Honor a Cristo nuestro hermano,
nuestro por penas y fatigas,
y la mujer que nos lo entrega
sea por siempre bendecida! Amén.


Madrid, 1 enero 1977