HIMNARIO DE LA VIRGEN MARÍA
Ciclo anual de celebraciones de la Virgen
en la Liturgia de las Horas

 

 

Dedicación de la Basílica de Santa María
(La Virgen de las Nieves, 5 de agosto)



Cuentan que unos patricios romanos quisieron edificar una basílica en honor de la Madre de Dios en Roma. La Virgen, complacida, se les mostró en visión nocturna y les indicó que el lugar escogido era una porción del Esquilino, que verían cubierta de nieve en la canícula de agosto. La Virgen de las Nieves.

La historia es aún más hermosa que la leyenda. Y la historia es que en el concilio de Éfeso (año 431) los Padres aclamaron a María como Madre de Dios. La Theotókos, la sancta Dei Genetrix, ya era conocida cone este título anteriormente (así en el Sub tuum praesidium confugimus, santa Dei Genetrix, invocación escrita en griego, la oración más antigua que conocemos dirigida a la Virgen), pero a partir de entonces la maternidad divina queda explicitada en el dogma cristiano. A raíz del Concilio el Papa Sixto III (432-440) erigió el Roma la Basílica de la Madre de Dios, que luego se llamaría la Basílica de Santa María la Mayor, el templo más antiguo dedicado a la Virgen en Occidente.

Tal es la memoria del 5 de agosto, tan bella por ese trasfondo dogmático. Por esto el himno canta el misterio de la maternidad de María. Es tu verdad, oh María, su santa maternidad.

(Música: La sencillez del texto se traduce en una melodía confía y directa. De dos en dos versos).

 

Es tu verdad, oh María,
tu santa maternidad,
crecida en tu carne virgen
cual don de la Trinidad.

Jesús que mora en tu pecho:
es ésa tu santidad;
su cruz, tu gracia y belleza,
su gloria, tu eternidad.

Eres tú por el Espíritu
Madre cual nadie real,
y al ser Jesús Unigénito,
Madre de Dios personal.

La Iglesia te siente suya,
miembro y Madre por igual;
nos diste al Primer Nacido,
Madre del Cristo total.

Juntemos hermosas piedras
para hacer templo y altar,
por ti, que a Cristo nos llevas,
Madre de la cristiandad.

¡Honor al Hijo santísimo,
de Madre hija de Adán!;
Ante tus ojos, oh Verbo,
por tu Madre, ten piedad. Amén
.

 

Rufino María Grández, Himnario de la Virgen María. Ciclo anual de celebraciones
de la Virgen en la Liturgia de las Horas
. Burlada, Curia provincial de Capuchinos 1989.
Música
: Fidel Aizpurúa.