EL AÑO LITÚRGICO
EL CAMINO CUARESMAL

P. Rufino María Grández, ofmcap.

 

VI. Himnos para la Hora intermedia



Tercia - Sexta - Nona



Ojos de aquel publicano



El himno evoca la escena que pintó Jesús en la parábola del fariseo y el publicano (Lc 17, 9-14). “El publicano, en cambio, quedándose atrás, no se atrevía ni a levantar los ojos al cielo, sino que se golpeaba el pecho, diciendo: ¡Oh Dios!, ten compasión de este pecador” (v. 13). Prestamos atención a aquellos ojos, a aquella mano, a aquella lengua que ora en bajo murmullo…

La mención del “octavo día” acaso aconseje este himno para los domingos.


Ojos de aquel publicano
hasta la tierra caídos,
el Dios de la luz os mira,
miradle con regocijo.

Mano que pide clemencia
hiriendo el pecho contrito,
el Señor te abre la puerta
de su pecho compasivo.

Lengua que en bajo murmullo
dices tu dolor sentido,
el Juez que sabe juzgar
ha escuchado complacido.

Padre del octavo día,
glorioso siendo propicio,
perdónanos, purifícanos,
por el honor de tu Hijo. Amén.


Miranda de Arga (Navarra), enero de 1977