CRISTIANOS ANÓNIMOS
TEOLOGÍA FUNDAMENTAL

Es ésta una experiencia de Rahner para designar a aquellos que viven en la gracia de Cristo, aun cuando (sin culpa por su parte) no saben de Cristo como salvador, no están bautizados y no pertenecen a la comunidad cristiana (ver LG 16; GS 22).

La antropología teológica de Rahner subraya el ilimitado horizonte del espíritu humano con su dinámica apertura hacia Dios, cuya voluntad salvífica universal (1Tim 2,3-4) significa que a todos los hombres y mujeres se les ofrece la gracia para ser salvados. Es necesario clarificar aquí varias cosas.

Primero, toda gracia viene a través de Cristo (He 4,12; 2Cor 5,15; Jn 5,11-12) y necesariamente orienta a los seres humanos hacia Cristo y su Iglesia visible. Segundo, aunque la gracia sea universal, es / sobre natural y gratuita. Es libre y amorosamente ofrecida a todos los seres humanos, con vistas a esa visión final de Dios que trasciende sus fuerzas y facultades "naturales". Tercero, en el orden presente, la gracia no es una oferta meramente "externa", sino que, desde el principio, es una autocomunicación divina que realmente configura nuestra común condición humana. Aquí Rahner habla del existencial sobrenatural otorgado junto con nuestra naturaleza.

La universalidad de la gracia supone una autodonación libre de Dios (el existencial sobrenatural) que afecta intrínsecamente a la estructura interna de la existencia humana (existencial sobrenatural) y nos llama a todos R. Fisichella nosotros a nuestra meta definitiva.

Obviamente, no todo ser humano ha estado o está en condición de responder a la presencia y la llamada de Dios a través de una fe explícita en Cristo y su Iglesia. Existen millones de personas cuya oportunidad de conocer y de relacionarse con Dios ha ocurrido a través del /budismo, el confucianismo, el / hinduismo, el / islam, religiones tradicionales y otros sistemas de creencia. Siempre y dondequiera que esos seres humanos se abren a sí mismos confiadamente a Dios, Rahner les reconoce como cristianos anónimos, es decir, como aquellos que, al menos implícitamente, aceptan su vocación sobrenatural e, incluso sin saber esto, son capacitados por la gracia de Cristo para abrirse a sí mismos al misterio de Dios. Su fe relaciona a estos cristianos anónimos con Cristo e implícitamente les orienta hacia su Iglesia visible.

En el /diálogo interreligioso, el discurso de Rahner sobre los "cristianos anónimos" no siempre ha sido bien aceptado. No parece ocuparse suficientemente de las creencias, prácticas y experiencias específicas de las religiones no cristianas. Esto ha movido a algunos seguidores de otros credos a hablar de los cristianos como "hindúes anónimos" o "musulmanes anónimos".

No obstante, Rahner ofrece una aproximación válida a una cuestión que ha preocupado a pensadores cristianos desde la época de padres tan antiguos como Ireneo, Justino y Clemente de Alejandría. Dada la voluntad divina de salvar a todos a través de Cristo, ¿cómo podemos entender e interpretar la situación de aquellos no cristianos que, al menos implícitamente, creen en Dios y aceptan su vocación sobrenatural? Algunos críticos afirman que con ello Rahner elimina la motivación de la labor misionera. La verdad, sin embargo, es que su tesis de los "cristianos anónimos" indica cómo el evangelio habla y llama a la expresión plena de una realidad escondida de gracia que está presente, al menos imperfectamente, en cada vida humana (ver AG 19; LG 17).

BIBL.: RAHNER K., Los cristianos anónimos, en Escritos de teología VI, Taurus, Madrid 1969, 535-544; WEGER K.-H., Karl Rahner. Introducción a su pensamiento teológico, Herder, Barcelona 1981.

G. O'Collins