DÍA TERCERO

Problemas entre JosÉ y María

 

1. Canto para empezar

 

2. Oración para todos los días

Como en el primer día.

 

3. Presentación del tema

María, como era costumbre en aquella época, primero se comprometió y, más tarde, se casó, como todas las chicas de entonces, con un joven de su pueblo: José, de oficio carpintero, pobre, pero lleno de rica sabiduría popular, pues era de una familia muy antiguas.

Apenas comprometidos oficialmente a contraer matrimonio, antes de haber vivido juntos, María había quedado embarazada por obra del Espíritu Santo.

Lo del embarazo de María no se lo avisó el ángel a José, como normalmente se cree. Lo que le dice el ángel es que no tema tomar a María como esposa, señal de que ya lo sabía todo.

No podemos suponer que María no quiso decir nada a José sobre lo de su embarazo. Ello supondría aceptar una imperfección en ella. Sería infidelidad al amor prometido a José, si le hubiera dejado sufrir solo en duda tan grave. Pues, según las leyes de entonces, cuando una desposada no casada quedaba embarazada, si el hijo era de su prometido, ello era considerado como falta grave, pero se solucionaba con el matrimonio. Pero si el hijo no era de su prometido, entonces la mujer era considerada adúltera y condenada a morir apedreada. Por eso el caso de José era durísimo, pues él sabía bien que aquel hijo no era suyo, y confesarlo suponía condenar a muerte a María.

La solución de este conflicto no sería nada fácil. Supone mucha oración y mucho diálogo, con respeto y mucho amor. Y después de ello, José decide divorciarse discretamente de María, pues piensa que ella es totalmente de Dios, y él se siente quizás como un estorbo. Pero un ángel le ataja, aclarándole que no estorba, sino que, por el contrario, Dios lo necesita para que eduque como padre al Niño que va a nacer. El ángel le ordena que le ponga nombre al Niño, lo cual quiere decir que se encargue de su educación como padre legal.

Con esta interpretación podemos ver a la pareja de José y María mucho más cerca de nosotros, pues ellos tuvieron problemas muy serios y supieron resolverlos a base de diálogo respetuoso, lleno de amor.

 

4. Lectura del Evangelio: Mateo 1,18-25

El nacimiento de Jesucristo fue así. Su madre María estaba comprometida con José. Pero, antes de que vivieran juntos, quedó embarazada por obra del Espíritu Santo.

José, su esposo, era un hombre excelente y, no queriendo desacreditarla, pensó firmarle en secreto un acta de divorcio.

Estaba pensando en esto, cuando el Angel del Señor se le apareció en sueños y le dijo: "José, descendiente de David, no temas llevar a tu casa a María, tu esposa, porque la criatura que espera es obra del Espíritu Santo.

Y dará a luz un hijo, al que pondrás el nombre de Jesús, porque él salvará a su pueblo de sus pecados. Todo esto ha pasado para que se cumpliera lo que había dicho el Señor por boca del profeta Isaías: Sepan que una virgen concebirá y dará a luz un hijo y los hombres lo llamarán Manuel, que significa: Dios-con-nosotros".

Con esto, al despertarse José, hizo lo que el Angel del Señor le había ordenado y recibió en su casa a su esposa.

Y sin que tuvieran relaciones dio a luz un hijo al que José puso el nombre de Jesús.

 

5. Diálogo comunitario

a) Intentemos aclararnos entre todos cuáles fueron los problemas que tuvieron José y María antes de casarse y cómo sería que lograron resolverlos.

b) ¿Conocemos algunos otros problemas graves que tuvieron José y María después de casados?

c) ¿Cuáles son los principales problemas que existen hoy acá entre las parejas de novios, de concubinos o casados?

d) ¿Cómo debemos intentar resolver los problemas que se presentan entre las parejas?

 

6. Oración comunitaria

- Creemos que María y José supieron resolver sus problemas dialogando con respeto y amor.

- Bendito seas, Jesús, Dios con nosotros, porque vienes a salvarnos de nuestros pecados.

- Gracias, José y María, por haber aceptado la responsabilidad de educar a Jesús.

- Perdón porque demasiadas veces no sabemos dialogar en nuestras familias.

- Te pedimos, Señor, que los hombres sepamos respetar a las mujeres y las mujeres a los hombres.

- Les suplicamos, María y José, que nos enseñen a superar los problemas de nuestra pareja a base de fe, amor y diálogo.

(Añada cada uno la oración que más necesite)

- Padre Nuestro, Ave María y Bendito.

 

7. Canto de despedida