Selección de
«50 PREGUNTAS ACERCA DE LA VIDA Y DEL AMOR»
Comunidad del L'Emmanuel. http://WWW.emmanuel-info.com/es/dossiers/50q.

 

VI. LA VIDA

 

24.
¿En qué momento nace la vida?
25.
¿La pastilla o las etapas del amor?
26.
¿En qué consisten los métodos naturales de control de la natalidad?
28.
¿Por qué desear que viva un niño deficiente,
si tiene todas las posibilidades de ser desgraciado ?
29.
¿Y la superpoblación? ¿se debe prohibir a los países pobres que tengan hijos?
30.
¿De qué recursos disponemos cuando no se pueden tener hijos?
 

 

24. ¿En qué momento nace la vida?

La vida humana comienza en el momento en que dos semicélulas sexuales, el espermatozoide del hombre y el óvulo de la mujer, se unen y forman la primera célula de un ser único, que no se repetirá jamás en la historia del mundo.

Pero repasemos un poco las etapas que desembocan en este instante maravilloso.

La glándula hipófisis del hombre, controlada por el cerebro, ordena desde la pubertad la fabricación de 100 millones de espermatozoides diarios. En una relación sexual se depositan entre 200 y 300 millones de estos espermatozoides en el cuerpo de la mujer, en el fondo de la vagina, cerca del cuello del útero. La entrada de los espermatozoides en el útero de la mujer es posible si, en este periodo del ciclo, el cuello del útero de la mujer se abre y segrega un líquido llamado secreción vaginal, que permite el avance de los espermatozoides hasta el óvulo.

En el caso de la mujer, durante el ciclo la hipófisis hace que el óvulo situado en el folículo madure y se abra dejando salir el óvulo que es aspirado por un extremo de la tropa. En este momento ya puede ser fecundado por un espermatozoide.

Desde que óvulo y espermatozoide se encuentran, desde el primer instante de la vida, ya no existe la menor discontinuidad entre el momento de la fecundación y lo que cada uno es en el día de hoy. Por eso toda agresión contra el embrión. tenga las semanas que tenga, es una agresión contra un ser humano.

El hecho que el cerebro esté desarrollado o no en los primeros momentos (las primeras células del cerebro se desarrollan durante la cuarta semana de embarazo) no es importante ya que el pequeño ya está formado "en potencia", con todos los elementos necesarios para su desarrollo. La vida de un ser humano único ya ha comenzado.

 

25. ¿La pastilla o las etapas del amor?

"La pastilla no es ningún producto ecológico. Si tenemos en cuenta la cantidad de hormonas que libera los ecologistas deberían retirarla del mercado". En todo caso, lo cierto es que la píldora contraceptiva bloquea mediante productos químicos el proceso biológico de la mujer y la hace infértil.

La diferencia con los métodos naturales de regulación de la natalidad es que los últimos permiten conocer con precisión la evolución del ritmo fisiológico sin suprimirlo, conocer la alternancia de periodos en que la mujer no es fértil y de periodos en que es capaz de dar la vida.

Un hombre que ame de verdad a su mujer no puede permitir que por culpa de la pastilla se limite permanentemente a no ser más que una parte de ella misma, a un estado que además tiene consecuencias psicológicas y a veces médicas.

Amar es reconocer y acoger al otro en todas sus dimensiones: su mirada y su cuerpo, sus sentimientos, sus gustos, toda su personalidad, su alma y todo a lo que aspira la belleza, bondad y la sinceridad. En resumen, su dimensión de eternidad.

Y el hecho de estar abierto a la vida con esta capacidad que tiene en ciertos momentos de dar la vida ¡Esta alternancia femenina no es un error de la naturaleza!

En una pareja que considera las etapas del ritmo femenino como una riqueza que forma parte de la verdadera mujer, el hombre permite que su mujer lo sea de verdad. Al hacerlo el hombre adquiere también su verdadera dimensión, la de poder optar por dar la vida de forma responsable. Pueden, también, espaciar los nacimientos de sus hijos y ver cómo el deseo se renueva y cómo las distintas formas de afecto escriben la historia de su amor.

 

26. ¿En qué consisten los métodos naturales de control de la natalidad?

Se trata de un conjunto de métodos basados en la observación del ciclo femenino. En efecto, en un ciclo normal, la mujer sólo es fértil determinados días. Cuando su cuerpo se prepara para una eventual acogida de la vida, emite ciertos signos que se pueden observar si se presta un poco de atención :

Por lo tanto, estos signos permiten que la mujer conozca sus períodos de fertilidad o de infertilidad . Si la pareja desea tener un hijo, podrá unirse sobre todo en los períodos fértiles, mientras que si no lo desea, escogerá los períodos no fértiles.

Este método da lugar a las "etapas del amor": momentos de unión física y momentos en los que el amor se expresa de otras formas. La gran mayoría de las parejas que utilizan los métodos naturales comprueba que esta alternancia permite un mayor dominio de sí mismo, más diálogo y comprensión mutuas. La aceptación del otro en todas sus facetas, el respeto de la capacidad de dar vida tanto de la mujer como del hombre, suponen un amor más amplio y más profundo. Respecto al deseo, en vez de debilitarse, se renueva.

Cuando estos métodos se aplican bien, su fiabilidad es excelente. Naturalmente es necesario ser muy regular en la observación y tener el apoyo del marido y es indispensable contar con su colaboración para poner en práctica este método. ¿No resulta extraordinario y mucho más sano comprender lo que ocurre en nuestro cuerpo y vivir a su ritmo?

 

28. ¿Por qué desear que viva un niño deficiente, si tiene todas las posibilidades de ser desgraciado ?

¿Su vida será feliz o desgraciado? Esto no depende de la gravedad de su deficiencia. No depende del número de células de su cerebro. Depende de su entorno, pues lo esencial de su felicidad y de la nuestra es amar y ser amado.

El niño al nacer no sabe nada del drama que se vive en su entorno pero lo siente a través de todas las fibras de su ser. Por el tono de voz, por la dulzura o la indiferencia de los gestos, por el tiempo, tranquilo o angustiado que se le dedica, sabe si es acogido o rechazado. Incluso aquél con una deficiencia que parece afectar todo su ser, sin duda es una persona. Cuantos padres como el filósofo Emmanuel Mounier, frente a su pequeña Françoise cuya inteligencia parecía completamente mermada, han presentido una presencia que les invitaba a un "plus" de amor, de esperanza y de ternura.

Pero al no encontrar ningún apoyo, muchos padres son casi incapaces de este amor incondicional. Es necesario rodearse de toda una red de amigos y cada uno de nosotros puede ser uno de estos amigos.

 

29. ¿Y la superpoblación? ¿se debe prohibir a los países pobres que tengan hijos?

Existe una enorme presión sobre los pueblos de los países pobres para que reduzcan su natalidad, a menudo con medidas obligatorias y totalmente contrarias a los derechos del hombre. Por ejemplo, para ser contratado en determinadas empresas, hay que aportar un certificado de esterilización... Los organismos financieros internacionales también acostumbran a supeditar su ayuda a la aplicación de estas medidas. Pero la difusión de la anticoncepción en los países pobres no se debe a la preocupación por verles salir del subdesarrollo, sino sobretodo al miedo de los países ricos ante la amenaza de una oleada humana atraída por sus riquezas. ¿Acaso no leemos actualmente que la expansión demográfica del tercer mundo constituye una amenaza, o la amenaza principal, para la conservación del medio ambiente?

«Son tan pobres porque son demasiados». Esta afirmación responde a las teorías malthusianas (enunciadas por Malthus, economista inglés del siglo XVIII), que aún hoy día tienen muchos seguidores. La solución sería entonces que una población menos numerosa llevaría a un mejor nivel de vida.

Es cierto que un crecimiento demográfico demasiado fuerte puede frenar el desarrollo. Pero generalmente este desarrollo ya se ve obstaculizado desde el principio por situaciones de injusticia económica, un subdesarrollo crónico de la agricultura y una insuficiente voluntad política. Alimentar a 20.000 millones de personas es técnicamente posible con las actuales riquezas de nuestro planeta. El problema reside en que los países pobres no cuentan con medios par comprar o producir los alimentos necesarios.

Examinemos la afirmación inversa : «Son demasiados porque son tan pobres». Sabemos que en la mayoría de las civilizaciones, los niños se consideran como la principal fuente de riqueza futura: en el presente son la mano de obra más barata y en el futuro serán quienes se encargarán de mantener a sus padres ancianos. Como dice un documento de la Conferencia Episcopal alemana : «Reducir el número de niños sin hacer desaparecer las causas que llevan a los padres a desear muchos hijos, supone privar a los pobres de su única esperanza.»

Desde esta óptica, ¿es beneficiosa la pastilla? Estamos convencidos de que la difusión de que es objeto en los países pobres se basa en una visión distorsionada de la libertad y la solidaridad. Además, las mujeres no siempre disfrutan de su derecho a ser informadas de los efectos de los productos que utilizan. Algunos anticonceptivos siguen vendiéndose en el Tercer Mundo a pesar de estar prohibidos en Estados Unidos o en Europa: ¿Acaso existen dos justicias diferentes, una para los países ricos y otra para los países pobres? Por último, el fomento de las medidas anticonceptivas a menudo va en contra de las tradiciones culturales y religiosas de los pueblos; estas tradiciones preceden o refuerzan así, la defensa que la Iglesia lleva a cabo del derecho inalienable a la vida.

Concluyamos recordando que la Iglesia no se limita a criticar, sino que fomenta activa y eficazmente la planificación familiar natural que, también contrariamente a los prejuicios que de ella se tienen, se basa en principios científicos sólidos (ver cuestión 26). Su funcionamiento es sencillo, depende simplemente de la autoobservación personal y su precio es el de un termómetro La Madre Teresa, entre otros, enseña habitualmente estos métodos a los pueblos más desfavorecidos. Se trata de una solución a largo plazo, que coloca al ser humano en primer lugar.

 

30. ¿De qué recursos disponemos cuando no se pueden tener hijos?

Existe una enorme presión sobre los pueblos de los países pobres para que reduzcan su natalidad, a menudo con medidas obligatorias y totalmente contrarias a los derechos del hombre. Por ejemplo, para ser contratado en determinadas empresas, hay que aportar un certificado de esterilización... Los organismos financieros internacionales también acostumbran a supeditar su ayuda a la aplicación de estas medidas. Pero la difusión de la anticoncepción en los países pobres no se debe a la preocupación por verles salir del subdesarrollo, sino sobretodo al miedo de los países ricos ante la amenaza de una oleada humana atraída por sus riquezas. ¿Acaso no leemos actualmente que la expansión demográfica del tercer mundo constituye una amenaza, o la amenaza principal, para la conservación del medio ambiente?

«Son tan pobres porque son demasiados». Esta afirmación responde a las teorías malthusianas (enunciadas por Malthus, economista inglés del siglo XVIII), que aún hoy día tienen muchos seguidores. La solución sería entonces que una población menos numerosa llevaría a un mejor nivel de vida.

Es cierto que un crecimiento demográfico demasiado fuerte puede frenar el desarrollo. Pero generalmente este desarrollo ya se ve obstaculizado desde el principio por situaciones de injusticia económica, un subdesarrollo crónico de la agricultura y una insuficiente voluntad política. Alimentar a 20.000 millones de personas es técnicamente posible con las actuales riquezas de nuestro planeta. El problema reside en que los países pobres no cuentan con medios par comprar o producir los alimentos necesarios.

Examinemos la afirmación inversa : «Son demasiados porque son tan pobres». Sabemos que en la mayoría de las civilizaciones, los niños se consideran como la principal fuente de riqueza futura: en el presente son la mano de obra más barata y en el futuro serán quienes se encargarán de mantener a sus padres ancianos. Como dice un documento de la Conferencia Episcopal alemana : «Reducir el número de niños sin hacer desaparecer las causas que llevan a los padres a desear muchos hijos, supone privar a los pobres de su única esperanza.»

Desde esta óptica, ¿es beneficiosa la pastilla? Estamos convencidos de que la difusión de que es objeto en los países pobres se basa en una visión distorsionada de la libertad y la solidaridad. Además, las mujeres no siempre disfrutan de su derecho a ser informadas de los efectos de los productos que utilizan. Algunos anticonceptivos siguen vendiéndose en el Tercer Mundo a pesar de estar prohibidos en Estados Unidos o en Europa: ¿Acaso existen dos justicias diferentes, una para los países ricos y otra para los países pobres? Por último, el fomento de las medidas anticonceptivas a menudo va en contra de las tradiciones culturales y religiosas de los pueblos; estas tradiciones preceden o refuerzan así, la defensa que la Iglesia lleva a cabo del derecho inalienable a la vida.

Concluyamos recordando que la Iglesia no se limita a criticar, sino que fomenta activa y eficazmente la planificación familiar natural que, también contrariamente a los prejuicios que de ella se tienen, se basa en principios científicos sólidos (ver cuestión 26). Su funcionamiento es sencillo, depende simplemente de la autoobservación personal y su precio es el de un termómetro La Madre Teresa, entre otros, enseña habitualmente estos métodos a los pueblos más desfavorecidos. Se trata de una solución a largo plazo, que coloca al ser humano en primer lugar.